CAPÍTULO 15: UN SECRETO QUE PROTEGERRosieEl aroma de Hazel me alcanza, inconfundible, y mi cuerpo reacciona al instante. ¿Qué hace aquí? Algo definitivamente no está bien. Me separo de Kelan, aunque su abrazo cálido me tienta a quedarme un poco más.—Quédate aquí —le digo con firmeza—. Mi hermano podría estar cerca.—Rosie, no. Por favor, no vayas —me suplica, y el tono de su voz me hace dudar por un segundo. Es increíble cómo puede hacerme sentir tan vulnerable con solo unas palabras—. No puedo quedarme aquí sin hacer nada si algo te pasa.Le dedico una pequeña sonrisa, acariciándole la mejilla.—No seas terco. No me pasará nada, pero si Erik te encuentra aquí, no tendremos esta conversación de nuevo. Ya sabes cómo es.—Entonces déjame ir contigo. Me enfrentaré a tu hermano de ser necesario.—¿Estás loco? —le corto rápidamente. La sola idea de imaginarlo en un enfrentamiento con mi hermano me hace estremecer hasta los huesos. Erik lo destrozaría antes de que siquiera pudiera reacci
CAPÍTULO 16: ESTÚPIDO CORAZÓNHazelHa pasado una semana desde que la Beta llegó y, en ese tiempo, me he convertido en poco más que un fantasma para Erik. Casi podría reírme si no doliera tanto. Si alguna vez me engañé pensando que él podía sentir algo parecido a compasión por mí, esta última semana lo he enterrado por completo.Kara, por supuesto, se ha asegurado de hacerme saber mi lugar. Es como una serpiente disfrazada de ángel, venenosa cuando estamos solas, pero dulce e intachable en presencia de Erik. Sabe cómo hacerme daño sin ensuciarse las manos. Ya no me ha vuelto a tocar, pero no hace falta: me empuja con "accidentes" perfectos, me deja trampas para que tropiece o me obliga a recoger el desastre que ella misma provoca. Y después, por supuesto, juega a ser mi salvadora.A Erik le tiene tan bien engañado que casi me da lástima. No, lástima no. Rabia. Porque él no ve, o peor aún, elige no ver.—¡Hazel! —su grito me sobresalta haciendo que mis manos tiemblen y los vasos de cri
CAPÍTULO 17: LA RESISTENCIA SE DERRUMBAErikUna semana. Es lo que llevo resistiendo la tentación. Me he comportado como un Alfa debe hacerlo, dando la atención adecuada a quien todos consideran mi futura Luna. Kara es casi perfecta: fuerte, hermosa, de un linaje puro y perteneciente a una de las manadas más poderosas de la ciudad. No podría pedir mejores atributos para alguien destinada a estar a mi lado.Sin embargo, por más que lo intento, no puedo verla como mi Luna. Apenas logro sentir por ella un respeto neutral, quizás algo parecido a la amistad, y mucho menos puedo usarla para reemplazar a la pareja que probablemente nunca conoceré, mi Mate.No suelo pensar en mi maldición, hace siglos que la acepté. Sé que no hay solución. Sé que no importa cuántas brujas he interrogado, cazado y… eliminado. Ninguna ha roto el hechizo. Pero no dejaré que esa bruja me destruya. La encontraré. Cuando la tenga frente a mí, le arrancaré los dedos uno a uno antes de desgarrar su garganta con mis c
CAPITULO 18: DE NUEVOHazelNo sé cómo demonios Erik es capaz de escuchar o percibir mis pensamientos. Trato de controlar mi mente, pero es inútil. No quería pensar en eso. Ni siquiera quería recordar. Pero la ecografía lo cambió todo.Mi corazón dio un vuelco al ver esa pequeña figura en la pantalla, tan frágil y real. Hasta este momento, apenas lo había considerado humano, porque Erik siempre lo llama "cachorro", reduciéndolo a algo animal, distante, ajeno. Pero no lo es. Es mi bebé.Y entonces mi mente me traicionó. Un recuerdo enterrado en lo más profundo emergió: la noche en la que él me tomó. Esa noche en la que me entregué a él, en la que, por un breve instante, quise imaginar que había algo más. Que, de alguna manera, había amor.Mi imaginación voló más allá de lo que debería, recreando algo que nunca existió. Y ahora estoy aquí, atrapada entre la pared fría del ascensor y el calor abrasador de su cuerpo.Lo puedo sentir todo de él. La presión dura entre sus piernas, el roce i
