Sabía que las palabras de Andy eran reales, pero su hermano gemelo no era así. Alén era diferente, él más cruel que su hermano, siempre se ha creído más superior que todos. —Andy, no eres más que un inútil. Le serás un estorbo a la nueva matriarca, ella necesita a alguien feroz, no alguien tan blandengue como tú. —Alén, mejor cállate. Puedes ser el mayor de los dos, pero es muy obvio quien es más inteligente entre nosotros. Sonrío disimuladamente al ver que Andy no se ha quedado atrás con su hermano. Observo a ambos hermanos discutir, los dos eran de cabello castaño, su piel blanca, pero no tanto como la mía, diría que es como el color canela, pero un poco más claro. Quién los viera, pensarían que sufren de algo por verse tan amarillos y bronceados al mismo tiempo. Ambos medían un metro con ochenta y sus ojos eran azules. La única manera de diferenciarlos era cuando Alén se pintaba su cabello de diferentes colores, parecía un
—Bueno, con tal de que te posiciones en lo alto, sería un precio a pagar. Puedes divertirte con otro hombre si lo deseas, pero solamente puedes hacerlo si eres discreta y una vez que te cases debes ser leal y fiel a esa persona. Me revolcaré en mi tumba si mi nieta juega con dos o más hombres a la vez.—No soy esa clase de persona, lo sabes.—Ya lo sé, no eres como una de tus primas. Que mujer tan sinvergüenza.—Cálmate, abuela, se te subirá la presión si te enojas así.—Todo lo que me pertenece es ahora tuyo, el resto de mis hijos y nietos tendrán una pequeña porción. El veinte por ciento de mi fortuna será distribuida entre ellos y el ochenta por ciento es tuyo. Me he encargado de que él sesenta por ciento de la compañía sea tuya. Los demás accionistas tienen migajas, así que no tienes que preocuparte mucho. La última palabra la tendrás tú, pero debes ganarte a más de uno para obtener más porcentaje, ¿Me entiendes?—Perfectamente.—Bien. Nadie debe saber eso, todo el mundo cree que
La ira me consume, no podía creer que todos ellos fueran tan descarados para interrumpir el descanso de la abuela Olivia.Doy un paso al frente y coloco mi mano sobre el hombro izquierdo de Andy para susurrarle al oído luego de ver a mi madre a sus ojos. Esta niega disimuladamente con la cabeza y pude entender lo que quiso decir. La abuela Olivia odiaba estos encuentros de guerra entre nosotros, me odiaría si dejaba que siguieran con esto. Le dedicó una sutil sonrisa para que estuviera tranquila.—Andy, despídete de la abuela.—¿Qué?Él me mira aturdido y luego mira a la abuela que estaba acostada en la cama con su piel blanca como la nieve.—¿Amelia, estás segura?Todos nos miran confundidos mientras yo lo miro a él directamente a los ojos sin importarme los demás.—Ve y despídete.Esa frase hace que mi abuela se gire bruscamente a ver su madre quien yacía tira en esa cama dando sus últimos respiros.Andy se acerca con cierto temor y se sienta a su lado para susurrarle al oído. Veo c
—Callum POV—Al volver a casa no pude dejar de pensar en esa mujer. Ella sin duda alguna es una mujer poco usual, nada que ver con las mujeres que he tenido y eso causaba que mi atención cayera en ella.Durante toda la noche no pude dormir por pensar ella y en ese ridículo ritual que debía hacer al día siguiente. El mundo entero cree que el poder de la familia O'Brien ya estaba bajo mi poder, pero lo cierto es que hasta no hacer ese ritual no será así. Debo enseñarles a todos los descendientes de los O'Brien que soy el indicado para liderar esta familia y la empresa.Ya eran las siete de la mañana cuando decidí levantarme de la cama para arreglarme y asistir al ritual.Me estaba acomodando la corbata cuando escuché que tocaron la puerta de mi habitación.—Adelanté.—Buenos días, señor. El auto ya está listo.—Bien, nos iremos después de desayunar.—Sí. Haré que le sirvan el desayuno.—Bien.Sebastián se retira de nuevo para hacer lo que ha dicho mientras yo termino de arreglarme. Una
