Ubicación: La isla de «Los superiores»Los señores Li, regresan a casa sin Amadeo, ya que este se queda con Augusto en la mansión del señor Bianchi. Lisandro parece algo preocupado en el camino de vuelta.—¿Qué ocurre? —le pregunta, y él dice que prefiere esperar un poco para contarle.—¿Puedo ayudar en algo?—No, cielo. Deja que yo me haga cargo. Te avisaré si necesito de tu encantadora presencia —responde Lisandro tratando de sonar menos preocupado.—¿Qué pasa? ¿No confías en mí? —pregunta ella, algo molesta.—Claro que sí. Pero no es algo que tenga que ver contigo. Debo resolver algunos asuntos para el señor Bianchi y si lo hago, tendremos su apoyo.—Está bien —indica ella, algo preocupada.—De todas maneras, esta noche es la iniciación de Peralta —comenta Lisandro como si eso lo preocupara.—¿Crees que me va a elegir para que pase la noche de su iniciación con él? —le pregunta ella, intentando saber si eso molesta a su esposo.—Tal vez no, pero si no lo hiciera, nos perjudicaría —
Ubicación: La isla de «Los superiores»—Señor Peralta, qué placer que venga a saludarnos —indica la señora Miller, sonriéndole a Tania.—Cómo no hacerlo —responde él con su característica simpatía.—¿Ya ha logrado elegir a la mujer que lo acompañará esta noche? —pregunta la señora Miller, mientras Tania busca a Lisandro entre la gente.—Aún no, son muchas mujeres y quería saludarlas a todas. No quiero ofender a ninguna —dice él coquetamente, conquistando a la señora Miller—. ¿Usted qué me recomendaría hacer?—Querido, eres muy valiente en preguntarme, pero sabes que no puedo decirte a quién elegir —responde ella, mirando a Tania.—Entiendo, lamento haber dicho eso sin pensarlo —responde él, sonriendo nuevamente.—Tania me contó que se conocen —comenta la señora Miller de manera coqueta.—Sí, las vueltas de la vida volvieron a Tania, mi cuñada. Su difunto esposo y la madre de mi hijo son hermanos —responde Amadeo, evitando mirarla.—Supe lo que le pasó a tu esposa, qué cosa más horribl
Ubicación: La isla de «Los superiores»Amadeo la abraza y, aunque ella no lo quiere cerca, no puede evitar que lo haga. Aún duele lo que le pasó en manos de Bernardo. Ha sido una tonta en más de una oportunidad. No solo elige mal a los hombres con los que se rodea, sino que tampoco le importa lo que le ocurra con tal de poder vengarse de quienes lastimaron a su hija. Por lo menos, eso piensa hasta que él abusó de ella.—Es doloroso para mí, saber que nunca fui tu primera opción cuando necesitaste ayuda —exclama Amadeo como si sintiera lo que le ha ocurrido—. Fue mi culpa lo que te hizo ese maldito y no sé cómo disculparme.—Los dos jugamos con fuego al seguir juntos, sabiendo que él nos observaba —indica ella, tratando de apartarse de Amadeo—. Siempre vas a ser mi primer amor, pero esto ya se terminó. Es hora de seguir adelante.—No quiero —reclama él, tomando una de sus manos—. No quiero ceder todavía. Aún eres la única mujer que hace que mi corazón lata con fuerza cuando está cerca.
