Es lunes, Eric acaba de irse con los niños hacia el jardín de infantes y yo vuelvo a quedar sola en casa, lo que me encanta porque, así como disfruto el estar rodeada por quienes amo, también disfruto mis momentos de soledad.
Ahora me siento bien así que llamaré a los de la editorial para que sepan de primera fuente como me encuentro.
Voy al estudio para acceder a mi computador y hacerles videollamada. Lo enciendo y espero unos minutos para mandarles llamada por Skype.
—¡Hola, Grace! ¿Cómo estás? ¡Qué gusto verte! —me saluda Claire, mi editora.
—Hola, Claire. Ya me siento mucho mejor, por fin me dieron el visto bueno final.
—Qué bueno saber eso. De verdad me alegra mucho saber que estás mejor. Te hemos echado de menos.
—Y créeme que yo a ustedes también.
—Me imagino que ya sabes que
Estoy nerviosa y algo impaciente, Eric me trae al centro donde tendré las clases de repostería. Se siente extraño volver a tener clases, después de tanto tiempo sin estar en un aula. Pero como estoy tan entusiasmada deseo llegar pronto.Sé que las clases son de cocina, pero siempre fui aplicada en clases así que el cuaderno y el lápiz no pueden faltar, conociéndome, estoy segura de que tendré que anotar muchas cosas y después para no confundirme le consultaré a Carol por los apuntes que pueda hacer.Nos despedimos y me bajo del auto para que Eric pueda regresar al jardín de infantes y continuar con los trabajos, que van bastante avanzados.Entro al recinto y consulto en la portería hacia donde ir. La chica que me atiende me da las indicaciones y llego a la sala. Veo a mi alrededor y de pronto, me siento como si estuviera en Master Chef. A lo largo de la sala hay m
El almuerzo con mi hermana estuvo grandioso y por supuesto delicioso. Ahora estoy de regreso en mi departamento y con la mesa de centro de la sala lista y dispuesta con galletas de las que hice además de algunas que compramos y otras cosas dulces. Deseo celebrar este logro para mí teniendo una tarde de películas con los niños y Eric, por lo que espero lleguen pronto.Estoy buscando la película favorita de los niños, que ya descubrimos que es “Lilo & Stitch”, dejo la imagen en pausa cuando la puerta se abre y los niños entran corriendo como siempre.Les saludo para interrumpir su paso y notan toda la decoración que preparé para su llegada.―¿Qué es todo esto, tía Grace?―¿Les gusta? Lo he preparado para ustedes.―¿Es en serio, amor?―Sí, algunas de estas galletas que ven aquí, les muestro todo lo que hay sob
Estas semanas han tenido de todo para mí.Por un lado, estoy muy contenta por los avances que estoy teniendo con la novela, estoy avanzando muchísimo y creo que lo bien que me estoy sintiendo conmigo misma, hace que se note mucho más. Estoy fluyendo en mi escritura como hace rato no sucedía y según mi planificación, estoy muy cerca de terminar con la novela.Por otra parte, en mis clases de cocina mis progresos han sido muy buenos. En palabras de mi hermana mi avance ha sido fantástico considerando que antes solo podía cocinar unos simples huevos revueltos sin que queden muy salados o quemados. Sí, lo sé, no podía ser más penosa, solo pudiendo cocinar lo básico, siempre fue igual para mí, porque no heredé la beta cocinera de mamá.Mi hermana además dice que las clases se terminarán la próxima semana y que está segura de que
Ya estoy de vuelta en casa. Tuve un fantástico almuerzo con Abigail. Hace tanto no nos veíamos que no me había dado cuenta lo que extrañaba nuestras conversaciones alocadas, donde hablamos de la vida y de todo y de nada. Estoy en mi computadora, comenzando con los preparativos para la próxima semana por el cumpleaños de Sean. Estoy muy entusiasmada porque este pequeño hombrecito, al igual que su padre significa mucho para mí y agradezco tenerlo en mi vida y quiero y deseo que se dé cuenta de que esta celebración es la demostración del amor y cariño que siento por él. Lo bueno es que ya tengo una pequeña pauta que me dio Eric sobre los gustos y actividades favoritas de Sean, por lo que me pongo manos a la obra y comienzo a organizar todo. Primero lo primero, llamar a la tienda de juegos del centro comercial y consultar si tienen disponible la fecha. ―Hola, buenas tardes. Kid’s Zone, habla Peter ―contestan luego de tercer tono. ―Hola, P
