“Sobre eso… He revisado la oficina hace un momento y estoy bastante seguro de que él vino aquí anoche solo para disfrutar un poco de vino. Por lo que, tengo motivos para creer que volverá aquí esta noche para esconderse. Debido a eso, ¡sugiero que trabajemos juntos para atraparlo cuando anochezca!”, propuso Gerald.

Al escuchar eso, Harold supo que no debía decir que no.

“… Está bien, ¡vamos de acuerdo con ese plan! ¡Esperemos que funcione!”, respondió Harold aceptando la propuesta.

Con eso, Harold dejó el cadáver a sus subordinados para que lo cuidaran mientras él y Gerald comenzaban a hacer arreglos para su plan de esa noche...

Para cuando terminaron, se había instalado un equipo de monitoreo oculto por toda la oficina.

Ahora, todo lo que quedaba por hacer era esperar hasta la noche...

En la noche, las farolas ya comenzaban a brillar a medida que el cielo se oscurecía... Mientras más y más luces se encendían a medida que la noche se oscurecía, el interior del edificio del