Ante las declaraciones hechas, el silencio pronto se produjo en el grupo y todos intercambiaron miradas nerviosas. –An, ¿acabas de decir que el alfa Alastor es un licántropo? –le preguntó Giovanni a su hermana quien asintió algo avergonzada –Eso no es importante… Annita, ¿¡Has dicho novias!? –exclamó Gael con pánico –Diosa… Entonces las humanas desaparecidas…– –Son ellas Pía –dijo Anna intentando ponerse de pie –Tenemos que avisarles, tenemos que… ¡Ah! –exclamó Anna cuando Gael y Daryl tiraron de ella para volverla a sentar –Tu no vas a ningún lado sin una loba –gruñó Gael –Además no he acabado de curarte – –Pero Gael, mi padre y Dante…– –Tranquila uvita, nosotros iremos –intervino una voz familiar –Ah, por fin –gruñó Gael –¿Dónde…? –al ver que un grupo de personas se acercaban a ellos guiados por Neilan, el hechicero guardó silencio –Gino, Neilan…–susurró Anna –¿Estás bien cachorra? –preguntó Neilan acercándose a Anna –Sí, yo… Neil ¿Quiénes son ellos? –preguntó Anna confund
Mientras que Rebecca y Giotto se adentraban en la cueva para cumplir con su misión, la batalla entre Lucien y Aníketos se iba intensificando, por lo que era difícil saber cuál de los dos tenía ventaja.Cuando Aníketos parecía someter a Lucien, este hacía un esfuerzo y lo lanzaba a la otra punta de la cueva, lo que hacía que esta se sacudiera violentamente, tensando a todos los presentes, sobre todo, a los tres cazadores que estaban en medio de la refriega.–¿Qué hacemos Elena? –le preguntó nerviosa una joven–Armarnos de paciencia Tina –masculló la mujer, la cual, observaba atentamente como Dante, quien peleaba en su forma humana, se enfrentaba a dos novias–Pero…––Nuestras balas podrían herir a los lobos Tina –intervino un hombre –Aférrate a tu arma y espera el momento preciso…–Aceptando las órdenes de sus superiores, la joven Tina se sacó una escopeta recortada de su funda y se aferró a ella.–Superior…–masculló la joven –¿Quién es el joven de allá? ––Dante Benedetti –respondió E
Pese a que Giotto y Rebecca ya se habían alejado bastante de la refriega, el angustiado aullido de un lobo provocó que Giotto se detuviera a medio camino.–No te detengas joven beta –jadeó Rebecca, quien se aferraba al cuello del lobo –Debemos eliminar todas las amenazas para Alastor, además, si a Lucien se le ocurre enviar a una de sus novias por acónito tu y yo estaremos en graves problemas –Dándole la razón a la mujer, Giotto aceleró el paso y se adentró en la caverna.Con cautela, los dos revisaron cada uno de los túneles que se encontraban en el camino, en algunos, se encontraban directamente con muros de roca que le impedían el paso, otros, directamente los alejaba del lugar, y según las palabras de Rebecca, si Lucien lo usaba a menudo no podía estar muy lejos.–Ya nos hemos alejado demasiado…–masculló Rebecca –Vuelve sobre tus pasos, debimos pasar algo por alto –Con un gruñido irritado, Giotto accedió y dio media vuelta, sin embargo, esta vez no echó a correr, por lo que Rebe
Justo cuando estaba por morderla, Gino se lanzó sobre ella y la sujetó de las muñecas, sometiéndola por completo en el piso. –¡Aura! ¡Reacciona! – –No lo hará… El olor de mi sangre la ha descontrolado, lo mejor será que…– –Por favor, Aura, reacciona –insistió el joven –¡Tú no eres así! ¡Acabas de ayudar a un humano! – Al ver la insistencia del joven, Rebecca asintió e intentó incorporarse. –Loto de Luna estará en buenas manos…–masculló al tiempo que rebuscaba en su capa –¿Gino? –lo llamó Aura con la voz quebrada –Ayúdame… Por favor…–suplicó la joven dejando de luchar –No quiero seguir así…–lloriqueó –Lo haré Aura, tranquila, sólo resiste un poco… Rebecca va a ayudarte, sólo… sólo debes ser fuerte, ¿está bien? – Mordiéndose su tembloroso labio, Aura asintió, sin embargo, se tensó al notar que Rebecca se acercaba. –Escucha linda, sé que mi aroma te está enloqueciendo, pero ya has luchado por cuatro meses, sólo te pido que luches un minuto más – –Pronto volverás a casa Aura y te
