Tiempo después estábamos sentados todos mientras el rey daba su aburrido discurso. lass estaba detrás de mí no habíamos hablado absolutamente nada, la misma chica que me había escoltado a mi familia era la hija del rey, quien lo diría, pero al parecer las mujeres en esta manada no tienen tanta importancia como en mi manada me parece que están en lo correcto, pero mis ojos se fijaron en el hijo de Aragón, Amadeo, pues su mirada estaba fija en lass mordí mi labio inferior

~Otro más vael~

~¿Crees que puedo matar a este y hacer como que nada paso como con los otros?~

~Todo va a depender de ti siempre, algo me dice que te dará agua a beber.~

Me alejo del grupo antes de que lass pudiera verme, busqué un trago fuerte y empecé a merodear el lugar observando cada detalle de este reino. La seguridad se dejaban ver bastante organizados, pero todo reino tiene una pequeña falla.

Las mujeres me miraban y sonreían; había muchas vestidas como de la nobleza en los tiempos antiguos, algo que causaba u