Valeria Peña MadrigalPuerto Vallarta, Jalisco, MéxicoEn la mañana me quería largar a dónde fuera para no tener que encontrarme con el infeliz de Dex, con lo de anoche que pasó entre él y Silvana me habían quedado claras demasiadas cosas y la más importante era que Dex es un hombre que goza de usar a las mujeres a su antojo, era sábado y no tenía escuela así que me salí a caminar por la playa yo sola.–Valeria, ¿Qué haces tan sola por la playa? – Me encontré con Alan – Déjame acompañarte, por favor. Me quedé pensando en ti después de anoche en el bar, eres una mujer hermosa, déjame verte.Ahora era mi oportunidad, iba a ir con todo, no me iba a detener, hasta lograr lo que me había propuesto conseguir con Alan, de hoy no pasaba que quedáramos en algo, era hoy o nunca, por eso la vida me estaba presentando esta gran oportunidad el día de hoy.–Hola, Alan. Qué gusto encontrarte por aquí, salí a caminar un rato por la playa y el mejor momento para hacerlo es temprano – Le sonreí encanta
Valeria Peña MadrigalPuerto Vallarta, Jalisco, MéxicoTeníamos que ir con toda la seriedad del caso, y si algo no me gustaba también se lo haría saber, los dos teníamos que quedar conformes.–Claro, Alan. Alan caminó un rato conmigo en la playa y después yo volví a mi departamento y no estaba Dex, eso era lo mejor. No quería verle la cara, no después del problema que tuvimos por culpa de la infeliz de Silvana. Me fui a trabajar al canal llegada mi hora y Luis, fue por mí para que fuera a arreglar un poco el vestuario del presentador, odiaba tener que estar cerca de Raymundo, pues nunca dejaba de acosarme.–Valeria, mi tío te necesita para lo del vestuario de Dex, me pidió que llevarás unas dos camisas diferentes – Luis me explicaba – Es que la que lleva puesta, no se ve bien en la cámara.¿Y qué hacía Dex en el lugar de Raymundo?, había escuchado que solo iba a ser por aquella vez que no se había presentado por estar enfermo y ahora resultaba que otra vez.– ¿Dex? Pensé que hoy, ya
Dex DeCostelloPuerto Vallarta, Jalisco, MéxicoTodo para mí había mejorado, había empezado en suplir a Raymundo en su programa y ahora yo era el conductor estrella, mi vida profesional estaba mejorando notablemente y esa semana, el viernes, se hizo mi nombramiento especial como el conductor oficial del programa. Todos me aplaudieron y me felicitaron, hasta quién pensé que no lo haría, Valeria.–Felicidades, Dex – Me abrazó – La verdad, eres mucho mejor conductor que Raymundo y me da gusto que te hayas quedado tú, de conductor oficial del programa.Me alegraba que ella me hubiera felicitado, era importante tener la aprobación de ella, pues eso indicaba que le interesaba, aunque estuviera enojada conmigo por cualquier alguna razón. –Gracias Valeria y que bueno que viniste un rato a la fiesta, aunque ya está por terminarse – Le sonreí – Pero, si quieres podemos comprar algo y podemos celebrar en el departamento, nosotros dos.Se me había ocurrido la idea, para que pidiéramos tener un ra
Dex DeCostelloPuerto Vallarta, Jalisco, MéxicoLa lección no me la iba a dar Eryx a mí, yo se la iba a dar a él, pues nunca había confiado en mi capacidad. –Charlie, antes de que te vayas, dile a Ava, por favor, que sintonicen mañana por internet a las 6 de la tarde el canal 49 de aquí de México y se llevarán una sorpresa, es de suma importancia para mí y para todos – Se iban a ir para atrás cuando me vieran de conductor – Saludos a Dom y a Ava.–De tu parte, Dex. Terminé mi llamada con Charlie y me di cuenta de como me estaba mirando Valeria, no sabía lo que pasaba por su mente, pero tampoco quería saberlo ahora. Tenía ganas, más bien de otra cosa, por lo que me fui acercando más a ella, hasta que la tuve a mi alcance a pocos milímetros de mis labios.–No sabía que huiste de casa, Dex ¿Cuál es tu historia? – Valeria quería saber más de mí – Dime, estoy ansiosa por saber.No le había contado a nadie cuál era mi situación, si me había llegado con Luis, solo los que sabían mi procede