Me quedo viéndolo a los ojos, porque no sabía qué decir. Supuse que el abuelo diría algunas palabras como lo hizo Olivia O'Connor con su nieta Amelia. Frunzo el ceño al ver que él no me dijo nada de esto, suspiro y decido ser directo.—Juro llevar a nuestra familia a la cima más de la que ya está. Juro encontrar una esposa digna para trabajar conmigo a mi lado y dar sucesores más poderosos que yo con ella cuando sea el momento, al igual que juro no enamorarme de una mujer débil, sino de alguien fuerte. Juro destruir a todo aquel que esté en mi contra y desee mi caída, protegeré a todos los que sean leales a mí, pero no tendré piedad con quien desee mi derrota.Veo como mi abuelo se muerde la lengua cuando le dejé en claro que seré yo quien decida quien será mi futura esposa y madre de mis hijos, pues él quería que le diera ya mismo bisnietos y que me case de inmediato, cosa que no pasará a menos de que sea ella.—Extiende tu mano.Hago lo que dice y extiendo mi mano izquierda, él toma
Al llegar a la oficina me ocupo de algunas cosas antes de almorzar. Durante la tarde asisto a unas reuniones de emergencia con mi equipo y así me la paso todo el día hasta que Sebastián se acerca para susurrarme algo al oído.—Señor, malas noticias.Miro a Sebastián y parecía inquieto, por eso decido ordenar que nos dejarán a solas.—Todo el mundo, esperen afuera hasta nuevo aviso.Todos se levantan de sus asientos y salen, cuando sale la última persona, lo miro para ver qué están urgente como para haberme interrumpido cuando sabe que lo odio.—Habla.—Acaban de anunciar que la señora Olivia O'Connor, ha fallecido, será enterrada el día de mañana a las once.—¿Estás seguro de eso?—Sí señor. La noticia fue publicada desde la página web oficial de O'Connor Entertairment Group.—Ya veo..., cancela mi agenda de mañana, iremos al funeral.—¿Está seguro, señor?—Sí. Ahora el poder de los O'Brien me pertenece, no necesito la aprobación de nadie. Además, le tengo respeto a la gran anciana. F
—Amelia POV—Había regresado a mi habitación tras esa absurda discusión con los integrantes de mi familia. Apenas crucé la puerta, la cerré detrás de mí y apoyé mi espalda en ella para dejarme caer en el suelo. Abracé mis rodillas y me permití llorar en silencio. No sé cuánto tiempo me quedé así, pero cuando me he calmado, volví a caer en el suelo tras intentar levantarme.Apenas consigo levantarme y sostenerme de pie sin problema, comienzo a quitarme la ropa y me meto en la cama.Al día siguiente, apenas abrí los ojos, recordé a la abuela Olivia y aquellos momentos de cuando era tan solo una niña. Cada uno de los recuerdos vienen a mi mente y saber que ya se ha ido me pone triste. Me quedo mirando al techo sin ninguna emoción hasta que ya era hora de levantarme y comenzar a arreglar para ordenar todo lo que es el funeral de despedida.Me pongo el vestido de encaje reservado para conmemorar este momento amargo. Salgo de la habitación y todo el mundo estaba reunido en el comedor. Mi ma
Me quedo mirándola a los ojos y cuando estaba por contestar, la abuela Lina, Alén y el tío abuelo Jack entran interrumpiéndonos.—Nosotros también queremos saber de qué sufría Olivia O’Connor. No deberías ocultarnos un secreto como este a la familia. Amelia, te aconsejo decirles la verdad a todos y no solamente a tu madre.—Amelia, la tía abuela, tiene razón. No es bueno que nos ocultes algo como esto a todos, si lo haces serás tachada como egoísta ante todos.—Tu tía abuela y Alén tienen razón.Me quedo viéndolos y me siento enfurecida al ver que nos han interrumpido y nos han estado escuchando.—Muy bien, se los diré. Vayamos afuera, lo diré frente a todos.—Bien, es lo mejor. Vamos todos, Lina y Alén, reunamos a todos.Ellos son los primeros en salir, veo a mi madre y le digo que todo está bien. Vamos tras ellos y esperamos a que todos se reúnan en la sala para darles la noticia, ya no hay caso esconder la verdad. Todos entran en la sala, algunos toman asiento y otros se quedan de