— ¿En qué estabas pensando? —Preguntó mientras dejaba sentarme en la hierba. Y yo no tenía nada qué responder ¿por qué las personas evitaban que hiciera algo estúpido? ¿Por qué tuvo que aparecer él? Por otra parte, quería gritarle por haber llegado.
—No debiste hacer eso —solté abruptamente.
— ¿Qué? ¿Acaso no valoras tu vida? —Increpó estupefacto, viéndome como si se preguntara: “¿por qué hace esto? Encima me reclama por salvarle la vida”.
— ¿Por qué tuviste que salvarme! —Exclamé sin tomar en cuenta lo que había dicho, so
— ¡Un Vampiro Diurno! —Exclamó Bella cuando terminamos.Las hadas tenían la capacidad de hurgar los recuerdos y a través de ellos investigar a otras personas sin la necesidad de buscarlas. No sabía realmente cómo funcionaba, pero ella necesitó de una taza de agua para que mi sangre pudiera mostrar la imagen de Jase y lo que ocultaba. Ciertamente el agua dijo que era un vampiro especial nacido de la sangre de mortales y que estaba protegido por su capacidad de caminar bajo el sol mediante símbolos y señales que solo Bella podía entender. Sin embargo, después, el agua quedó oscura como una señal de que no revelaría quién lo protegía.Después, un archivo escaneado llegó al teléfono de Bella, era un E-mail de
— ¡Jean! —Chillé indignada, arrebaté su mano de las de Jase y le jalé por la cazadora para llevarlo hacia dentro dejando a su víctima inconsciente, no podía hacer esto, por más que el fuera un vampiro, él no tenía el derecho de hacerle olvidar algo que él quería. Estaba enfadándome con Jean— ¡No tienes derecho a hacerle esto a las personas!Pobre Jase, seguía estando quieto mientras yo le veía desde el rincón donde tenía a Jean a escondidas.—Pero…—No quiero oír nada. Vete —mascullé, no quería escuchar una explicación.Jase se encontraba mirando al suelo y para cuando me
Finalmente, la media luna en lo alto, las canciones de los chicos y el carisma de Jase, había hecho de aquella noche una muy emotiva y divertida con las anécdotas que cada uno contó.Pasada la media noche, sin poder dormir, vi una silueta pasar por nuestra tienda, me fijé en Bella que estaba profundamente dormida, instintivamente me calcé las botas y abrí la tienda evitando hacer mucho ruido. Sin embargo, al salir, la melodía nocturna se conformaba por grillos y algunas ranas que croaban a lo lejos, aquella silueta había desaparecido por completo y solo pude apreciar las estrellas del oscuro cielo y la luna que era invadida constantemente por nubes.El Monte Rainer se reflejaba en las aguas en calma del lago, mientras me acercaba, recordé el hada Saedeen que había hablado
Fueron unos largos minutos el que se tomó para ducharse, arreglarse como para una fiesta, pues ella decía que no quería un embalsamiento y tampoco todo lo que ofrecía los servicios funerarios. Bastaba con el ataúd y todo lo que ella había especificado.—Puff. Fue un baño delicioso —entró diciendo ella con una bata blanca y su cabello envuelto por una toalla, se sentó frente al tocador y me miró desde el espejo que la veía, ella ya no se iba a sentar así— ¿Quieres ayudarme o seguirás viéndome de esa manera?Memoricé toda su habitación, sus muebles, el orden de sus peluches, la forma en que tenía todos sus productos de belleza.Me apresuré a ayudarle musitando una disculpa, tomé la secadora y cepillé su cabello como si se tratara de una hermana menor a la que perdería.Estar
El día era soleado, no corría ni una sola nube en el cielo de Aberdeen.—No imaginamos lo triste y doloroso que es la partida de un ser querido si no la experimentamos en carne propia, nos aferramos a la vida de algunos que nos es imposible dejarlos partir. Pero tampoco podemos atentar contra la naturaleza, nosotros no somos dueños de nuestra existencia, la vida se nos es otorgada por Dios y solo por Dios se nos es arrebatada. Sin embargo, él nos espera al otro lado, en un reino de leche y miel con los brazos abiertos para recibirnos y ser parte su glorioso reino. Isabella Jones ha sido llamada para disfrutar de ella, joven ha muerto pero su alma rebozará de energía y descansará en la eternidad… que el Señor de las Alturas te guarde en su Santa Gloria. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen —terminó de recitar el sacerdote Mel; era un señor como d
—Hoy tiene entrenamiento —dijo Aaron.—Y la otra vez tenía un resfriado —bufé, no encontraba la razón por la que Greg me evadiera tanto y ya no quería escuchar las explicaciones de su padre que solo me retiré sin más.Cabizbaja otra vez retomé el camino de vuelta a casa para esperar a que la tristeza decidiera apoderarse de mí nuevamente. Pero simplemente Jase parecía adivinar y estaba empecinado a ayudarme que aquella misma tarde apareció en el umbral de mi puerta con Naruto The Last en la mano con una ligera sonrisa en sus labios.—No puede ser. Debes ser brujo ¿cómo lo has adivinado?—Uno siempre busca información por lo que le interesa — respondió con una voz armoniosa. Lo dejé pasar, por suerte y por mala, Josh estaba en casa mientras que mamá ocupaba su tiempo libre acompañando
Arrastré mis pies hasta el baño, no había podido dormir luego de que Jase se fue, sentía que había traicionado el amor que sentía por Daniell, pero al mismo tiempo sabía que todo había sido un error y no debía complicarme. Y lo hacía.Se auguraba un buen día, aunque bien podría cambiar porque aún eran las 5 y tanto de la mañana, pero mis ojeras no decían lo mismo cuando me paré frente al espejo y me lavé la cara esperando alejar todo lo malo que me rodeaba la cabeza.Había bajado de peso, estaba un poco más pálida y con la parte izquierda de los labios hinchado, se veía partido y había dolido cuando me cepillé, me pasé la lengua encima, dolía. Pero eso no fue lo que hizo que me diera miedo, sino la extrañeza de mi reflejo. Se veía mucho más delineado en las ojera
— ¿Qué? —Pude decir con perplejidad. Josh también estaba sorprendido.—Buenos días —saludó Cedric entrando y tomando asiento—querida Melinda, adorado Joshua. Disculpen a este tío suyo por robarles el tiempo de conversación de hermanos, pero esto es importante —culminó otorgando una mirada de "Esto es más importante y peligroso que todo lo demás."— ¿Qué sucede? —Repliqué ante la advertencia en la mirada.—Bueno, ya que entre ustedes no hay ningún secreto, —tomó la taza de café que ofreció mamá— te lo voy a decir, tenemos que entrenarte para lo que viene.— ¿Por qué Mila tiene que entrenar? —Preguntó Josh con curiosidad. Y entonces Cedric me dio la mirada de “¿aún no le has dicho?”—