Ubicación: La isla de «Los superiores»Regresan a la mansión, y Tania va directamente al cuarto de Amanda. Allí la encuentra dormida en los brazos de Nino. Este se despierta al escuchar la puerta.—Señora Li, no es lo que parece —indica Nino, al darse cuenta de que su rostro refleja preocupación.—Mamá, cálmate, él no me hizo nada. Tenía miedo y le pedí que se quedara conmigo —asegura Amanda mientras se aparta de él—. Me llegaron estos mensajes anoche.Al mirar el teléfono de Amanda también se asusta. Ese maldito de D’ Luca no va a dejar de molestarlos. Nino se pone de pie y la sigue a la oficina del señor Li. Este está revisando unos documentos que debe enviarle a Kosovo, cuando la ve entrar.—¿Qué ocurre? —pregunta él, y ella le muestra los mensajes que Amanda ha recibido.—Te dije que ese tipo es peligroso. —Está molesta. No puede contenerse—. Ahora ha conseguido la dirección IP de Amanda. ¿Qué tal si ya sabe dónde estamos?—Tranquila, yo lo resolveré —le asegura Lisandro, se pone
Ubicación: La isla de «Los superiores»Amadeo y Amanda permanecen en la sala hablando toda la tarde, mientras Tania prepara las valijas como le ha pedido Lisandro. Sabe que él está de viaje, por lo que no recibirá un mensaje suyo hasta dentro de un par de horas. Aun así, no puede dejar de sentirse ansiosa, así que le escribe: «Necesito que me llames cuando veas este mensaje. No pasa nada malo. Solo quiero estar tranquila y tu voz me relaja».Envía el mensaje y se da cuenta de que está demasiado encariñada con Lisandro. Él es un mujeriego; no va a estar con ella ya que no puede llenar los zapatos de esas mujeres. Tiene que entenderlo de una vez por todas. Intenta borrar el mensaje, pero no puede. La puerta de su dormitorio se abre y Amanda entra con su nuevo vestido. Se ve hermosa, su pequeña ya es toda una señorita.—Mamá, ¿crees que le pareceré bella a Nino si aparezco con este vestido? —pregunta con vergüenza—. No es que pretenda nada. Solo quiero verme bien, para que no se olvide d
Ubicación: Argentina—Señor Murphy, al parecer su hijo, no es el único que toma malas decisiones —dice el señor Li al entrar a su oficina acompañado de sus empleados.—¿Lisandro? No puede ser, tú estás muerto. —El hombre asustado.—¿Crees que no volvería de mi tumba al enterarme de que molestas a los míos? —responde Lisandro, mientras su personal apunta a la cabeza de Murphy con sus armas—. ¿La organización no te dijo que estaba prohibido ayudar a D’ Luca?—Él es mi amigo, tenía que hacerlo. Esa perra hizo que le fracturaran las extremidades —reclama Murphy como si odiara a Tania, aunque ni siquiera la conoce. ¿Cómo puede hablar así de ella?, se pregunta Lisandro, cargado de ira—. Ella solo es una zorra. Tú estuviste en la casa de Lascialandare, viste lo que ofreció a cambio de nuestra firma.—Por lo que recuerdo, ella estuvo dispuesta a satisfacer los morbos más oscuros de cinco cerdos despreciables con tal de ayudar a su esposo a conseguir la presidencia de la empresa de su padre —r
Ubicación: Argentina—Creo que eres sordo, pero según tus informes médicos eres capaz de escuchar —le indica el señor Li, cerrando su móvil y entrando a la habitación de D’ Luca.El maldito enfermo le sonríe.—¿Cree que me preocupa morir? Solo lo hice para que volvieras a hablar conmigo —responde el desgraciado, como si se sintiera feliz de lograr que esté allí. ¿Acaso finge no temerle?—Sabes, D’ Luca, no solo vine a hablar contigo. Debes pagar por lo que hiciste —le asegura Lisandro.—¿Me romperás de nuevo los huesos? Aún no se han soldado. ¿Me quemarás vivo? Ah, ya sé, me asesinarás, ¿no? —Parece estar perdiendo la cordura—. No me matarás porque ella no quiere lidiar con mi muerte. Aun así, la empujaré a hacerlo hasta que se dé cuenta de que conmigo vivo no tendrá paz. Y aun cuando muera, no dejaré de carcomer su conciencia.—¿Y quién dice que ella sabrá que moriste? —responde Lisandro sonriendo—. ¿Crees que eres el único que sabe jugar? Esto no lo hago por Tania, sino porque disfr
Ubicación: La isla de «Los superiores»Mijaíl, después de leer lo que el señor Li le envió, lo entiende todo. La madre de Elena estaba trabajando con Sergey. Y debido a eso, una nueva pregunta lo invade. ¿Es posible que Alexander y Antón sean hermanos reales? ¿Ely y su difunta esposa son gemelas? ¿Pero por qué no tienen el mismo ADN? Llama a Arthur para que revisen las pruebas con esta nueva información. Siente que su cabeza está por explotar; no puede concebir el hecho de que ese maldito haya usado a sus dos esposas en todos esos experimentos.Además, no hay garantías de que no le haya hecho algo ahora a Antón y Alexander durante el tiempo que los tuvo con él. Y ahora está muerto, no puede interrogarlo. Sin embargo, ordena que lleven a los científicos que quedaron para interrogarlos. Una mujer que no habla ruso resulta ser la médica que huyó desde Argentina y ayudó a estafar a los Stephen Son. De ella se hará cargo en persona.Arthur llega cuando están terminando de armar el árbol na