¡Hola, hola! Ay.... Pobre Justin. No se crean que nuestro robótico protagonista, no tiene su corazoncito. Está aturdido de tantas cosas y la presión. ¿Qué piensan al respecto? No olviden dejarme sus comentarios. Siempre les responderé <3 Un abrazo.
◢ Sunmi ◤Al salir de la estación de metro, el agitado murmullo de Nueva York me recibió con un intenso y frío viento que se arremolinaba entre los altos edificios. Los rayos del sol apenas tocaban las calles de la ciudad y las hojas secas se esparcían en la acera, anticipando con ello que el invierno no tardaría mucho en llegar.Caminé apresuradamente hacia la cafetería, ya que por algún motivo que desconozco, la aplicación se cerró inesperadamente cuando intenté realizar la orden mientras estaba en el metro. Por lo tanto, como cualquier persona que compra al paso, tendría que esperar mi turno para hacer el pedido. Por suerte había salido más temprano de mi apartamento, como la semana pasada fue tan movida con la ausencia de Justin, que quedaron algunas cosas pendientes y cuanto antes comenzara con el trabajo, mucho mejor.Al entrar en la pequeña cafetería, el aroma embriagador del café recién hecho me envolvió. La esencia acogedora del lugar contrastaba con el frío exterior, y como
◢ Sunmi ◤Dos semanas habían pasado desde aquel desayuno inusual con Justin, y aunque para mi sorpresa lo había vuelto a encontrar en la cafetería, nuestras coincidencias ya no tenían el mismo encanto que aquella primera vez. Tampoco hubo más invitaciones para que desayunáramos juntos y revisáramos su agenda, y la mayoría de las veces, recibía un mensaje de su parte, donde me decía que no me preocupara por su café.En paralelo, mi vida social experimentaba un renovado entusiasmo. Madison, mi mejor amiga y confidente, había vuelto a arrastrarme a las salidas nocturnas con su grupo de amigas. Las risas y la música en los clubes nocturnos se volvieron un bálsamo necesario para alejar mis pensamientos de los asuntos laborales y, sobre todo, de la imagen del hombre del que residía en mi mente y corazón.También había estado en contacto con Joshua, el guapo chico que conocí en la discoteca, y a pesar de que me sorprendió la primera vez que me escribió, nuestros mensajes se habían vuelto muc
◢ Justin ◤La ciudad se extendía ante mí en cada paso que daba. Un entramado de luces y sombras reflejaban la complejidad de mi vida en ese momento, y que el frío de la mañana era incapaz de calmar. Salí de mi apartamento con la mente saturada de pensamientos, la tensión acumulada pesando sobre mis hombros como una carga invisible, y la amenaza del inesperado encuentro con Dorian Bridges en el juzgado el día anterior, recordándome la conversación de hace unos días con mi tío, retumbaban en mi cabeza. Sus palabras como martillazos que golpeaban mi tranquilidad, dejaban en segundo plano la música que se reproducía a través de los audífonos.Corrí hacia la Quinta Avenida buscando un respiro, una pausa en medio del caos que se avecinaba. A lo lejos, Central Park ofrecía un refugio, y decidí encaminarme hacia él. Las luces tenues y los árboles desnudos creaban una atmósfera melancólica, acorde con mi estado de ánimo.La charla con mi tío no había sido solo un recordatorio de las responsabi
◢ Justin ◤El ambiente tenso se cortó con la llegada del mediodía. Me despedí de mi asistente quien me informó que al salir, el taxi que pidió me esperaba aparcado fuera del edificio. Me subí al vehículo y le di el nombre del restaurant donde me juntaría con Max, mientras ordenaba mis pensamientos.El sonido de los cubiertos chocando contra los platos y el murmullo de los comensales resonaba en el elegante restaurante mientras esperaba la llegada de mi mejor amigo. La atmósfera estaba saturada de un aire distinto, uno que denotaba mi inusual decisión de explorar la posibilidad de encontrar a alguien con quien compartir mi vida. Había tomado la determinación de intentarlo una última vez con las citas, siguiendo un impulso musitado por la presión que se cernía sobre mí.—¡Justin! —La espléndida sonrisa que me dedicó Max, contrastaba con el cariz de lo que se ha convertido mi vida estas últimas semanas, aunque no dudé en corresponder a su saludo, intentando contagiarme de su buen humor.
