“¡La Corporación Corazón de Piedra no es un lugar en el que puedas irrumpir sin permiso!”.

“¡Tampoco puedes darle una paliza así al Director ejecutivo Murray!”.

“¡Que alguien llame a la policía! ¡Hagan que arresten a estos dos!”.

Los altos mandos y los accionistas trataban desesperadamente de escapar de la situación.

Algunos incluso gritaban su descontento, mientras que otros llamaban a la policía.

¡Paf, paf, paf!

Harvey no se contuvo ante la apasionada multitud y mandó a cada uno de ellos a volar con una bofetada en la cara.

“Tengo la Insignia de la Agencia de Seguridad de Longmen. Eso significa que poseo el treinta por ciento de las acciones de la empresa”, dijo él.

“Al mismo tiempo, tengo un contrato que dice claramente que Joseph me cedió también su cuarenta por ciento de acciones”.

“En pocas palabras, tengo el control absoluto de la empresa”.

“¡Vendré y me iré a mi antojo!”.

“¡Golpeé a Ozzy porque está intentando quitarme mis acciones con tácticas maliciosas!”.

“Cada u