Zero.Si hay un día de la semana que odio, ese seria los domingos o en específico los Domingos que tengo que ver a mi padre, no me malinterpreten amo a mi papa y es una de las personas más importantes en mi vida. Pero desde que mis hermanos murieron no volvimos a ser los mismos.Desde hace poco más de tres meses que mi papa alquilo un departamento aquí en New York, están terminando un gran proyecto aquí en la ciudad por lo que decidió hacer eso a tener que estar viajando constantemente y al menos una vez al mes me pide que me reúna con él.Siempre con el mismo propósito, convencerme para regrese a casa, no a vivir de visita, tengo poco más de año y medio que no veo a mi mama y sé que suena mal pero en serio no soporto estar en esa cosa, con todos esos recuerdos y con su expresión fingiendo estar feliz de tenerme allí cuando sé que lo único que ve en mi es el recuerdo de Niko.Termino de arreglar mi mohicano y suspiro frente al espejo, me siento incomodo ante la idea de ir a verlo, au
Zero.Lily y yo andamos despreocupadamente por el estacionamiento del edificio donde vivo, después que se dio una ducha, bajo y almorzamos con su familia, es agradable estar con ellos, me siento aceptado, querido y como si fuera parte de ellos, Sal se asegura de consentirme siempre que voy por lo que en serio disfruto mucho estar con ellos.En realidad son como mi respiro de aire fresco, de alguna manera llenan el vacío que crece a diario en mí, los había extrañado y no lo había notado hasta que estuve en la mesa riendo con ellos. Lily no paro nunca de mirarme, sonreía y me guiñaba el ojo de vez en cuanto, pero vi tristeza en sus ojos y eso me molesto.Odio cuando siente pena por mí, odio cuando deseo tener eso que tengo con ellos con mi familia, pero la verdad es que no hay cabida para mí con ellos. Todo el camino hasta aquí lo hicimos en silencio, sabe muy bien que paso algo entre Ethan y yo. Lily puede ser el ser más curioso y patea cojones de la vida pero en ocasiones como esta en
Brook.Azoto la puerta con fuerza detrás de mí, la ira corre por mis venas quemándome con intensidad, Zero es una de esas pocas personas que detesto, quizás la única, en serio es tan pesado, odioso, grosero, irritante, es un patán. Camino con rapidez hasta el ascensor y comienzo a presionar el botón con fuerza y rapidez, como si el simple gesto hiciera que el aparato ascienda más rápido.Los segundos pasan y el puto aparato no sube, y continuo presionando frenéticamente, me detengo y comienzo a andar de un lado a otro, exasperada, no debí haber acompañado a Kyle, que tonta. Debí haberme ido con Sarah y los chicos en su auto, pero no a él se le ocurrió que podría irme con él y yo por alguna estúpida razón estuve de acuerdo.Kyle me agrada aunque a veces lo siento un poco irritante, creo que es un chico interesante y las cosas que vi en su habitación el otro día creo que son la razón por la que le estoy dando una oportunidad, además no me gusta juzgar a las personas sin conocerlas. Pero
Brook.Ha sido un día interesante, mi última clase fue increíble y finalmente pude lucirme en ella, por lo que me siento realmente orgullosa, camino despreocupadamente por el pasillo hacia el estacionamiento, hoy quede en ir al refugio para tener una entrevista y para ser voluntaria allí, así que creo que también eso me anima bastante.– Hola preciosa – esa sexy voz la reconozco, me giro para ver a Kyle que camina hacia mí con unas gafas de sol y su enorme sonrisaNo lo veía desde el domingo, mis ojos se desplazan por su cuerpo detallando su aspecto, lleva un jean desgastado y roto en las rodillas, unas botas color marrón y una franela blanca que deja al descubierto sus brazos cubiertos de tinta, además unas Rayban, su sonrisa radiante me hace sonreír– Hola Kyle – le saludo de vuelta, se detiene a escasos centímetros de mí y se inclina para besar mi mejilla– ¿A dónde vas? – pregunta con curiosidad una vez se ha enderezado– Tengo una cita – murmuro mirando sus labios donde hay un co
