Los demás ejecutivos de la empresa siguen en la mesa platicando y compartiendo un rato juntos cuando la ejecutiva que se la pasa molestando a Freya ahora empieza a molestar a Edda, sabe el interés que tiene por Olaf, y sabe cómo usar esa información en su beneficio.

— Ya es muy tarde, no creo que el señor Olaf venga y nos acompañe en este día — lo dice porque sabe que Edda lo está esperando para pasar un rato con él fuera de la oficina y en cuanto se distrae un rato jugando con Axel, la ejecutiva se lo recuerda.

— Puede que le haya pasado algo, deberíamos llamar y asegurarnos de que está bien — dice otro de los ejecutivos que de verdad está preocupado por su jefe.

— Tienes razón, lo voy a llamar solo para asegurarnos de que no necesite algo — dice Edda es raro que no esté ahí con ellos en el club de equitación y que no sepan nada de él.

Olaf está en su departamento, no quiere hablar con nadie, así que cuando suena el teléfono y sabe que es Edda quien llama, decide no contestar, ha