Oriel Moreau. Beck mira por un largo rato a Jade como si buscara algo en ella que no logra descifrar, me cruzo de brazos mientras esperamos a que comience el lanzamiento del nuevo perfumen de nuestra línea “Amor”.— ¿No ha estado rara? — pregunta haciendo que la mire también, se ve hermosa con ese vestido, habla animadamente con Andrews, no le veo nada raro — Está como diferente — me río un poco haciendo que me mire a la cara.— Lo que pasa es que nuestro matrimonio se ha vuelto más llevadero y armonioso, eso es lo que pasa, estamos demasiado bien que hace que se vea hermosa porque me tiene como esposo — me mira y rueda sus ojos por mi ego.— Tú te ves demacrado — lo miro ofendido mientras se va alejando de mí. La secretaria se acerca y la miro.— Ya vamos a comenzar, la entrevistadora ya está lista y esperando — avisa con su tableta, miro a Jade un momento más y camino hacia al tablado, las cámaras se encienden y la entrevistadora comienza a hablar, todos están sentados.Hacia un t
Oriel Moreau.Una semana después.El avión aterriza en Los Ángeles, al bajar respiro el aire fresco de mi ciudad después de una semana completa en Francia, que por suerte fui solo y no con mi secretaria para evitar problemas futuros con Jade de la cual no sé mucho después de comunicarnos nada más 3 días en toda la semana que estuve en París analizando las ventas que ha generado la empresa. Al salir del aeropuerto las veo a ambas, Olivia sale corriendo a mí y me abraza, la alzo sin dejar de mirar a su madre que me sonríe, me acerco y la beso aun con Olivia en brazos.— ¿Te fue bien? — pregunta apenas me separo de su labios, asiento y sonríe, entramos al carro y comienza a manejar — Beck ha estado estresado esta semana, más con tu secretaria buena para nada — la miro molesta — Ahora que deje el trabajo, me pide ayuda por el simple hecho que la secretaria no hace su trabajo, de verdad que no entiendo porque sigue teniéndola en la empresa — la miro un poco y miro por el retrovisor a Oliv
Jade McCain.Olivia cumplía en dos días y yo encima de tener en la cabeza todo lo que hay que hacer para su cumple, también cargo en la cabeza que he vuelto a quedar embarazada, lo que no puedo creer, esto no estaba para nada en mis planes, habían muchas cosas que no estaban en mis planes, no de está manera, no cuando hay muchas cosas en juego, encima de que me estaba cuidado, en serio que no sé en que momento pasó, creí y jure que había tenido mi periodo, pero solo era una pequeña ilusionada que me había creído.Mamá tenía razón cuando me miró bien a la cara con sorpresa y curiosidad, era claro, ella conocía mejor mi cuerpo que yo misma, ahora no sé cómo decirle a Oriel, sobre todo con la nueva amenazada que me dio su madre con arruinarme si no me divorciaba, yo queriendo ganar algo de fama por mi parte con mi arte y viene a pasar esto.Escucho la puerta abrirse y puedo reconocer los pasos que da mi madre al caminar, no hacia dos semanas que la habíamos visitado, pero ella si o si, v
Jade McCain. Esa noche sentí frío, me sentí sola y vacía, no me había dado cuenta que cuando volví a tener a Oriel en mi vida junto a Olivia como la familia que siempre quise, me diera cuenta que me sentía en soledad cuando no lo tenía cerca. Pase la noche durmiendo sola en esa habitación hasta el día después, cuando desperté, estaba sola como cuando me quedé dormida, pronto se acaba el verano, solo espero que con esto pueda solucionar algo. Aunque sienta rabia y dolor en estos momentos que solo hace arder el estomago y la garganta, sobre todo el pecho en donde mi corazón se ha hecho añito por algo que yo dije, duele. Estaciono el carro frente al local de karate en donde tiene sus prácticas Olivia, me bajo con ella en silencio, entramos y me siento con los otros padres, Olivia comienza a saludar a sus amigos y a estirarse para la práctica. Mi teléfono vibra y veo que me ha llegado un mensaje de Oriel, trago saliva. “Espera un poco, te daré el divorcio” Esa simple frase tan seca me