Me miro en el espejo analizando mi outfit, aunque solo es un café no quiero ir como una loca, me gusta arreglarme así que lo hago seguido, no soy tan refinada como Sarah pero no diré que no lo hago, pero sería mentir.Aunque honestamente tampoco llevo la gran cosa, unos jeans azul claro, rotos en las rodillas, una franela blanca, una cazadora color cian y mis converse blancas, además que he decidido llevar el cabello suelto, es una noche fresca por lo que no tiene sentido recogerlo.Una vez lista salgo de mi habitación y camino a la sala donde Sarah está terminando sus asignaciones, en cuanto la veo rio– Tu no cambias, te dañaras la espalda Sarah – le suelto cuando veo que esta acostada sobre la alfombra baca abajo escribiendo sobre una de sus libretas– Es la mejor forma que tengo para hacer esto, si no me dormiré – dice tomando algunas palomitas de maíz de un cuenco a su lado, en cuanto se fija en mi atuendo frunce el ceño – ¿A dónde vas? – dice sentándose y cruzando sus piernas mi
Después de algunos minutos de conversaciones sobre el estudio y su trabajo como tatuador, finalmente se acerca a nosotros una chica muy guapa, que al verlo le sonríe alegremente– Hola Kyle – dice con coquetería y no puedo evitar reír– hola Stef ¿cómo estás?– muy bien, ¿te traigo lo de siempre? – el asiente y me ve– ¿Qué vas a querer? – pregunta en mi dirección– un chocolate con extra de crema y ralladura en la cubierta – agrego, el ríe y ve una vez más a la chica que asiente mientras toma la orden– ¿algo más? – pregunta mirándolo primero a él y luego a mi– si, por favor tráeme algunas donuts, sabes las que me gustan – agrega y la chica ríe con entusiasme, asiente y se va.– vienes seguido ¿no? – él sonríe y asiente– Suelo hacer mis trabajos aquí, es un lugar tranquilo, se puede estudiar y además no tengo que moverme para prepararme comida o beber algo, todo en un mismo lugar – agrega con simpleza y rio– Cuéntame más sobre ti – pregunto con interés y el ríe– Aún no sé nada d
Luego se endereza y camina hasta su camioneta, abre la puerta para mí y me ayuda a subir, después cierra y camina al otro lado, para subir, cuando lo hace está sacando su teléfono del interior de uno de sus bolsillos, revisa la pantalla y frunce un poco el ceño– Disculpa – dice mirándome antes de contestar – ¿Qué pasa Zero? – Pregunta en cuanto responde y mi cuerpo se tensa ante la mención del gemelo malvado de mi amor platónico – no, estoy en el café – hace una pausa y suspira – está bien, ¿pero lo necesitas ahora? – Pregunta girándose y observando el asiento de atrás, donde por curiosidad observo y hay un bolso – ¿mierda Zero porque no bajaste tus porquerías del auto cuando llegamos a casa? – suelta de mal humor y luego suspira – no, no es eso – dice poniendo sus ojos en blanco – está bien ya, te lo llevo ahora – vuelve a poner sus ojos en blanco y niega con la cabeza – más te vale que lo pagues – agrega en tono divertido y finaliza la llamada.Se gira para verme y suspira, enciend
Zero.Después que Kyle se va con Jake vuelvo a quedar solo en el departamento, suspiro echando de menos a Lily y sus loqueras en mi casa, pasa mucho tiempo aquí entre semana, por lo que estos días sin sus comentarios mordaces y esa particular vibra sexy y sensual han sido particularmente tranquilos.Miro hacia la puerta una vez más, pensando en Jake, su expresión de sorpresa cuando me disculpe fue un poema, en serio no nos toleramos, aunque debo reconocerlo, Kyle tiene buen gusto, la chica es hermosa, solo que como le dije no es mi tipo, no me van las niñas buenas que hacen siempre lo correcto y son todas puritanas.Suspiro poniéndome en pie, tomo el plato de pasta vacío y lo dejo en el lavavajillas, tomo el libro y mi teléfono, lo desbloqueo y reviso un par de sms que me han llegado mientras cenaba, uno es de Ethan, no sé cuántos sms suyos e ignorado y cuantas llamadas, la verdad no me apetece en este momento, hablar con mi progenitor. Así que simplemente elimino el sms sin si quiera