Al finalizar mi jornada de trabajo me dirigí a casa para prepararme para el festival cuando mire mi teléfono y vi varios mensajes de Rebeca.
La invitación de mi mejor amiga; Rebeca, al festival anual de temática no me sorprende, ella es una mujer muy divertida, fiestera y demasiado alegre. Debido a su universidad nos veíamos muy poco, somos amigas desde hace unos seis años... Nos conocimos en un centro comercial de la forma más extraña posible; dentro de un ascensor que se quedó atorado en un piso. Pasamos algunas horas atascadas ahí y nuestra amistad fluyó.
Tuve que convencer a Tony de que se nos uniera, él detesta a Rebeca, me siento como una mala amiga forzándolo a venir, pero sé muy bien que Rebeca terminará liándose con un chico y dejándome sola, necesito a Tony para no sentirme sola luego de que Beca se marche con alguien. Estoy segura que eso pasará.No tenemos casi nada en común, pero los polos opuestos siempre terminan atrayendo incluso en amistad.Beca, Tony y yo nos encontraríamos en la plaza, donde todos estarían reunidos bebiendo, bailando y otros vendiendo cosas referentes a la temática de este año.Por lo general no suelo asistir a esto, pero es una forma de celebrar que ingresé a la universidad y que pronto ya no haré estás cosas con mis amigos. Ya después me despediré de mis padres con más calma, aún tengo tiempo para poder hacerlo bien.Aunque haga lo que haga las despedidas siempre terminan siendo tristes e incómodas para todos.Me disfracé lo mejor que pude con algunas prendas de vestir; un corset ajustado, lo puse encima de un vestido negro, unos botines también negros y me delinee un poco los ojos, no suelo maquillarme tanto, soy pésima haciéndolo. Me pinte la boca de negro igual e intenté lucir lo más gótica que pude.Mi madre tocó la puerta un par de veces a pesar de que estaba abierta, respetando mi "privacidad".—te ves increíble, hija. — me mira con cariño mientras me veo en el espejo.—Gracias mamá, — me di vuelta a su dirección para verla. — no estoy acostumbrada a vestir así.— bueno, esa es la idea de las temáticas, colocarte un traje que te haga sentir diferente.Me sujeta ambas manos mientras me mira.—estas creciendo muy rápido, Venus.Le di un abrazo para evitar llorar y correr el delineado chueco que acabo de colocar en mis ojos.— ¿Papá ya se fue a trabajar?— le pregunté.—Sí, sabes que en estos días él trabaja el doble de horas. — nos separamos, busqué mi cartera para ir saliendo.—bueno, llegaré en unas horas.Nos despedimos y me fui caminando hasta la plaza. Me sentía extraña al principio, como si la ropa no formase parte de mí, sin embargo a medida que caminaba más, se ajustaba a mi cuerpo.Vi personas disfrazadas de camino a la plaza y eso aumento mi confianza, me sentí más tranquila.Al llegar a la plaza me sorprendió la cantidad de personas que ya estaban ahí, la música alta, la gente bailando y bebiendo, y los muchos pequeños puestos de comida y cosas.Caminé por los alrededores ojeando todo el sitio buscando los rostros conocidos de mis mejores amigos; Tony y Beca. No los encontré a pesar de darle varias vueltas a la plaza.No es un sitio tan grande como para que se pierdan, supongo que aún no han llegado.La música electrónica ya tenía mis oídos aturdidos, busqué un lugar con asientos para descansar, pero todos estaban ocupados, por lo menos no hacía sol, pero tampoco estaba lloviendo. Vi un espacio algo alejado de la multitud y camine de prisa para sentarme así sea en el suelo.Al llegar ahí, dejé salir un suspiro de alivio, pero ví a un chico sentado en un tronco de madera y me dio un terrible susto, haciendo que deje caer el vaso. Dios, es increíblemente guapo, me puse nerviosa con solo verlo.Juro por Dios que no podía escuchar el sonido de mi propia voz de los nervios, él se encontraba tan distante, su voz es uno de los sonidos más mágicos que he escuchado en mi vida, no exagero. Un sonido de voz masculina gruesa y apasionada, un tono profundo y resonante, con una cualidad cálida y emotiva.Quizá balbuceo demasiado en cuanto al sonido de su voz. Me sentí realmente hipnotizada solo escuchándolo.Sentí una gran curiosidad por él, mantenía una vibra diferente, un estilo muy de ciudad y por supuesto, una odiosidad que quizá me parecía inapropiada. Nunca lo había visto antes.Me encontraba ahí, como tonta, hasta que escuché la voz salvadora de mi mejor amiga gritando mi nombre. Giré mi cabeza con rapidez en dirección a la voz de mi amiga.