Oriel Moreau. Niego a lo que dice Beck, después de un mes en el que ya no nos hablábamos más que por la consulta, Jade terminó por mudarse de casa y ahora Beck me está diciendo algo que no me creo. — ¿Estás seguro de lo que estás diciendo? Esto es grave, Beck, lo que dices es un asunto grave — suspira y asiente. — Yo mismo la escuche, estaba hablando con tu madre, le dijo que ya se había alejado de ti, que la dejara en paz, encima de que no iba a firmar nada porque ya había firmado un acuerdo de bienes contigo, algo que no ha pasado, no soy sordo, Oriel — me desordeno el cabello suspirando por completo — ¿No te parece raro? — pregunta y niego — Sabes muy bien que tu madre cambió demasiado después del accidente, o como dijo ese abogado ese día, puede que ella no sea tu madre, que si haya muerto junto a tu hermano mayor — me levanto de la silla para mirar hacia la ventana. — Beck… es mucha información — sé que se levanta. — ¿Es mucha información? O simplemente no quieres aceptar que
Jade McCain.Observo todo el cobertizo y sonrío al ver la pintura que he terminado frente a mí, una hermosa pintura de dos niños, una niña y un niño tomados de la mano caminando por un campo lleno de flores amarillas, algo muy igual a mi sueño. Me estiro en la silla y me levanto poniendo una mano en mi espalda, mi vientre ha crecido ahora que estoy por el séptimo mes, ya entrando al tercer trimestre, por lo que falta poco para dar a luz a los gemelos, aunque aun no se confirman que serán.Aun así, les he comprado ropitas de colores neutros en caso de que tenga que esperar a que nazcan y no se haya revelado los géneros de lo bebés. Escucho el timbre de la casa y salgo a ver, Olivia se encontraba en clases, después de año nuevo se mudó conmigo, pero los fines de semanas se queda con Oriel.Y hablando del rubio, lo veo frente a mi puerta, lo miro por un segundo y lo dejo pasar sin decir nada, esta era la primera vez que me visitaba desde que me mudé hace 3 meses, me siento en el sofá y h
Oriel Moreau.Me separo de sus labios y quito una gota de lágrimas que deje escapar, la miro un poco más con sus ojos cerrados y me alejo limpiando mis ojos.— Regresemos — no la miro, pero sé que me sigue a paso lento, entramos y nos volvemos a sentar, uno a lado del otro, Beck me mira, pero no hago nada, ella vuelve a leer el papel y siento mi corazón romperse dentro de mi pecho. Regresa la carpeta como si hubiera leído todo, solo asiente y el abogado se levanta abriendo las carpetas.— Firmen aquí y aquí, y estarán divorciados, se le dará una casa donde vivir y la custodia será compartida, así que no hay pensión, encima de que se le dará un porcentaje a la señorita McCain de la empresa y los millones, encima de que la mansión en Francia queda a su nombre como dicta el testamento — ella simplemente firma el documento sin protestar nada como creí que lo haría cuando no quiso tener nada de la herencia, pero yo no quiero que se quede sin nada, miro el documento un momento y ya no puedo
Beck Logan.Verano, dos años atrás.Creí que regresaría a Los Ángeles cuando me aburriera de Nueva York, pero mi hermano insistió en que volviera, lo que una vez fue el hogar de nuestros padres, se había vuelto el infierno para mí, pero si mi mejor amigo me necesitaba, yo tenía que estar ahí para él, justo ahora estoy parado delante un montón de hombres en trajes, algunas mujeres, incluso una me ha llamado la atención, la mujer parada tras de Oriel.Pero claro, no podría meterme con esa mujer cuando a lengua sé que mi amigo está loco por ella, después de esa reunión, no creí que Byron, mi hermano menor, terminara por mandarme a una cita a ciega cuando había quedado con Oriel para hablar de la empresa y el puesto que me había entregado en bandeja de oro, razón por la que había regresado. Lo que hace uno por la familia después de 15 años sin vernos— No pensé que mi cita de hoy fuera la adorada secretaria de mi amigo — la veo sonreír de cierta manera, aunque fui un idiota esta mañana, e