Zack estaba totalmente maravillado al entrar al apartamento que su patrocinador había pagado, había decido mudarse ese viernes temprano para poder irse a pasar el fin de semana con Taylor después de las clases, metió sus pocas cosas en unas cajas y salió dejando a un molesto Owen en el dormitorio del campus.

Ahora se encontraba allí recorriendo aquel espacio que sería solo suyo desde ese momento hasta que terminara sus estudios, el lugar no era inmenso, pero tenia todo lo que necesitaba y más, tenía dos habitaciones, un estudio, una pequeña sala de esparcimiento con televisión y la ultima consola de juegos, la cocina tenia la nevera y estantes repletos de comida, esto era increíble, ¿de verdad una beca podía cubrir todo esto? Su hermano iba a ponerse feliz, se lo contaría en cuanto terminara de instalarse

Pero las sorpresas no paraban de llegar, al entrar a su habitación principal, encontró el closet lleno de ropa de marca de su gusto y talla, jeans, sudaderas, zapatos deportivos, cam