Después de ese fabuloso domingo de descanso que se había tomado Taylor después de mucho tiempo, o más bien nunca hacerlo, la semana había transcurrido demasiado rápido.

Habían follado, no, hecho el amor cada día y había sido más fantástico cada vez, pero eso no era lo único que había hecho especial ese tiempo, habían hablado de muchas cosas, se habían conocido mejor, habían compartido tiempo trivial, se acurrucaron juntos en la cama y el sofá, pasearon… cada día Zack había esperado a Taylor y Taylor había extrañado a Zack

El lunes dejar a Zack en su cama después de despedirse con un beso había sido demoledor para Taylor, pero el deber llamaba, y debía ir a trabajar si no quería que Jaison enloqueciera y empezara a hacer preguntas, pero lo cierto era que tenía muchas cosas que hacer, el tiempo en la oficina había sido una completa tortura, no podía concentrarse porque su mente iba cada minuto a un cuerpo bronceado y unos hermosos ojos color avellana que lo traían loco, Zack había envia