— ¡Aquí estás!— gritó algo enfurecida— te estuvimos buscando como locos, ¿Qué haces aquí sola?Rebeca había llegado con una elegancia que parecía natural. Su cabello largo y negro caía en cascada sobre sus hombros, mientras que sus ojos azules brillaban. Con cada paso que daba, dejaba una huella de confianza y seguridad en sí misma que era imposible de ignorar.Era una joven que no tenía miedo de decir lo que pensaba, y su lengua afilada la había metido en problemas más de una vez. Pero eso no la detenía. En cambio, lo usaba como una herramienta para defender sus ideas y principios, y para poner en su lugar a aquellos que intentaban pisotearla.A pesar de su actitud desafiante, tenía una suavidad en su mirada que la hacía irresistible. Era difícil no querer estar cerca de ella, aunque a veces sus comentarios sarcásticos pudieran ser cortantes como cuchillas. Pero eso era parte de su encanto: nunca sabías qué esperar de ella, y siempre te mantendría en tus dedos de los pies.Yo me quedé algo desconcertada.— ¿Sola? No estoy sola... Estoy con— giré en dirección a donde se supone que estaría el chico, pero para mí sorpresa no había nadie.— ¿De quién hablas?, ¿Estás ebria? Deberíamos ir a bailar...— sacudió un poco su corsé negro— Me siento patética disfrazada de... Lo que sea que sea esto.Yo aún admiraba confundida el tronco donde estaba sentado él, ahora vacío. ¿Cómo se pudo ir tan rápido?, ¿A caso lo espante? Rebeca me tomó por el brazo y me llevó hasta donde se encontraba Tony bebiendo en su vaso plástico alcohol. Mi mente estaba en la mirada de aquel chico cuyo nombre todavía no séBeca inició un brindis levantando su vaso de plástico arriba.—Vamos a brindar porque nuestra querida amiga pronto nos abandona para ser feliz— choca su vaso con el de Tony, yo había perdido mi vaso.—Salud— dije yo sonriendo.—Salud — repitieron ambos.— ¿Estás bien, Venus?— me pregunta Tony, haciendo que salga de mi estado de shock parpadeando un par de veces.Tony se encontraba delante de mí, para captar mi atención —sí, solo un poco cansada.Respondí.— ¡Yo también! Ya nos podemos ir chicos, aquí no hay nada interesante. — comentó Rebeca, mientras lanzaba su vaso de plástico aún repleto de alcohol al suelo.—Yo las llevaré hasta su casa— se ofreció Tony, él siempre ha sido un caballero. Rebeca y yo lo sostuvimos por sus brazos, cada una de un lado y juntos nos marchamos de ahí.Definitivamente confirmé que la multitud, la música alta y las bebidas alcohólicas no son mi "distracción" favorita, pero no puedo evitar sentir algo de preocupación por la forma en la que se fue aquel chico.Íbamos caminando por la calle, comenzó a llover, esto de la lluvia es algo típico del pueblo, siempre estaba nublado, con lluvias y frío. No me parecía molesto, pero si me gustaría al menos sentir el sol un par de días.—Cuanto silencio. —Interrumpe Tony el silencio incómodo, mientras caminamos.—Estoy muy feliz de verlos, la universidad de verdad está matando mi vida social— comentó Rebeca.—Qué bueno que estés en la universidad, por lo menos eso tienes— dijo Tony algo triste.—Ya verás que a ti también te aceptarán, no te preocupes. Si no, puedo darte empleo como jardinero en mi mansión.— ¿Mansión? Lo tuyo es la enfermería y medicina. —dijo Tony.