La mirada de Derrick se endureció cuando vio al que era mi acompañante, de hecho, pude ver el momento exacto en que se tragó todas las palabras venenosas que seguro estaba por decir. En vez de hacer eso solo me miró, apretando los labios. —¿Qué hace él aqui?—¿Alguna vez has escuchado que el enemigo de tu enemigo es tu amigo? —pregunté y sonreí, intentando liberar la tension—pues el señor Monteineu ahora es nuestro amigo y va a ayudarnos a cazar a Sainaaz. Derrick negó con la cabeza. —No lo necesitamos. Solté un suspiro de frustración y di un paso hacia él, estaba claro que seria dificil convencer a Derrick pero tampoco esperaba que se pusiera tan pesado. Después de todo ambos sabiamos que si lo necesitabamos.Estuve a punto de reclamarselo cuando Monteineu intervino. —Claro que me necesitan, porque según lo que Emily me ha contado necesitan volver a la casa de Sainaaz, y dudo que puedan hacerlo solos... Ademas secuestró a tu familia ¿no?Los hombros de Derrick se tensaron.—Eso
Capitulo narrado por Layla.★Mis mejillas seguian teñidas de rojo y mi cuerpo no dejaba de temblar. A pesar de estar frente a la chimenea. Eso era lo que mas detestaba de Fargo en el mes de junio. Las bajas temperaturas que podía alcanzar. Pero aún así, eso no era motivo para que Sainaaz dejara de pedirme seguir localizando a Rio, pese a que llevaba toda la tarde intentandolo y seguía sin encontrar un lugar especifico.Intenté decirselo cuando me lo pidió de nuevo pero él sólo soltó un gruñido de molestia. —Solo haz tu maldito trabajo y cierra la boca. Solté un suspiro largo de cansancio.—Lo he estado haciendo toda la tarde Orpheus. Rio está bien escondido y por eso no lo he logrado. —O tal vez eres una idiota. Mis labios se apretaron con fuerza y lo miré de soslayo, notando su sonrisa de lado que lanzaba cada vez que lograba una reaccion esperada. —Era un chiste querida Layla —murmuró —sabes que no era verdad. De hecho sabía bien que si lo era, pero era demasiado estupida c
Mi corazón cayó al suelo cuando vi las fotografias que Monteineu tenia entre las manos.En ellas se podia observar a Sainaaz mostrando una sonrisa feliz de oreja a oreja, mirando con ojos brillantes a la mujer que tenia al lado. Una señora de cabello castaño con ojos azules miraba a la cámara, con las mejillas rojas y una sonrisa timida. Derrick tenía un gesto de dolor cuando lo miré; y fue tan claro que lo único que pude hacer fue guardar silencio y dejar que el dolor de estómago me envolviera.—Ella es tu madre ¿no? —Monteineu miró a Derrick con interés —creo que hablé con ella un par de veces cuando buscaba a Lilith. Era una mujer encantadora. Derrick tensó la mandibula y asintió lentamente. —Lo era. —Puede haber una posibilidad de que siga viva. Él negó con la cabeza, mirandome de reojo con los brazos rigidos.—No, no la hay.Tenia un nudo en la garganta tan grande que fui incapaz de decir ninguna palabra, y tampoco creia que fuera necesario, porque dudaba que Derrick quisier
Cerré los ojos cuando vi que a lo lejos, Sainaaz apagó las luces de la casa donde se escondian. —¿Vamos a quedarnos aquí toda la noche? —pregunté a Monteineu, cerrando los ojos un momento.—Toda la noche y los días que sean necesarios —murmuró.Puse una mueca de disgusto y me acomodé mejor en el piso sin quejarme, observando lo humeda y sucia que era la cueva donde habiamos podido instalarnos. —Sé que no es lo más comodo del mundo pero, necesitamos adaptarnos a la situación Emily. Al menos hasta que estemos seguros de lo que buscamos.—¿Y qué buscamos?Mi respuesta lo dejó descolocado unos segundos, abrió y cerró la boca, hasta que por fin sacudió la cabeza.—¿De qué hablas?Me remojé los labios y me encogi de hombros, mirandolo con decisión.—He estado pensando en que Derrick busca a Rhys y a su padre, a la única familia que le queda, tú buscas a Sainaaz para vengarte, y después volveras a tu vida de antes... y yo no tengo idea de que busco, o que hago aqui. Es decir, no me queda n
