Joseph nos llamó, ya íbamos a casa y de nuevo hizo lo mismo, Andrew solo dejo que subamos al auto Adam y yo, los demás en el otro auto, lo hizo adrede y se dirigió a mí para expresar. —Dianne, te pido por mi hermano, no quiero que cometa una locura, no lo dejes solo —Pero Andrew, yo debo ir a mi casa, se quedará solo en esos momentos, Joseph debe cuidar a su padre —No necesito que nadie me cuide Andrew —dijo Adam muy serio Andrew se dio vuelta acotando —Si lo necesitas, estás dolido, estás nervioso, la extrañas carajo, deja que Dianne llene ese vacío hombre, sabes que es cierto lo que estoy diciéndote Adam me observo y dijo —Dianne sabes que te amo, te lo dije, no pensé perder a Karla, eso no… quería, pero… no sé, la extraño mucho, ella era mi vida, mi alma y ahora… Me quedo solo, ver mi lecho frío sin ella, no sé si pueda soportarlo. Andrew exclamó —Adam, me converso el otro día lo que sentía por ti, somos hermanos a quien más se lo diría, por eso te digo, por favor Dianne, p
—Se te viene una odisea grande Dianne, conoces a Adam, quiere hacer lo que Él quiere, ojalá lo que te ama, lo doblegues para que no cometa una locura. —Si lo sé Andrew y voy a dejar que el deseo no me domine, estar cerca de Él sin hacer nada va a ser muy duro para mí —En verdad que se te va a hacer difícil, eres muy fogosa Dianne Solamente lo miré cuando lanzo ese comentario. Llegamos ya a la mansión Carter, entramos y Sophie nos recibió señalando a la sala, dejamos las maletas en la entrada y fuimos a ver, la novedad era que Adam estaba dormido en el sofá tranquilo, nos dijo que miraba la TV con los sobrinos y se durmió, Joseph estaba sentado allí frente a Él, entonces entre los dos hombres cargaron muy despacio a Adam y lo acostaron en su cama. Le saco los zapatos, lo acomode en la cama, lo tape con el edredón, estaba su semblante tranquilo, salí de allí y fui a la alcoba de Joseph, estaba sentado frente a la laptop de Él, lo abracé y me senté en sus piernas, mientras Andrew habí
Le devolví su beso de amor, lo acosté, le dije que iba a leer un libro y después me acostaría me hizo prometerle que no lo dejaría solo dormido y se lo prometí, se acomodó y se durmió, en cambio, yo me senté en la mesita con la lámpara prendida, saque una foto donde estábamos todos allí, toda la familia Carter y yo, en medio de Karla y Adam, los dos me tenían puesto sus manos en mis hombros, al verlos me puse a llorar, parecía una imagen tomada en forma de visión del futuro, pues se había cumplido lo que se veía. Tocaron a la puerta muy quedito, me levanté a abrir y era Joseph que al verme me abrazo y vio que tenía algo en mis manos, al ver la foto me miro triste y mis lágrimas rodando por mis mejillas y me comento. —No te atormentes Dianne, ¿mi papá ya se durmió? Esto lo dijo susurrando —Si ya se durmió, pero me hizo prometer que no lo dejaría solo dormido, oh Joseph duele esto, mañana cuando despierte va a ver el lado donde dormía tu mamá sin nadie allí Lo que Joseph me pidió me
Cuando me desperté en la mañana, sentí que me miraban y voltee mi cara y Adam estaba ya bien despierto, observándome sonriente y acariciándome mi cabello y soltó. —Buenos días, dormilona Lo miro, estaba sonriendo, no estaba triste, de que ese era mi miedo y le conteste —Buenos días, madrugador Nos reímos, pero se sintieron pasos que venían hacia el dormitorio y Adam se viró al otro lado haciéndose el dormido y la puerta se abrió muy despacio, dejando entrever a Joseph con cara somnolienta, llego hasta la cama, dio la vuelta se acercó a mí y me dio un dulce beso en mis labios y susurro. —Dianne… Dianne, despierta… despierta amor, se te ve linda dormida, Dianne Me moví como si estuviera despertando, abrí un poco los ojos y dije —Hola Bostecé largo, lo vi sonreír, se agachó a besarme, le devolví el beso y acoto —Dianne me voy a la universidad, mi papá sigue dormido, déjalo que duerma lo que quiera, así no extraña a mi mamá Lo miraba triste y yo contesté —Anoche ha