— ¡Las enfermeras ganan bien!Todos nos reímos, y caminamos un poco más rápido, debido a la lluvia que se hacía cada vez más fuerte. Una vez en la puerta de mi casa, Tony se despide de ambas.— ¿No entrarás?— pregunté desconcertada.—oh, no. Es una pijamada de chicas, será extraño que yo esté ahí.— ¡Oh Tony eres tan dulce!— exclamó Rebeca con sarcasmo— ¿Por qué no tienes novia si eres tan caballeroso?Me pareció un comentario fuera de lugar y procedí a golpear su brazo con una pequeña palmada.— ¿Qué?— pregunto ella aún más irritada— Tony sabe que bromeo.Miré a los ojos de Tony el cual ya estaban fijados en los míos.—No te preocupes, Venus. Tienes una amiga muy sincera. — Le regresa la mirada a Beca— Respondiendo a tu pregunta, no tengo novia porque quizá me tomó mi tiempo en escoger bien, deberías aprender de mí alguna vez.— ¡Idiota!— exclamó ella sorprendida.Rebeca tiene un particular gusto por cambiar seguido de interés amoroso, es una cuestión personal de la cual no me compete hablar, aunque si debía mencionar algo, solo podía destacar que Rebeca es toda una romántica empedernida, enamorada de la idea del amor, intentando buscar su media naranja en un lugar lleno de limones, aunque parecen lo mismo, el sabor es diferente. Me ha contado poco sobre sus experiencias románticas, siempre termina diciendo que "no funcionó", "quizá en otra ocasión lo intente".Me imagino que para una mujer tan hermosa como ella y con su actitud debe ser algo complejo encontrar el amor, ella siempre ha sido directa con lo que quiere. Detuve la pelea a base de sarcasmo y me despedí de Tony.—Llámame a penas llegues a casa— le di un pequeño abrazo y entramos a mi casa. Observé a Rebeca con desapruebo.— ¡No me veas así! Sabes que solo bromeo.—No tienes que meterte con él ¿Ok? Ya te debería caer bien, han pasado cinco años conociéndose.Ambas subimos las escaleras hasta mi habitación, mi madre se encontraba dormida y mi padre aún de guardia por el festival que aún continuaba.—No me cae mal, solo quiero que termine de declarar su amor por ti.Yo dejé salir una risa involuntaria, ya habíamos hablando de esto antes. Tony y yo solo somos amigos.Éramos adolescentes y estábamos emborrachándonos por primera vez con un vino robado de la casa de la madre de Tony. Nos escondimos en el cuarto de él mientras su madre estaba en el trabajo, llegaría tarde así que aprovechamos de experimentar con eso que a los adultos tanto le fascinaban.En medio de todo eso, tocamos el tema de "ser novios". Por supuesto que la idea de besarnos fue mía, Tony siempre ha sido demasiado tímido para dar el primer paso en nada.Nos dimos un pequeño beso pero tanto él como yo no sentimos absolutamente nada. Debido a los tantos comentarios sobre si "algún día seremos novios" habíamos tenido nuestras dudas, sin embargo, luego de ese beso ya no dudamos nunca más. Somos excelentes mejores amigos.—Sobre lo que dijo Tony... No lo tomes personal— intenté remediar yo su pelea, como siempre.Al llegar a mi habitación se tumbó en mi cama, y yo me senté en frente a la laptop, pensé que tenía inspiración suficiente, pero solo pensaba en ese chico.—No lo tomo personal, sé que él entiende por lo que paso... El amor es tan complejo. — confiesa mientras mira fijamente el techo.
— ¿Estas enamorada de alguien? ¿Es de la ciudad? —pregunté.
—Siempre lo he estado... Aunque pasen los años el solo hecho de recordar su nombre me hace temblar de emoción.
— Nunca me has hablado de él, o mejor dicho, nunca me hablas de nada ¿Por qué la cara triste?
—Porque hablar de ello solo le suma importancia.
Yo no sé exactamente que decirle a Rebeca, es la primera vez en meses que vuelve a hablarme sobre ese amor que no es posible.
— ¿Qué evita que estén juntos?
—Una no puede controlar de quien se enamora, Venus, pero si podemos controlar a quien entregarle nuestro ser... Es más fácil para mi entregar mi cuerpo que entregar mi corazón, siempre duele, siempre termina doliendo para siempre.