―¿Estás bien? ―pregunta Eric mientras caminamos de regreso al auto.―No lo puedo creer. Estoy embarazada.―Y eso, ¿está mal? ―cuestiona mi respuesta.―No, no, no es eso. Es que todos nuestros planes. ¿Qué haremos ahora? ―Intento explicarme.―¿Qué tienen? Seguiremos adelante con ellos, solo que ahora, agregamos un bebé a la ecuación. ―Se detiene y me toma las manos mirándome de frente―. Cariño, sé que nuestro futuro estaba en proceso de planificación para que seamos felices como tanto lo deseamos, pero créeme cuando te digo que me han dado la mejor noticia que hace mucho tiempo no recibía. Esto es una etapa más en la vida, lo superaremos juntos ya lo verás.―Suenas tan seguro, ¿no tienes miedo?―Claro que lo tengo y por Dios que lo tengo, pero estoy confiado en que todo saldrá bien. ―Suelta mis manos y me
Luego de mucho meditar y conversarlo con Eric, no le diremos a nadie de mi embarazo doble, queremos darle una sorpresa a toda la familia, incluyendo a todos por igual.Sé que será algo difícil guardar el secreto, pero deseamos esperar el tiempo prudente para que mi embarazo sea seguro. Sobre todo, porque son dos bebés.Desde que llegamos a casa con Eric no hemos parado de observarnos atentos, como queriendo analizar las emociones de cada uno, porque más felices no podemos estar. Porque si un embarazo ya cambiaba algunos planes, uno doble lo hace aún más, pero estoy segura de que podremos llevarlo adelante sin que perjudique nuestros planes.El primero de ellos es el cumpleaños de Sean, el que celebramos mañana. Ya tengo todo organizado y listo para festejar a mi pequeño hombrecito.Los invitados ya confirmaron que asistirán, además de la familia de Eric y Sean incluyendo a
Hoy es día de quedarse en casa sin hacer nada. Bueno al menos esa es mi idea, pero para los niños es seguir jugando con todos los juguetes nuevos que le han regalado a Sean, incluyendo lo que le regalé el día anterior a su cumpleaños.Intento de darme los ánimos, pero me siento muy cansada. Los malestares del embarazo siguen presentes, sobre todo los vómitos, son cada vez más frecuentes, lo bueno es que tomando un té de hierbas el mal sabor de boca se va junto a la incomodidad. Solo deseo que pase pronto el primer trimestre, para que por fin se vayan todos estos síntomas.―¿Te sientes bien? ―consulta Eric inquieto. El pobrecito no sabe cómo ayudarme para que me pueda sentir mejor.―Un poco mejor gracias al té que me trajiste. Jamás imaginé que volver a embarazarme sería así. ―Con Amanda tuve todos los síntomas, pero fue más llevade
―Cariño, esto te ha quedado fabuloso ―dice Eric sobándose el estómago. Comió demasiado, lo que significa que la comida quedó deliciosa. Puedo saberlo ya que cuando algo no le gusta, tiende a no terminar su plato.―Gracias, amor. Me alegra mucho que te haya gustado.―Sí, Grace. Esto quedo magnífico ―congratula Jacky.―Por lo visto se te hizo poco ―expreso mirando su plato, ya que no quedo nada. Todos sonreímos ante mi comentario.―La verdad sí. Si pudiera me sirvo más, pero ya sería mucho. No suelo repetir un plato de comida por más delicioso que esté.―Eso es bueno ―comenta Carol―. Te cuidas y se nota, tienes un cuerpo fantástico. Al contrario de nosotras.―Concuerdo con lo que dice mi hermana, Jacky.El cuerpo de la cuñada de Eric es el de una modelo. He compartido algunas veces con ella y por más que come, no engorda. No s