La vista nocturna del Puerto Victoria era la más encantadora a las diez de la noche.

Los amantes paseaban por las calles y los callejones para presenciar el movimiento de la ciudad.

Todo tipo de chismes se esparcían desde los clubes nocturnos y restaurantes de clase alta.

¡Alguien intentaba arruinar el banquete de cumpleaños de la Abuela York!

El joven amo lo arriesgó todo para mantenerla a salvo, pero, como resultado, sufrió graves heridas. En ese momento, el Hospital María ya había enviado tres avisos de estado crítico.

¡Qué hombre tan amable!

¡Qué historia tan conmovedora!

Si los chismes seguían extendiéndose, la Abuela York tal vez se sentiría fatal si no conseguía que Vince York se convirtiera en el nuevo señor de la familia.

Justo cuando todos hablaban de la situación, las cortinas de la plaza se abrieron de repente.

Se vio a un grupo de caballeros bien vestidos caminando hacia el escenario recién construido.

Los turistas pensaron que se acercaba un espectáculo.

“¡¿Qué