Este lado tan poético y triste de Beca me sorprende.—Beca, yo—Ella me interrumpe.—Oh no, no digas algo metafórico o cliché del amor y que el tiempo lo cura todo. — Me encara arrastrando mi silla rodante a su dirección— no digas esas tonterías.—Está bien, no lo diré, pero debes presentarme a ese idiota para decirle que está perdiendo su gran oportunidad contigo.Me levanté de mi silla, cambié mi ropa húmeda por la lluvia y procedí a clavar mi cabeza en la suave almohada, cayendo prácticamente inconsciente del sueño.Me levanté de la silla al verla profundamente dormida, esto es algo clásico de ella. Su sueño es rápido y profundo. No podía evitar sentir algo de nostalgia por ''dormir'' como los humanos lo hacen, olvidar sus problemas por un puñado de horas, levitar en su mente con sueños que parecen sacados de una película de bajo presupuesto, por Dios, ¿Qué estoy diciendo? amo la inmortalidad. Dormir te hace débil.Le coloqué una manta encima y me acerqué a la ventana, justo daba al frente de los nuevos vecinos, "nuevos" en teoría porque yo ya los conozco... Y muy bien.Salgo de la casa en silencio y me detengo en frente de la casa de los vecinos. Ahí estaba Cédric, a punto de entrar a su casa, lo vi en el momento perfecto, bajé rápido por la ventana sin hacer mucho ruido.Caí de puntillas con suavidad, él no notó mi llegada hasta que hablé:—Vaya, vaya, vaya... Pero miren a quién tengo el placer de ver— dije mientras caminaba hasta su dirección.La lluvia nos empapaba por completo, su cabello se
Llegué a casa y me encontré a mi madre sentada en el sofá, sujetando un periódico viejo bajo la luz de la pequeña lámpara de la sala.— No tienes que fingir que lees. — dije caminando directo a la cocina.—Cuéntamelo todo— levantándose con absurda emoción.— No hay mucho que decir, solo chicos con alcohol y conversaciones vacías.Ella cruzó sus brazos en desapruebo.— ¿Puedes dejar de actuar tan odioso? sólo te pido algo de información personal, no es tan difícil.—No hubo nada nuevo, bueno... ahora los jóvenes de hoy en día beben más alcohol que nunca.Mi madre me acarició el cabello y me dio un pequeño beso en la mejilla.—Pues tú serías igual si fueses de esta época.—Nah, yo sería otro tipo de chico. — Abrí la nevera para buscar un pequeño saco con hemoglobina.— ¿Cómo estás tan seguro? — preguntó mi madre.—Pues, no creo cambiar quien soy solo por la moda de la actualidad. Hay jóvenes que no beben y que pueden ser igual que yo.Recordé a Venus, cuando pateó el vaso de plástico co
El frio del bosque recorre mi cuerpo. Intento correr con todas mis fuerzas, pero solo resulta en vano.Me detengo para mirar con detalle mí alrededor, es un bosque oscuro, llevo un vestido blanco y estoy descalza. Escucho voces de personas riéndose, se acercan a mí pero no logro verlos, siento como me persiguen de nuevo. No puedo mover mis piernas, miro al frente de mí y aparece ese chico cuyo rostro no logro ver con claridad, vuelve a tender su mano y justo cuando estoy por tomarla me vuelven a cortar el cuello.Abrí mis ojos rápidamente, esta vez no grite, supongo que ya estoy acostumbrada a morir en mis pesadillas. El sol golpeó mi cara con agresividad, definitivamente madrugar es lo peor, sientes que te levantas con tu cuerpo adolorido y no dormiste nada.Busque mi pequeña libreta y escribí de nuevo mi pesadilla recurrente, al terminar decidí releer algunas páginas anteriores, dándome cuenta que escribo siempre lo mismo. Siempre el bosque, siempre el final mortal, pero esta vez po
Me encontraba deambulando de un lado a otro en mi habitación a oscuras, esperando que cayera el atardecer para poder salir y despejar mi mente entre tantas cosas.No solía pensar demasiado ningún tipo de situación, mi padre me entrenó lo suficiente para poder decidir y tomar acción en contra de lo que sea. Cualquier sentimiento impulsivo e irracional puedo controlarlo con totalidad.Durante mis largos entrenamientos en el reino de Blackstone; luché contra tantos poderosos vampiros, algunos estuvieron a punto de hacerme caer... pero ninguno me hizo dudar sobre cualquier movimiento o decisión como ahora lo está haciendo aquella chica de cabello rojo; Venus.Me sentía tonto por tener algo de curiosidad en una humana. Mi especie y la humanidad son enemigos, cadena alimenticia por así decirlo, no tenía sentido alguna clase de interés más allá de saborear su sangre.Me detuve en seco al oír a Venus a través de su ventana, llegar a su habitación. Sentí el impulso de asomarme y me dejé fluir.