Cinco días después de la derrota de Lucien •Sumergido en sus pensamientos y rodeado del silencio, Alastor observaba a través de una ventana como el sol comenzaba a teñir el cielo con diferentes tonos de rosa y naranja, conforme este, se iba elevando en el cielo.Ya habían pasado cinco días desde que había acabado con la vida de Lucien Nox, un horrible ser que había arruinado la vida de muchos hombres lobo, como también, de algunos humanos.En su sentimiento de superioridad, Lucien había acabado con muchas manadas en su deseo de conseguir esclavos lobunos.Cientos de renegados y salvajes, eran los acompañantes obligados de ese infernal ser, pero ahora que todos habían sido liberados, las cosas poco a poco volvían a la normalidad.Muchos renegados, lo habían elegido a él como alfa al sentirse en deuda por haberlos salvado no sólo a ellos, si no también a sus familias. Otros tantos, fueron acogidos por Basil, Caden y Guido en sus respectivas manadas.Mientras que otros, optaron por llev
Esa misma tarde, la casa de la manada volvió a vestirse de manteles largos para dar la bienvenida a los nuevos miembros de la manada, los cuales, harían su juramento de lealtad esa misma noche.Mientras que Nora y Adriano se encargaban de llamar a los alfas y de extenderles la invitación a aquella pequeña fiesta para hablar de lo sucedido, Zinerva y Daryl se encargaban de preparar todo lo necesario para el evento, por lo que, la noticia de que la joven heredera alfa había despertado se extendió por el territorio como la pólvora.La decoración de la pequeña arboleda frente a la casa de la manada, esta vez, era más sencilla que en la fiesta de cumpleaños de Anna.La zona había sido iluminada con las mismas luces hadas usadas aquella última vez, en lugar de un escenario, ahora había un pequeño atril de madera, y al igual que, en el desayuno con los alfas aliados, había largas mesas con bufeteras, las mesas principales, estaban decoradas con manteles más sencillos y con un pequeño arreglo
–¿Por qué lleva uniforme? –preguntó Ariana con curiosidad–Todos llevamos uniforme Ari –dijo GinoSi bien era una fiesta, todos habían acudido con ropa casual, la propia Anna, había optado por usar unos jeans y una blusa negra floreada de hombros caídos, aunque tal y como había dicho Gino, también llevaba su uniforme debajo de la ropa.–No me refiero a eso –gruñó la joven–Ya lo sé, ya lo sé –masculló el joven beta–Oigan, ¿quiénes son ellos? –preguntó Anna señalando una mesa un poco más alejada, donde un joven lobo, dirigía una tablet en dirección a Alastor–Es el delta Ryder, pertenece a la manada Umbra en Farcia –le explicó Emmet –El alfa Turner lo envió a él y a un pequeño grupo de rastreadores para buscarte, tengo entendido que mañana volverán a casa ––Oh…––Esta noche… –comenzó a hablar Alastor, provocando que el silencio se instalara en toda la arboleda –Se supone que daríamos la bienvenida a todos aquellos que me eligieron su alfa y que solicitaron esperar a que mi hija despe
Tal y como había dicho Egan, muchos de los nuevos miembros de la manada se acercaron a ella para jurarle lealtad y para disculparse por haber participado en su secuestro.Gracias a esto, la ceremonia duró cerca de media hora.Si bien Anna prestó atención en todo momento y se aprendió los nombres y los rostros de los nuevos integrantes, lo único en lo que podía pensar era en que Egan se marcharía, por lo que, ocasionalmente, la joven le dirigía miradas furtivas.Por su parte, Egan permanecía junto al alfa Basil, quien charlaba animadamente con el alfa Caden y Guido, el joven, por su parte, se mantenía ajeno a todo con la mirada gacha, completamente ajeno a todo lo que sucedía a su alrededor.Cuando la ceremonia terminó, Alastor dio unas palabras de agradecimiento y juró que los protegería a todos y que, sin duda, encontraría la forma de poder brindarles la paz que tanto merecían, por lo que, tras las palabras del alfa, las cuales fueron aplaudidas por todos, la ceremonia finalizó dando