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25.| La carta de Carlota.
—Ya es suficiente, ponte de pie ahora. La luz del exterior golpeo mi rostro cuando Derrick aparto las cortinas, puse una mueca y lo mire con mala cara. —Dejame en paz —masculle girandome en la cama para quedar de espaldas—no estoy de humor. Lo escuche soltar una risa pero no fur graciosa, si no una llena de ironia. —¿Te crees que yo si? He estado fuera por semanas intentando solucionar tu vida, y tú ni siquiera puedes levantarte de la cama.—Porque no quiero hacerlo —aprete los labios —ademas nadie te podio que lo hicieras.—Eso me queda claro, pero lo hago porque me necesitas Emily.Aparecio un pesado nudo en mi garganta, no lo decia en reproche ni en forma de presumir, lo decia como si me tuviera aprecio y lastima, ambas cosas a la vez. Eso hizo que bajara la cabeza, sintiendome una tonta. —No te necesito —murmure avergonzada en voz baja. Soltó una risa sarcastica mientras negaba con la cabeza, comenzando a levantar todo el desastre que tenia en la habitacion. —Parecia todo l
26.| Un momento de padre e hija.
Me dolía todo el cuerpo, estaba agotada y no podia parar de llorar. El pecho me ardía y lo único que queria era que esa tortura terminara cuanto antes.Darrick y Rhys habían vuelto a su mansión antes que el sol apareciera, se habian quedado toda la noche conmigo hurgando todas las cartas que Carlota le habia enviado a Selene y que realmente no decian la gran cosa, solo palabras clave y quiza otras cuantas cosas que solo conocian entre ellas. Los Donovaz me prometieron que me visitarian por la noche cuando el sol volviera a desaparecer; prometieron que ibamos a solucionar lo que sea que mi mad... Selene hubiera hecho. Pero no, yo no tenia tiempo que perder, y tampoco queria hacerlo. Necesitaba saber que era a lo que Carlota se referia, necesitaba salvar mi vida de una manera u otra, porque nadie mas podria hacerlo por mi.Por eso sin pensarlo ni un momento pasé un brazo por mi rostro para limpiar los residuos de las lagrimas que quedaban y tomé una sudadera gruesa, ya tenia decidido l
Especial 3.✨
*Capitulo narrado por Selene Sallow*Era más de media noche cuando entré a la habitacion de hotel, las gotas de lluvia estaban golpeando el cristal de la ventana y Lilith las miraba fijamente, sin expresion alguna. La miré directamente a los ojos, estaba tan distraida que ni siquiera se habia dado cuenta de mi llegada. Tragué saliva y fui a sentarme en el pequeño sillon del rincon, mirando a mi alrededor. —¿En qué piensas? —le pregunté.—En Sainaaz —admitió —me revolque con él. Sonrei un poco porque eso era algo que ya me imaginaba. —Por supuesto que si, era imposible que no lo hicieras.Ella me miró, recostandose en la cama con las manos bajo su cabeza. —¿Y usted?—También me acosté con él si es eso a lo que te refieres —eleve una ceja y cruce una pierna —Emily es su hija. Vi como Lilith levantaba la cabeza de golpe con los ojos abiertos, me parecio sorprendente a que estas alturas no lo supiera, pero aun asi hice un gesto restandole importancia porque ya sabía cual seria su si
27.| La familia Donovaz.
Dejé el papel blanco sobre la mesa con un poco de más fuerza de la que era absolutamente necesaria. Derrick frunció el ceño por unos segundos sin dejar de mirarlo.—¿Qué es eso? —preguntó por fin. Me encogí de hombros, ocultando una pequeña sonrisa. —Abrelo si quieres saberlo. Sus ojos me miraron con desconfianza por un momento, pero tras pensarselo un poco más terminó soltando un suspiro y lo desdobló, leyendo el contenido y dedicnadome otra mirada de confusión.—¿Una dirección?—La dirección de donde estan tus padres —aclaré con una sonrisita.Rhys, quien habia estado en el fondo armando un rompecabezas con ceño fruncido me miró de golpe, poniendose de pie y acercandose rapidamente hasta quedar frente al pequeño trozo papel, que miró con un detenimiento sorprendente.Derrick no había expresado nada aún. Le sonrei enormemente al darme cuenta de ese detalle, esperaba recibir un cumplido o aunque sea un agradecimiento, pero lo único que me dedico fue una mirada interrogativa.—¿De
28.| Mamá...
