Aurora
—Estoy en celo, —murmura con su voz ronca mientras mira mis ojos.
— ¿Celo? ¿Qué es eso? —Pregunto confundida nunca había escuchado algo así.
—Es... Es cuando un lobo tiene deseo de acoplarse con su pareja, solo ella puede calmar el dolor del celo, —ronronea—Entenderemos sino quieres hacerlo. —Añade agachando la mirada. Tomo su rostro y lo miro a los ojos.
—No seas tonto lobito, yo soy tu luna, tu mate y tu celo es algo de nosotros dos ahora. —Digo viendo sus ojos brillar.
—Te amo luna, —susurra para luego besar mis labios, sus manos acarician mi cuerpo para luego girar conmigo en la cama quedando yo sobre el quien levanta su torso quedando sentando en la cama y yo ahorcajada.
Observo a Sebastian y recuerdo las palabras de Ágata "No te asuste si lo ves metamorfo" pero no me asusta ver a S
SebastiánEscucho la respiración relajada de mi luna y me doy cuenta de que se ha dormido, con cuidado tomo la colcha y cubro nuestros cuerpos desnudos. Sigo acariciando su cabello y espalda esperando que el nudo se quite.—Al fin ya es nuestra, —ronronea Orus feliz en mi mente porque marcamos a nuestra luna.—Así es Orus. —Respondo, luego pasan unos minutos y el nudo se termina. Yo con mucho cuidado salgo del interior de mi luna para luego dejarla en un lado de la cama. Salgo de la cama y voy al baño donde, tomo una toalla húmeda y voy hasta donde mi luna para limpiar la sangre que mancha su cuello y un poco de sangre que mancha su parte íntima.Cuando termino de limpiar a mi luna me coloco un pantalón deportivo corto y salgo de la habitación no sin antes mirar la hora y son las dos de la mañana. Bajo a la cocina d
Aurora—Reclama a tú alfa luna, reclámalo como tuyo, —me dice y yo me quedo en silencio pensando como reclamo aún alfa y sobre todo aún alfa rey, Sebastián ya lleva mi marca, miro su pecho justamente donde esta su corazón donde lleva mi marca la cual tengo en mi muñeca también.Observo sus ojos los cuales me miran con todo el amor del mundo pero a través de ellos puedo sentir ese enorme lazo que nos une por toda la eternidad y se que el puede sentirlo igual miro sus labios los cuales están hinchados y me imagino que lo mío deben de estar de la misma forma, siento su manos acariciando mi espalda dándome calma.Despacio me acerco a los labios de Sebastián y lo beso mientras que el deja que yo lleve el control del beso, muerdo sus labios y el gruñe aprendo mis nalgas y moviendo su cadera provocando que sienta su erección
AuroraDespierto por el calor intenso que siento más las enormes ganas de ir al baño, trato de salir de la cama pero los fuertes brazos de Sebastián me mantienen prisionera, me remuevo tratando de salir pero este solo gruñe y se pega más a mi cuerpo pegando su erección en mis nalgas provocando que me sonroje.—Luna mía no te muevas. —Gruñe aprestando más su agarre.—Sebastián, me orinaré en la cama si no me sueltas ahora mismo, —suelto y el suelta un gruñido para soltarme, rápido salgo de la cama ignorando la pequeña molestia en mi entrepierna, me siente en el inodoro y hago mis necesidades para luego mirarme al espejo—Estoy echa un desastre. —Susurro mirando mi reflejo mis labios están hinchados, tengo algunos chupetones por mis pechos, cadera y sobre todo mi cabello hecho un nido de aves, suspiro y entro
