CORALINE

—!Mami!, mami.

—¡Dios mío! ¿Que tiene mi bebé?, ¿Porque lloras mi amor?

—Cora— escucho a papá que sostiene a mi hija— ¿Qué le pasa a mi princesa?.

—No me gusta— hace un puchero— no me gusta que mi cabello sea negro, yo quiero que sea como el tuyo.

Llora nuevamente Christine y me parece increíble cómo la vida encuentra más maneras de romperme el corazón, mi niña que está peinada con dos coletas luciendo su hermoso cabello negro y largo, luce roja preguntando porque mi cabello es castaño, porque papá es rubio y ella no es igual.

Esa pregunta se ha estado repitiendo últimamente y papá dice que debo entender qué ella tiene tres años y seguirá creciendo, va a hacer más preguntas y entre ellas que no le he explicado que es hermosa e idéntica a su padre.

—Tu eres preciosa y tú cabello también— la cargo sintiendo que se pega a mi hombro— no debes ser como yo, eres más hermosa y serás mejor.

—Pero Joselyn— habla de la hija de mi amiga— se parece a su mamá, su pelo es amarillo c