Las miradas de los hermanos Donovaz cayeron sobre mi en ese momento, justo cuando la realidad de todo lo que habia pasado me revoloteaba por la cabeza.Mi madre era una asesina, mi madre habia matado a la mamá de los que me habían protegido, mi madre se habia encargado de quitarsela por siempre....Lo peor de esa situacion era que ella sabía que se trataba de los hijos de la mujer que habia matado y jamás dijo nada, dejo que me protegieran aunque sus manos estuvieran manchadas de la sangre de su familia.Una lágrima resbalo por mi mejilla cuando los ojos azules de Derrick se cruzaron con los mios. Por primera vez su mirada no parecia inexpresiva, en ese momento me di cuenta de la emocion que pasaba por ellos.El odio....Intenté decir algo para defender a mi madre o a mi, pero no supe exactamente que podia arreglar esa situacion. Abrí y cerré la boca un par de veces, mirando como Rhys tomaba a su padre por los hombros para sacarlo de ahi. Su mirada no se encontró con la mia en ningun
29.| Bienvenida Emily Sainaaz.
Estaba cansada de todo el peso de las cosas a mi alrededor, estaba soportando cosas que yo jamás elegi soportar y eso era algo que estaba matandome.Y en ese momento pude darme cuenta que había algo que cambió en mi el día en que vi a mamá morir frente a mi. Estaba claro que yo ya no era la misma Emily de antes, y estaba claro que tampoco lo seria jamás.Todas las personas que amaba estaban lejos de mi vida, mamá habia muerto y los otros simplemente habian elegido el camino de la traición. Y aunque sabia que mantenerme lejos de esa vida era lo mejor para todos, no dejaba de doler tanto.Los días pasaban tan lentos que empezaban a parecer años, y aun así seguia negandome a salir de mi habitacion. Me negraba a ver a Sainaaz, me negaba a encontrarme cin el culpable de todo lo que estaba pasando en mi vida, la persona que había hecho que mi madre muriera. Y aunque ella en verdad lo mereciera me dolia que eso hubiera pasado. No queria salir de mi habitación porque sentia que en cuanto lo
30.| El equipo de la venganza.
Mis ojos se abrieron lentamente cuando un par de pinchazos aparecieron en mis mejillas. Parpadee un par de veces y me acostumbre a la luz que habia a mi alrededor. Una figura borrosa estaba justo frente a mi, solte un quejido e intente enfocar la mirada en otra cosa cuando volvió a darme unas palmadas en las mejillas para que reaccionara.—¿Cómo te sientes? —preguntaron en voz baja —¿Estás bien?No, no lo estaba. La cabeza me dolia, tenia la boca seca y mis musculos ardian. Puse una mueca de dolor cuando senti como una mano me rodeaba el brazo y me levantaba de un tiron.—¿Qué pasó?—solté mientras intentaba incorporarme.—Eres un vampiro Emily.Mis ojos se abrieron de golpe cuando todos los recuerdos se instalaron en mi cabeza como si volviera a vivirlos, recordaba a Sainaaz matandome y convirtiendome en lo que mi madre más odiaba. Me gire hacia él de golpe, sintiendo como mis dientes se apretaban con fuerza. —¿Cómo mierd...Me detuve en seco cuando mi nariz pecibió un olor bastan
31.| El plan de dos vampiros y un lobo
El viento frio golpeó mi rostro cuando el cuerpo sin vida cayó en justo frente a mis pies. Sonrei un poco y saboree el camino de sangre que habia por mis dientes y la comisura de mis labios. Todo eso era magnifico, saber el poder que tenia sobre todo lo que yo quisiera, saber que solo con que mis colmillos tocaran el cuello de cualquier humano y mi boca succionara su sangre seria suficiente para alimentarme y matarlos. Saber que era como un todopoderoso, porque tenia el poder de matar a quien yo quisiera a mi antojo sin ninguna resistencia.—Veo que te has estado divirtiendo ¿no?Mi sonrisa aumentó aún más cuando escuché su voz justo detrás de mi. Me encogí de hombros y me sente en el borde de una enorme roca, mirando aún el cuerpo de la pobre mujer que se habia cruzado conmigo. —La inmortalidad es larga Derrick, debo juguetear con algo. —¿Y matar personas es lo mejor que se te ocurrió?La carcajada que solté casi hizo eco por todo el bosque. Lo miré directamente a sus asquerosos oj