CAPÍTULO 19: UNA PARADA RÁPIDAErik¡Maldit4 sea!Volví a caer. Volví a caer en la tentación de su aroma dulce a manzanas y canela, volví a permitir que mi lobo tomase el control. No puedo estar cerca de Hazel, no sé qué tiene esta humana que me descontrola, no sé por qué soy tan débil ante el más mínimo indicio de rendición ante mí y lo peor es que ella lo acepta sin chistar, sin quejarse se entrega a mí como si también lo deseara.Está muy callada desde que le dije que lo que ocurrió no cambiaba nada. Quisiera saber lo que está pensando, pero de pronto su mente es como un muro que no puedo penetrar.Me está volviendo loco no poder percibir sus pensamientos, ¿por qué de pronto se han silenciado?Piso el acelerador mientras las gotas de llovizna comienzan a mojar el auto. Hace frío, pero no me atrevo a subir las ventanas, toda ella huele a dese0, a sex0. No puedo llegar con Hazel oliendo así a la mansión. Kara se daría cuenta enseguida, y entonces convertiríamos la alianza en una posi
CAPÍTULO 20: NADA PASÓHazelNo sé en qué momento dejo de temblar ni cuándo el sueño me vence, pero lo hago envuelta en el calor de Erik. Su abrazo es firme, protector, y aunque su rostro no lo admita, sus acciones gritan verdades que no se atreve a aceptar. Él puede repetir mil veces que esto no significa nada, pero mi corazón no es tan fuerte como para no ilusionarse. Anoche fue más que un gesto de necesidad o impulso. Fue algo que me hizo sentir, por un breve instante, que no estoy sola.Cuando abro los ojos en la mañana, la calidez de su presencia ya no está. La habitación está vacía, y el aire frío me devuelve a la realidad. Me levanto despacio y una leve náusea matutina me revuelve el estómago, pero trato de ignorarla. Mi vestido ya está seco. Me lo pongo con movimientos mecánicos y salgo al pasillo.Justo entonces, Erik emerge de su habitación. Sus ojos me encuentran, tan fríos y distantes como siempre, como si nada hubiera pasado. Como si anoche no hubiésemos compartido algo m
CAPÍTULO 21: LA VELADAHazelLa noche cae cubriendo el cielo de una oscuridad absoluta. Esta noche no hay luna, así que las estrellas se pueden apreciar con más intensidad. Sin embargo, una parte del cielo está nublada, se avecina una tormenta.Pero los nubarrones oscuros de afuera no se comparan a los de mi interior. Todo lo que ha sucedido con Erik en tan pocos días me tiene muy confundida, pero sobre todo, me hace sentir como una tonta.No sé por qué sigo esperando que en algún momento él cambie, que me mire de otra manera y confiese sus sentimientos por mí. Tampoco entiendo por qué siento esto tan profundo dentro de mí cuando se supone que debería odiarlo por todo lo que me ha hecho. Después de todo, llegué a este lugar siendo una prisionera y él me compró.—Hazel, ¿ya estás lista? —me pregunta Rosie detrás de la puerta.Suspiro y me miro por última vez en el espejo antes de abrirle.—Sí, supongo. Esto es lo mejor que puedo hacer.—Tonterías, te ves muy bien —dice con una sonrisa
CAPÍTULO 22: ME PERTENECESErikLa irritación hierve bajo mi piel mientras escucho el parloteo interminable de los humanos que me rodean. Son patéticos, hablando de trivialidades como si fueran el centro del universo, ignorando por completo las fuerzas que verdaderamente gobiernan este mundo. Mi mandíbula se tensa cada vez que otro imbécil menciona la bolsa o presume de su última adquisición material. Si no fuera por el disfraz que debemos mantener, ya habría convertido esta gala en un baño de sangre.—Si tengo que escuchar a uno más, David, juro que no me importará el espectáculo —mascullo entre dientes, mi voz es tan baja y afilada que parece cortar el aire.David, mi primer Beta, suelta una risa seca mientras sus ojos recorren el salón abarrotado.—Es el precio de jugar a ser humano, Alfa. Al menos puedes disfrutar del espectáculo —dice, señalando con un leve movimiento de cabeza hacia Kara, que conversa animadamente con otras lobas. Los ojos de los hombres en la sala se pegan a el