Aurora—Ni de coña te pondrás ese vestido. —Gruñe Sebastián al ver mi vestido, yo solo ruedo los ojos y lo cuelgo en mi closet.—Vamos a ver lobito, —suelto mientras me giro para mirarlo con el ceño fruncido—Si no me pongo ese vestido, te tocará dormir solo por muchos años. —Añado mientras lo señalo con el dedo el me mira indignado para luego soltar un gruñido y maldecir entre dientes.—Bien, —suelta de mala ganas para salir de mi habitación dejándome sola.—Un alfa tenía que ser, —susurro— ¡Ah! —Grito cuando un fuerte dolor penetra mi cabeza, es como si estuvieran taladrando mi cerebro. Todo me da vuelta y el dolor están fuerte que caigo de rodilla mientras sujeto mi cabeza, siento una presencia a mi lado la cual identifico como Sebastián, solo observo
Aurora— ¿Estás segura que quieres ir a la fiesta? —Pregunta Sebastián por quinta vez.—Seba, sal de la habitación, se que quieres que cambie de opinión porque no te gusta mi vestido porque según tu es poca tela, —suelto porque el lobito cree que soy tonta, escucho que gruñe y luego sale de mi habitación. Sonrío para sacar mi vestido del closet ya que a último momento compre otro vestido para darle una sorpresa al lobito, Ágata es un genio y me recomendó hacerlo—Hora de comenzar, —susurro colocando el vestido en la cama y girando al escuchar unos toque en la puerta—Adelante. —Murmuro y por esta entran dos jóvenes.—Saludo luna, somos las que la ayudaremos a prepararse para la fiesta, —anuncia una chica de piel morena muy linda.—Oh… Muchas gracias chicas por ¿
MarcioUna semana después...Gruño cuando la alarma de mi teléfono suena, lo busco a ciega y de esa misma manera apago la alarma, froto mis ojos y miro la hora son 5:30 de la mañana, despierto a esta hora porque tengo clases a las 7:50 y me tomo hora y media para llegar a la universidad, además hoy es mi primer día de clase y estoy ansioso por ir a la facultad otra vez. También necesito este fin de semana encontrar un departamento, salgo de la cama y voy directo al baño donde hago mis necesidades para luego entrar a la ducha y colocar el agua fría para poder despejar el sueño.Cuando termino mi ducha, cepillo mis dientes y luego salgo a buscar mi vestuario al closet, tomo un polo blanco y un pantalón de vestir azul marino, me coloco un bóxer negro y luego mi ropa escogida, mi cabello corto lo peino con la mano y ya estoy listo.&nb
AuroraDespierto como todos los días entre los brazos de Sebastián quien duerme plácidamente aferrado a mi cuerpo como si en cualquier momento yo fuera a desaparecer. Sonrió mirando su rostro relajado, llevo mi mano derecha a sus cejas y luego toco sus mejillas mientras que él se remueve comenzando a despertar por mis toques.Llevo mi mano hasta su pecho donde descansa mi marca la cual es una luna con algunas estrellas a su alrededor, esa misma marca la llevo en mi muñeca y un poco más grande en mi cuello pero con las iniciales de Sebastián escrita y un lobo agregado.—Buenos días mi luna, —saluda con sus voz ronca sacándome de mis pensamientos miro sus ojos y le sonrío.—Buenos días mi alfa. —Respondo con voz suave viendo sus ojos brillar mientras se forma una hermosa sonrisa en su boca.—Deberí
AuroraAcaricio el pelaje de Orus quien tiene su enorme cabeza en mis piernas, escucho el cantar de las aves y la paz que transmite esta parte del bosque.—Tengo quedar un recorrido por la frontera, —me dice Sebastián por el enlace que ahora compartimos después de que me marco.—Ve, yo esperaré aquí. —Le digo y este levanta su cuerpo lobuno me mira por uno segundo para luego lamer mi rostro y salir corriendo al bosque, sonrío mirando el lugar por donde se fue y niego con la cabeza. Pasa aproximadamente unos cinco minutos y escucho ruido proveniente de unos árboles, me levanto del suelo y miro trato de ubicar de donde es exactamente que proviene el ruido. — ¿Quién está ahí? —Pregunto dejando que mis poderes fluyan por mis manos y de la nada sale un enorme lobo marrón que mira con odio puro— ¿Quién eres? &md