El tiempo había pasado lentamente. Ya era la tarde antes de la fecha límite.

A las cuatro, Harvey llegó casualmente al edificio de oficinas de la Alianza de Artes Marciales.

Elanor Stanton lo seguía a su lado. En ese momento no llevaba maquillaje.

Su rostro seguía siendo igual de hermoso, pero una sensación de profesionalidad sustituía por completo su encanto.

Harvey la quería a su lado por sus contactos y su autocontrol.

Esperaba que le fuera útil en esta ocasión.

“¿Por fin estás aquí, Señor York?”.

En cuanto el coche de Harvey estaba estacionado, Colton Torres y un grupo de trabajadores se acercaron a darle la bienvenida después de recibir la noticia.

Harvey dejó escapar una sonrisa.

“¿Esperaste mucho?”.

“Yo también acabo de llegar, pero las personas de arriba llevan un rato esperando”.

Colton miró con curiosidad a Harvey.

“Pensé que esos representantes arremeterían y se marcharían a juzgar por su comportamiento impulsivo...”.

“Pero llevan una hora entera esperando en si