Los lunares en el cuello de Derrick hacian una linea recta, una linea recta casi identica a la que estabamos recorriendo para llegar a la casa de Sainaaz.Miré por tercera vez a Monteineu, nerviosa, estaba justo detrás de nosotros, mirando la oscuridad de la noche con sumo cuidado, como si temiera que alguien nos atacara desde atrás.—Cuanta ironía ¿no? —susurró Derrick a mi lado con cierta diversión —hace un mes estábamos en una situacion diferente. Tú en el equipo de Sainaaz y yo con mi familia.Noté el deje de rencor en su voz, pero lo ignoré. En vez de enojarme solo asentí levemente, mirandolo de reojo.—Y hace un año estaba leyendo un libro con mi madre en casa —murmuré —antes que tú y tu familia me lo quitaran todo.Ese comentario pareció molestarle mucho porque me tomó del brazo con fuerza, apretando los dientes.—No actues como si tú fueras la única victima aqui Emily —siseó —porque no lo eres.Me solté de su agarre, mirandolo con recelo.—Ni tu tampoco, así que cierra la puta
La oscuridad de la pequeña casa nos abrazó en el momento en que entramos. Estaba vacia y lo único que pude percibir fue el comedor del centro, donde reposaban un par de velas.Derrick, quien iba al frente sacó de su bolsillo una daga, mirando todo con detenimiento y precaución, al mismo tiempo que todos nos quedamos callados para intentar percibir todos los sonidos. Solo había silencio, pero dentro de todo el silencio un pequeño ruido se escuchó en un rincon. Como si alguien se hubiera arrastrado. Agudice el oido y retrocedi hasta chocar con la puerta. Vladimir dio un paso a la derecha y puso sus dedos en el interruptor de la luz, listo para encenderlo.Y justo cuando iba a hacerlo algo se detuvo frente a mi y me tomó del cuello con fuerza, haciendo que perdiera el equilibrio. Solté un grito ahogado y seguido de eso las luces se encendieron. Esperaba ver el rostro de Sainaaz repleto de satisfaccion y a mis dos compañeros aterrados sin saber que hacer... Pero fue todo lo contrario.
Abrí los ojos cuando algo golpeó contra mi frente. Tenía la vista borrosa y todo estaba dando vueltas a mi alrededor. Pase la lengua por mis labios y cerré los ojos de nuevo, algo volvió a chocar contra mi frente y me obligué a abrirlos de nuevo. Lo que había frente a mis ojos era un enorme techo color gris que tenia grietas enormes, de donde cayó una gota de agua y volvió a golpear mi frente con delicadeza.No tenía idea de donde estaba, y para descubrirlo me obligué a ponerme de pie lentamente.Observé mi alrededor, dandome cuenta que estaba dentro de un pequeño cuarto que tenia bloqueada la salida con rejas de metal. Seguía asimilando todo cuando fragmentos de lo que había pasado se instalaron en mi cabeza, haciendome correr hasta las barras de metal para intentar sacar la cabeza.—¡DERRICK! —grité con fuerza—¡¡DERRICK, VLADIMIR!!—¿Emily? —la voz de Derrick se escuchó al lado de mi, por lo que supuse que debia haber otra celda más—¡Emily! Solté todo el aire de mis pulmones y
Capitulo narrado por Orpheus Sainaaz.***Servi una última copa de vino y observé con cuidado a Layla quien seguia de pie al borde de la escalera, pensando cosas inutiles que no debia pensar.—Querida Layla—replique con frialdad± ¿puedes dejarme beber el vino en paz? esta molestandome tu actitud.Ella parpadeó un par de veces, reaccionando.—¿Qué harás con Derrick y el otro hombre?—En el mejor de los casos matarlos.—¿Y en el peor?Suspiré.—Torturarlos.Me miró directamente con el ceño fruncido, mientras tomaba asiento a mi lado como si quisiera hacerme cambiar de opinión.—No creo que a Rhys le agrade la idea. —susurró.—Rhys estará muerto para ese entonces.Su gesto cambió rapidamente y la vi echarse para atrás en el asiento.—Temo que asi como asesinaras a Rhys me asesines a mi. —murmuró.Casi se me escapaba una sonrisa porque ese era el plan de hecho, pero no podía decirlo abiertamente porque necesitaba de su ayuda en ese momento.Fingi una media sonrisa y la miré.—Querida Layl