◢ Sunmi ◤El despertador sonó temprano, marcando el inicio de un día que se vislumbraba agitado. Anoche, Madison me había convencido, casi a la fuerza, de elegir un atuendo que resaltaría mejor mis atributos naturales para la cita con Joshua. Mientras compartíamos una pizza, ella insistía en que era la oportunidad perfecta para dejar una buena impresión, aunque según ella, tenía el cincuenta por ciento de “la tarea realizada” al tener a Joshua interesado en mí.Luego de darme una agradable ducha y hacer mi rutina de Skin care habitual, me sequé el cabello y me dirigí hacia el armario donde había dejado la ropa que seleccionamos anoche. Normalmente no me preocupaba demasiado por mi apariencia, pero mi mejor amiga tiene una manera de persuadir que es difícil de resistir.Me puse las medias color piel con forro polar, una falda plisada hasta por debajo de las rodillas en color chocolate con finas líneas beige, y un suéter marrón claro, al que Maddy le hizo unos ajustes para que quedara c
◢ Sunmi ◤Salí del elevador, encontrándome con el nombre de Turner Legal Group recibiéndome como cada día. Saludé a Charlie y Regina, quienes con sus resplandecientes sonrisas, se encontraban en sus puestos en la gran recepción en la entrada del bufete. Con paso decidido, caminé por el largo pasillo hacia mi puesto de trabajo, deseándole los buenos días a los compañeros con quienes me cruzaba en el camino.Por alguna razón, me sentía distinta. Había despertado con la sensación de que, tras la cita de ayer, las cosas en mi vida podrían ser diferentes. Decidí ser valiente y considerar la posibilidad de abrir mi corazón a nuevas experiencias, quizás darle una oportunidad a Joshua o a cualquier otro chico, dejando a un lado el amor oculto por mi jefe y en gran medida, retomar las riendas de mi vida fuera del bufete. Con ese pensamiento inicié mi jornada, revisando la agenda para luego adentrarme en los correos y categorizarlos por prioridad y urgencia.Estaba concentrada en la pantalla de
◢ Justin ◤El almuerzo con Max el día anterior me dejó con una sensación extraña, una mezcla entre determinación y reticencia. La idea de involucrar a Sunmi en mi vida personal generaba incertidumbre y, aunque no necesitaba que alguien que me respetara pusiera en tela de juicio mis decisiones, las circunstancias me obligaban a tomar medidas drásticas si quería tener el control del bufete.A pesar de haber tenido algunas horas de sueño, la tensión persistía. Nunca me había gustado mezclar mi vida profesional con la personal, y el revoltijo de emociones me llevó a cuestionar si era apropiado contar con la ayuda de mi asistente. Por la mañana, estuve a punto de mencionarle lo que me ocurría, pero me retracté justo a tiempo para evaluar bien los pro y los contras de la situación.Al pasar las horas, me encontré distraído observando a Sunmi durante el día, preguntándome si pedirle ayuda era la decisión correcta. Nuestras miradas se cruzaron un par de veces, poniéndome más tenso a medida qu
◢ Justin ◤La cena con Max y Sunmi había dejado una extraña tensión en el aire, como si estuviera a punto de enfrentar un desafío inminente. Regresé a casa con la mente llena de pensamientos, sintiendo el peso de lo que se avecinaba. Después de todo, la búsqueda de una esposa no era algo que uno planeara todos los días.Esa noche, me sumergí en una reflexión profunda. La idea de tener a Sunmi a cargo de la búsqueda me desconcertaba. No era solo el hecho de que estaba a punto de aventurarme en el desconocido territorio de las reales citas a ciegas, sino también el cambio de dinámica con mi asistente.Recordaba la incomodidad que sentí cuando Max, con su habitual franqueza y relajo, me preguntó por mis preferencias físicas en una mujer. Sunmi, imperturbable, registraba cada palabra en su tableta, como si estuviera tomando notas en una reunión de negocios. Mi respuesta, aunque un poco concisa, fue la apropiada, pues no tenía preferencias superficiales; mi interés estaba en algo más profu