Valeria Peña MadrigalPuerto Vallarta, Jalisco, MéxicoMe desperté al día siguiente con la luz del sol entrando por la ventana y cuando me quise levantar para ir al baño, me encontré con que no estaba en mi recámara, estaba en la de Dex y no era solo eso. Él y yo, estábamos completamente desnudos y enredados en las sábanas. –Valeria, sigue junto a mí – Dex medio adormilado me robó un intenso beso – Vamos a dormir, no tienes escuela hoy.Cuando escuché la voz de Dex, se me activaron todas las alarmas, porqué me estaba besando de esa forma y que le importaba a él si tenía o no clases, esto estaba mal, estaba muy mal. –Dex, ¿Pero que hicimos? – Pregunté descolocada – Estamos ambos desnudos y recuerdo que nos besamos en la sala y ahora, despierto aquí desnuda y a tú lado.–Hicimos lo que hacen un hombre y una mujer que se desean intensamente y ha sido maravilloso.Cuando Dex me dijo eso, me incorporé de prisa y me senté de la cama para darme cuenta de la peor manera que era verdad, Dex
Valeria Peña MadrigalPuerto Vallarta, Jalisco, MéxicoAhora estaba jurando hacer algo que estaba segura, no haría, él era un mujeriego, me había dado cuenta desde el momento que se había acostado con Silvana, nadie me lo había contado. Los hombres como podían ser tan cínicos.–Eres el colmo, Dex. No puedo creer que con ese discurso estúpido pienses que te vas a librar de la deuda que te ha caído encima anoche. Yo no necesito tu amor, necesito que me soluciones el problema.Dex me miró con desilusión y estaba al borde del llanto, como también yo lo estaba y mis lágrimas no se hicieron esperar, me dolía lo que pasó y todo lo que perdí por no medir mis acciones y por haberme entregado a Dex, pero más me dolía estarle negando mis sentimientos sabiendo que yo también lo amaba a él, que estaría dispuesta a todo, por hacer el amor así para siempre; pero despierta Valeria que de amor no se vive.–No soy el colmo y nunca me arrepentiré del amor que nos entregamos anoche, te amo, Valeria. Acep
Capítulo 29Dex DeCostelloPuerto Vallarta, Jalisco, MéxicoMe salí del departamento con mucho coraje y dolor en mi corazón, me dolía demasiado lo que había pasado con Valeria y más después de habernos hecho el amor de la forma maravillosa en la que lo habíamos hecho. Me fui a caminar a la playa solo con mi teléfono y le llamé a la única persona que me iba a saber aconsejar, mi querida madre, que desde que yo me fui yo creo que se la pasaba con el teléfono en mano, siempre que la llamaba contestaba rápidamente.–Dex, mi amor que bueno que me llamas hijo – Escuchar a mamá, me tranquilizó – Ya me dijo Charlie, que ayer andabas haciendo de las tuyas y que veamos un canal en el que sales.Si eso fuera cierto, ahora no me encontraría tan triste, ayer no estuve haciendo de las mías, estaba con la mujer de la que he enamorado a primera vista, creo que me ha pasado como le pasó a mi padre con mamá, yo vi a Valeria en ese centro comercial y supe que ella sería la mujer de mi vida. –Hola Ava,
Dex DeCostelloPuerto Vallarta, Jalisco, MéxicoEsto era distinto a todo lo que yo había vivido antes, no tenía punto de comparación, que sabía es mi madre al decirme que lo más bonito de hacer el amor, es hacerlo enamorado de alguien, ese sentimiento era tan diferente, no se podía definir con palabras, solo se tenía que vivir en el momento y te dabas cuenta de que era el indicado o la indicada.–Dex, tenemos que levantarnos para comer algo y después tenemos que ir a trabajar – Ella me recordó – No puedes faltar a tu primer día después de tu nombramiento, eso no sería bueno.–No, para nada lo sería y gracias por despertarme, Valeria – La aprisioné en mis brazos y volvimos a besarnos – Me encantas, estás preciosa. Tenemos que darnos una oportunidad.No iba a quitar el dedo del renglón, ella me tenía que aceptar como su novio, ya habíamos dado un primer paso, aunque lo hubiéramos hecho mal, pues era tiempo de encaminarnos hacia una relación más formal, ya nos conocíamos en la cama y eso