Mi cuerpo se sentía pesado, como si me hubiese caído un camión de carga justo en mi espalda.Intenté abrir los ojos poco a poco, todo el lugar estaba oscuro. « ¿Dónde estoy?» pensé.Intenté levantarme, pero de la nada sentí una punzada terrible en mi cien, me quedé recostada, intentando asimilar dónde estoy exactamente.Mi vista se fue acostumbrando a la oscuridad de la habitación y pude percatarme rápidamente que no estoy en mi cuarto; no es mi cama rosa, no está mi alfombra de peluche rosa, no está mi ventana abierta como normalmente la suelo tener, no es... ¿De quién es?Unos pasos se acercaban, yo miré fijamente la puerta esperando a un extraño ser, quizá estoy secuestrada. « ¡Dios mío!».Se abrió la puerta y para mí sorpresa es mi vecino, estoy en el cuarto de mi vecino, el guapo vecino de nombre aún desconocido, al que... Al que estaba siguiendo en un instante.— ¿Qué pasó?— pregunté sin demora.Él se acercó, se sentó en el borde de la cama y me miró fijamente.—tuviste un accid
Al llegar a su habitación la miré sentarse con algo de dificultad, me acerqué a ella para ayudarla a reposar su cuerpo en su cama, me agradeció con una pequeña sonrisa.Yo aparté mi mirada rápidamente, aún preocupado por la idea de no poder controlarla como todos los demás, así sería fácil manipular toda la situación. Hacerle creer lo que yo quiero y que deje de hacer preguntas que no puedo responder.« ¿Por qué carajos ella es la excepción? En mis padres no funciona porque tengo esa clase de emoción y sentimientos enlazados por ellos, eso me hace incapaz de manipularlos, o ejercer algún tipo de poder de control mental sobre ellos, con todos aquellos con los que yo no formé un vínculo más allá de amistad, puedo influenciar en su vida; sus decisiones... ¿pero qué pinta Venus aquí? ¿Cuál es su conexión conmigo? No creo que sea amor. No nos amamos, ni siquiera nos conocemos. Esto es estúpido».Ella me miraba atentamente esperando alguna clase de explicación de lo que haremos.No podía ex
El agua caliente de la ducha me hizo bien, sentía el cuerpo relajado; sin embargo, las heridas aún no me dejaban de doler, sobre todo la de la cabeza. Acaricié con cuidado la herida de mi brazo, no era tan grave, pero dolía como si me hubiesen clavado un cuchillo... mi madre dice que las heridas con objetos filosos siempre duelen más de lo que parece.Tuve un pequeño flashback de ese hombre encima de mí, saboreando la sangre que salía de mi brazo. Pensé que iba a morir por un segundo, ¿Qué clase de asesino en serie es? Aun no estoy segura de sí contarle a mi padre sea buena idea, quizá mi vecino tiene razón, una llamada anónima no me expone de esa forma. Mañana me iré al trabajo y de camino llamare desde un teléfono público para informar que el asesino anda en el bosque junto con algunos rasgos distintivos de su rostro y tatuajes.Salí del baño sin mirar adelante de mí y choqué con mi vecino, nos miramos por unos segundos; no quiero sonar cursi o como si fuese alguna escena de romance
Todavía estaba pensando en lo bien que había funcionado mi poder con los padres de Venus. Será bastante problemático el hecho de que a ella no le afecten mis influencias; tendré que continuar evadiendo toda clase de preguntas sobre mí y que ella se mantenga tranquila y fuera de más conflictos a causa de su inmensa curiosidad.Medite toda la madrugada recostado en la cama de mis padres, queriendo saber si Venus ya se había dormido por completo. Pensando en cómo se veía en toalla recién salida de la ducha.Ya había amanecido, el día estaba muy frío, nubes grises en toda la zona, probablemente lloverá como todos los días. Miré el reloj de mi muñeca: ocho y quince de la mañana.Hablando de eso, mi garganta estaba pidiendo un poco de sangre, siento que estoy algo débil y tengo que prepararme para ir al bosque a buscar al desgraciado que le hizo daño a Venus y que probablemente este ocasionando todo este caos en el pueblo.Mi sed estaba algo irritante. Seguí el consejo de mis padres de busc