P.V Guillermo
Tener a Bianca 2 veces en menos de 24 hs en mis brazos parecía una joda del destino. Le di pequeños golpecitos en la cara para intentar que reaccionara pero nada , estaba completamente desmayada. Vi como el idiota de Tomas se acercaba corriendo y me la apartaba de mis brazos. ¿Quien se cree que es para sacarme lo que es mio?, lo mire fijamente , mi cara decía claramente que si no se movía le iba a romper todos sus dientes. Chico inteligente, dio un par de pasos atrás.
Bianca y yo nunca se sintió correcto, es mas, estaba claro que nosotros dos nunca íbamos a estar juntos otra vez, pero antes muerto que este con este nene de mama.Veo a la amiga de Bianca, la del pelo gris, bajar las gradas desquiciada.
Decidimos ir a una cafetería que por las noches siempre se convertía en un bar, si bien no estaba dentro del campus, era el lugar favorito para pasar el rato de los estudiantes.Es increíble cómo cambia su aspecto, su versión de la tarde es una cafetería con dejos de biblioteca, con olor a vainilla y pastelitos recién horneados; pero su versión de la noche me hacía acordar a un sótano para pecar todo lo ue quisieras, el olor a vainilla se cambiaba por olor a sudor por los cuerpos bailando sin prejuicios y los pastelitos recién horneados eran sustituidos por tragos de autor.Nos sentamos en una de las mesas que dan a la ventana, la vista da directamente al estacionamiento, no es la gran cosa. Mika se sentó junto a mí y los chicos se sentaron enfren
Me encerré en mi cuarto dando un portazo. Si tuviera una bolsa de boxeo estaría repartiendo piñas, pero lo único que tenia a mi alrededor eran las paredes de mi cuarto y vamos a hacer francas, este pibe no valía unos nudillos lastimados.No soy feminista no porque no quisiera, sino porque es un movimiento del que no me siento parte, toda mi vida estuve metida en una de esas bolas de cristal con nieve, por lo que nunca pude identificarme con los problemas e ideales por los que luchan, me sentiría hipócrita al levantar su bandera.Pero hace poco tuve una conversación con mi hermana (feminista por excelencia), que me hizo darme cuenta, que mi bola de cristal, es uno de los paradigmas que quieren romper.Hoy me sentí un poco mas cercana a ellas, entendí lo que es sentirse impotente e insignificante y lo mas indignante es que Tomas, estoy segura, que no cree q
Sentir la voz de Teo me volvió a la realidad , lo empuje lo mas lejos que pude con mis pies y me pare del sillón. Me acerque a donde estaba y lo mire con fuego en mi mirada. Teo se iba acercando hacia donde yo estaba, imagino para sacarme del living, pero yo no podía dejar de mirarlo con rabia, hubo un momento que fue muy claro, que el entendió lo que había hecho y bajo su mirada. Allí yo me arme de valor y me arrodille a su altura y le dije :- Espero que no me vuelvas ni a dirigir una sola palabra- Bianca , perdoname no se que me paso -me dijo el, extendiendo su mano hacia mi- No te atrevas a tocarme si no queres que te corte la manoTeo me toco
Mi grito de asombro alerto a mis compañeros, quienes con la mirada me preguntaron si estaba todo bien. Yo que aun no caía del asombro les respondí que si con un pequeño gesto con mi cabeza.Ya Tomas había alcanzado un nuevo nivel de hijaputes , primero se metió con mi cuerpo y ahora se metía con mi integridad mental. Tarde unos minutos en volver a encontrar mi voz , cuando lo logre le dije a Tatiana :- Y tu deberías ser mas inteligente y no creer todo lo que te dicen, me avisan cuando tengan idea de lo que quieren pedir -y lo mas orgullosa posible me di media vuelta , encaminada a la barra.Sally , que noto enseguida mi incomodidad me pregunto si quería que ella siguiera con esa mesa, pero le respondí que no, que no iba a perder
Tragáme tierra ! ¿Que imagen estaba dando en mi primer dia? En vez de estar defendiendo a capa y espada la oficina de mi jefe de este posible ladrón de cuarta, tengo mis piernas enredadas en sus caderas, y los labios rojos e hinchados. Me desespero por apartarme de Guillermo lo mas rápido posible y cruzo los dedos para que Eric no haya visto demasiado. SOY TAN ESTUPIDA, TAN ESTUPIDA, ¿Como puede ser que me deje arrastrar por Guillermo en esto?, como puede ser que sus labios y sus manos en mi cuerpo sigan teniendo el mismo efecto, me hacen olvidar toda la mierda y solo soy consciente de el y yo, nada mas.- ¿Que carajo pasa acá? -dice Eric con un claro tono de reproche, lo que no me queda claro es si el reproche se dirige hacia mi o hacia la persona que tengo al lado.
Lo observe caminar lentamente hacia la cama donde yo estaba sentada. Cada paso que daba era una promesa, estoy segura que caminaba lento a hacia mi para darme tiempo de arrepentirme, algo que no iba a suceder. Mis ojos no se podían apartar de su cuerpo. Sus músculos eran naturales, no se si me explico, no era una persona que al verla pensabas que pasaba demasiadas horas en el gimnasio. Tomo su campera de cuero y se la saco, dejándola apoyada en la silla de mi tocador, yo no perdía de vista ninguna de sus muecas, tenia una sonrisa divertida en su cara, como retándome a que le dijera algo. Luego a medio camino hacia mi se saco, MUY lentamente su remera blanca, dejándome a mi con la boca seca, la poca luz que entraba por las rendijas de mi persiana , se veía relejada en su pecho, era una imagen digna para fotografiar y guardar para la posteridad.
Lo vi salir de mi cuarto dando un portazo. Seguro había despertado a todo el bloque. Aun no comprendía lo que había pasado. ¿Porque se fue así? ¿Porque se puso así? , lo de mi supuesta virginidad si fue una sorpresa, todos estos años lo odie porque pensé que se había aprovechado de mi y luego me había abandonado. Pero no, solo me había abandonado, como ahora, sin caricias y palabras lindas. Solo se fue, luego de decirme una sarta de disparates.No pienso llorar, no me lo voy a permitir. Lo hecho , hecho estaba. No valía la pena hacerme la arrepentida porque no lo estaba , nunca en mi vida algo se sintió tan bien. Era una sensación de poder y completud. Mi cabeza no pensaba en ninguna otra cosa mas que el aquí y el ahora, ¿Lo volvería a hacer? Seguro! ¿Con &
Ni bien salimos de la cafetearía no tarde ni dos segundos en darle la cachetada de su vida, mis ojos soltaban llamas rojas, estaba segura que no había nada que el pudiera decirme para poder justificar sus acciones. Me puse los brazos en las caderas esperando sus palabras. El se tomo su mejilla y me miro con una mezcla de rabia y resignación.- Supongo que me lo merecía - ¿ Te parece ? ¿ Capaz que me excedí?- le dije con un claro tono irónico.- Queríahablar contigo a solas para pedirte las disculpas correspondientes, me comportecomo un verdadero imbécil- yo mas que imbécil, dirí