Adam me acariciaba tan despacio haciéndome sufrir porque ya quería que me poseyera, pero, en cambio, Él me besaba por todo mi torso, gemía tan lindo cada vez que su lengua pasaba por un pedacito de mi piel, lo miraba hacerlo se veía imponente, grandote como Él solo, sus manos me recorrían por donde más podía, cada vez que alzaba la mirada y se fijaba en mis ojos decía “Te amo” eso me hacía sentir dichosa su amor, algo que antes no quería, ahora lo necesitaba y cuando lo externaba era como si estuviera viajando por las nubes. Llego a mi coñito y su lengua comenzó a hacerme recorridos por mi pubis, después por mi botoncito, su lengua juguetona, el bandido me observaba cuando me lamía allí creo que le gustaba ver mis gestos de excitación, sentí su lengua dentro de mi vagina la movía alrededor tan sutil que apretaba mis piernas, pero su cuerpo era mi obstáculo para cerrarlas, metía y sacaba su lengua, pero al sacarla la ponía a un lado lamiendo hacia arriba y tocando mi botoncito sentía g
Estamos desayunando y llego Andrew se sentó frente a nosotros saludando a Mirian, ella solo se limitó a servir y seguir en sus cosas, mire a mis hombres allí sentados, idénticos, pero tan diferentes a la vez, me acerque al disimulo a Adam y le susurre que disimule un poco recién enterramos a Karla no debe reírse o estar feliz delante de los demás y lo escucho Andrew también.Ambos asintieron con la cabeza y disimularon muy bien, entonces solté lo que estaba pensando—Voy a visitar a Juddy y…Adam saltó de la silla, estaba tan nervioso que hizo asustar a Mirian que lo miro y Él dijo con voz temblorosa.—No me dejes solo… llévame contigo Dianne, no… quiero estar solo, no quiero, no quieroAndrew se levantó a tratar de calmarlo, me di cuenta de que no era disimulado, era cierto, empezó a sudar de los nervios y acote.—Cálmate Adam, por favor, te llevo entonces, cálmate, termina el desayunoMe miro ya más tranquilo, se sentó y Andrew también lo hizo, ambos terminaron, al levantarse juntos
Entramos ya a la universidad, Juddy se fue y nosotros caminamos hasta el rectorado, cuando el Doctor Custrings lo vio, lo abrazo dándole el pésame por su esposa y se sentaron en una banca, Adam no pudo controlar sus recuerdos y sollozo cuando conversaban.Yo tenía puesta mi mano en su hombro, mientras observaba el campus para ver si llegaba Sergey, pero justo el muy desgraciado demoraba carajo, Joseph venía ya por la parte peatonal y nos vio, camino hacia nosotros triste, pero serio, llego me beso en los labios, le dio un beso en las mejillas a su padre y saludo al rector, me dio la mano y abrazados fuimos para el parque de la Universidad, nos sentamos en una banca donde me tenía abrazada y a veces me besaba, hablaba y yo solo asentía, estaba desesperada que el idiota ruso no asomaba cuando vi a Juddy atrás de un monumento haciéndome señas hacia un lugar y lo vi, allí venía el muy estúpido.Juddy ya había fraguado como hacer que Joseph se aleje de mí, un amigo lo llamo, estaba con una
Se acercó a mí, me tomo en sus brazos, me puso al lado de la cama y ordeno—Desnúdate para mí, lento y bailando que parezca una stripperHabía un tubo en la habitación para eso y empecé mi baile erótico como lo aprendí en Asia, donde me enseñaron los trucos sexuales.Empecé mi baile erótico, daba vueltas muy despacio, prendí la consola y la música erótica para la ocasión comenzó, le enseñe mis movimientos aprendidos que me los reserve para el hombre que llegase a amar y aquí lo tenía recostado en un lado de la pared observándome, mordiéndose el labio inferior de lo que sentía por míMe subí en la cama y voló la blusa, mis manos ondeaban muy sutiles, me quede solo en ropa interior, lo observaba que no me quitaba la vista de encima, estaba gozando lo que yo hacía para Él.Fui al tubo para bailar en Él, mis movimientos sensuales estaban dedicados para mi hombre mi macho, mi mirada era de lujuria pura mi trasero apretaba el tubo subiendo y bajando como si lo acariciara, daba vueltas en es