Capitulo 5

Isabella miraba a su abuela y en ese momento miro que su abuelo se acercaba hacia donde se encontraban sus dos nietos, no podía creer que su exesposa se encontrara ahí, Edmond se acerco hacia el lugar, no quería comenzar una pelea o discusión. 

—¿Qué haces aquí,Antonella? — hablo Edmond con voz tranquila, pero dejando en claro que no permitía un acercamiento —  

— me invito, Rose, nuestra nieta, al parecer a ella si le importa mantener una buena relación con su abuela — hablo Antonella quien miro a su exesposo y sus otros dos nietos — 

—No tengo idea, que diablos quieras o estes buscando, pero te he pedido que te alejes de mi familia — pidió en tono molesto Edmond — 

— igual es mi familia, y ahora quiero estar cerca de ella — hablo la mujer con altivez — 

—¿quieres estar cerca de ella?, y dime Antonella, ¿has visitado a Jim? — pregunto el hombre con creciente enojo en su voz — 

Los dos jóvenes miraron a sus abuelos, al parecer ambos se odiaban, y su abuelo Edmond siempre se mostraba tranquilo, ecuánime y apacible ahora se comportaba un tanto diferente, sabían que la culpa la tenía su abuela. 

— creo que es hora de que te marches, y si quieres comenzar a recuperar a tu familia, hazlo por tus hijos, por Joseph y por Jim, ya perdiste a uno, bueno yo igual lo perdí, pero tengo otros dos, que, si bien Jim no es mi hijo de sangre, si lo es de corazón — hablo Grayson — ¡ahora vete! — le ordeno a la mujer. 

En ese momento, Edmond se llevó la mano al corazón y cayó al suelo ante los ojos de sus dos nietos y Antonella, que al momento en que el hombre cayo al piso, esta se hizo hacia atrás para echarse a correr con dirección a su automóvil. 

—¡ABUELO! — gritaron tanto Alexander como Bella, y se agacharon — ¡auxilio!, ¡un médico! — gritaba la joven Bella, con desesperación en su voz. 

—si una ambulancia, mi abuelo cayo desmayado, creo que fue un ataque al corazón — hablo Alexander, mientras Bella, le aflojaba la corbata, quitaba el cinturón — si, ya quitaron corbata y eso, por favor apurense. 

Bella tocaba el cuello de su abuelo, aun había pulso, pero muy lento, «por favor, por favor que no se muera», eran los pensamientos de Bella. 

—la ambulancia ya viene, no te preocupes Bella — le dijo el chico, unas personas se comenzaron a acercar mientras miraban que el señor Grayson se encontraba en el suelo. 

Emma llego corriendo y se agacho, la madre de las gemelas era médico, una reconocida psiquiatra — ¡Oh,Dios mío!, haganse a un lado todos, debemos mantener el lugar despejado, ¿ya llamaron a la ambulancia? — pregunto a sus dos hijos — 

— si, mama — dijo Alexander a la mujer — no debe de tardar en llegar — hablo el chico mientras abrazaba a su hermana, quien tenia lagrimas en los ojos. 

— ¿Qué sucedió? — pregunto Joseph, mirando a su padre en el suelo y su esposa, checando el pulso — 

— la bruja, la bruja de la abuela, vino, estuvo aquí, y todo debido a que la invito Rose, y ella bien sabe que mi abuelo y tú, el tío Jim no la quieren — hablo Bella — es culpa de Rose, ella la invito — se acomodo en el pecho de su hermano quien igual tenua el rostro preocupado y lleno de enojo. 

Joseph se quedó completamente anonadado; su hija habia invitado a su madre, ¿desde cuando se llevaban tan bien?, no era momento de preocuparse por ello, en ese momento llegaron los paramedicos y atendieron a Grayson padre, se lo llevaron de manera inmediata al hopsital ya que su estado era grave. 

Emma subio a la ambulancia con él, necesitaba ir monitoreando como iba su padre, mientras tanto Jospeh iba a comunicar que la fiesta se había terminado puesto a que su padre habia caido enfermo. 

— ¡Pero papá, es la fiesta de mi cumpleaños! — exclamo de manera enojada la chica —además de que nada va a cambiar si voy o no voy al hospital — Rose miro a su padre. 

Joseph no podía creer lo que se encontraba escuchando, mientras tanto los invitados de Bella, amigos de la preparatoria y universidad se comenzaban a retirar, unos le decían que esperaban que su abuelo se recuperara, al contrario, los amigos de Rose seguían en la fiesta y bebiendo. 

— te lo pido por favor, Rose, despide a tus amigos, tú abuelo está en camino al hospital, y tenemos que ir con él, no es que lo desees o no, es una m*****a orden — hablo el padre de las chicas mirando con enojo a su hija —

La chica hizo una mueca de enojo y se despidió y pidió que sus amigos se fueran, en ese momento se acercó Isabella a su padre, en ese momento James se acercó para despedirse, fue cuando Rose le dio un beso suave en los labios, la cara de Bella y su corazón sintieron que se estrujaban, pero en ese momento no se pondría a pensar en eso, lo que más le preocupaba era que su abuelo se encontrara bien. 

— Espera, dame tú celular — dijo Rose al chico; James le dio el celular a la chica quien de manera inmediata anoto su teléfono — llámame, estaré esperando tu llamada —el chico solo asintio,pero evito dirigirle la mirada a Bella; la mujer joven ignoro a su amigo, ya después hablaría con él. 

—¡vámonos! — dijo el padre a sus tres hijos —  

La familia subió a uno de los lujosos autos que se encontraba siendo conducido por un chofer de la familia. 

—¡papá, tengo miedo! — le comento Bella a su padre, el abuelo no se puede morir — la chica se recargo en el hombro de su padre y se miraba muy abatida, Rose se encontraba preocupada por su abuelo, pero las palabras de su abuela, días antes resonaban — “El me echo de la casa, y me quito a mis hijos, cuando murió mi querido Edward no me dejo estar presente, y tú padre fue envenenado por él” — 

Al llegar en el hospital, los recibió Emma tenía el rostro entre angustiado, pero se miraba serena — no se preocupen, no ha muerto, esta grave si, y se encuentra en terapia intensiva y tiene un buen equipo de médicos — sonrió la mujer, ahora tenemos que esperar, podrán pasar a verlo de uno en uno, si es que quieren — dijo ella mirando a su esposo. 

Bello abrazo a su madre y se puso a llorar, la mujer consoló a su hija, el joven Alexander se secó las lágrimas, espera que su abuelo no muriera, mientras tanto Rose, hacia una cara, de para esto termine mi fiesta, 

La noche fue algo larga, y los médicos no daban noticias, hasta que uno casi al amanecer llego y les comunico — “el señor Grayson paso la noche, se recuperará” —

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