¡Hola, hola! Pobre Justin. Más presión sobre sus hombros. ¿Qué les han parecido los dos capítulos? No se olviden de dejarme sus comentarios! Les mando un abrazo <3
◢ Sunmi ◤La cena con Madison el viernes por la noche, le había abierto una ventana en mi ocupado mundo. No me sorprendió su visita en K-Market el sábado por la tarde mientras estaba con mis tíos y les ayudaba con el negocio.—Bienvenida, señorita Madison. —El saludo cordial de mi tía, me hizo voltear, al ver a mi mejor amiga con una amplia sonrisa en el rostro.—Buenas tardes, señora Park. —Madison se metió por debajo del mesón y le dio un gran abrazo a mi tía haciéndola reír a carcajadas, consiguiendo con ello que mi tío asomara la cabeza desde la bodega—. ¡Hola, señor Park! —exclamó mi amiga, moviendo su mano en señal de saludo.—Hola, Maddy. —Saludé a mi amiga, que no se hizo esperar y me abrazó—. ¿Qué te trae por aquí?—Vine a raptarte —dijo divertida.—¿A raptarme?—¡Sí! Vamos a bailar esta noche y no acepto una negativa tuya —aseveró—. Ya está bueno que salgas un poco y te distraigas, ¿verdad que sí, señora Park? —le preguntó a mi tía, quien asintió amablemente, mientras atend
◢ Sunmi ◤ Nos juntamos con las amigas de Madison fuera de la discoteca, pues el hermano de Nathalie, una de sus amigas, era uno de los guardias de turno y nos dejaría entrar sin tener que permanecer tanto tiempo en la larga fila de espera, así que, tras las presentaciones nos acercamos a la puerta de acceso para poder ingresar. Desde la entrada, la discoteca envuelve mis sentidos en una mezcla vibrante de luces y sonidos. Las luces parpadean en tonos intensos de azul, rojo y verde, creando un ambiente eléctrico y dinámico. El ritmo penetrante de la música resuena a través de la pista de baile, haciendo que el aire vibre con energía palpable. Las risas y conversaciones animadas fluyen entre las personas que se mueven al ritmo de la música, creando una sinfonía de sonidos festivos. El aroma a mezclas de perfumes, sudor y el sutil rastro de humo de las máquinas de niebla llenan el espacio, añadiendo una capa adicional a la experiencia sensorial. El ambiente está cargado de anticipaci
◢ Justin ◤Nueva York brillaba aún sumida en la quietud de la madrugada. Un mar de luces titilantes parecían ofrecer respuestas a las preguntas que atormentaban mi mente. La ciudad y el edificio en el que se alzaba Turner Legal Group estaba envuelto en una penumbra silenciosa, y en el interior de mi despacho el resplandor de la metrópoli se filtraba por las ventanas. La falta de sueño se reflejaba en mis ojos cansados, pero la urgencia de enfrentar mis dilemas personales no me permitió dormir y descansar, por lo que me vestí y en menos de lo que tardaría un lunes en hora punta, estuve en mi oficina.Cerré los ojos un instante, buscando claridad en medio de la confusión que habitaba en mi interior. Mis pensamientos eran una tormenta de indecisiones, cada opción que se presentaba ante mí era como un destello fugaz, difícil de alcanzar y aún más complicado de retener.Regresar a la ciudad donde crecí después de mis años en Londres había sido un movimiento calculado, una decisión estraté
◢ Justin ◤Al volver a la oficina, la tranquilidad que encontré durante la mañana se esfumó, dándole paso al ajetreo normal del bufete. Los ventanales dejaban que la luz natural inundara mi despacho mientras me enfrentaba a la encrucijada que se cernía sobre mi vida, volviendo a mí, las preocupaciones que me trajeron tan temprano al trabajo. La decisión sobre el futuro control del Turner Legal Group se convertía en un peso tangible sobre mis hombros, y las palabras de mi tío resonaban como un eco persistente en mi mente.«¿Aceptar las reglas del juego, encontrar una esposa adecuada y asegurar la dirección del bufete, o resistirme y arriesgarme a perder el control que tanto anhelaba?», eran las preguntas que no dejaban de rondar en mi cabeza.La mañana transcurrió rápidamente y la intervención de Eric en mi despacho me ayudó a calmar el agobio que por minutos amenazaba con desbordarme. Los resultados y los informes entregados con la resolución de un par de casos, fueron la guinda de la
◢ Sunmi ◤Al salir de la estación de metro, el agitado murmullo de Nueva York me recibió con un intenso y frío viento que se arremolinaba entre los altos edificios. Los rayos del sol apenas tocaban las calles de la ciudad y las hojas secas se esparcían en la acera, anticipando con ello que el invierno no tardaría mucho en llegar.Caminé apresuradamente hacia la cafetería, ya que por algún motivo que desconozco, la aplicación se cerró inesperadamente cuando intenté realizar la orden mientras estaba en el metro. Por lo tanto, como cualquier persona que compra al paso, tendría que esperar mi turno para hacer el pedido. Por suerte había salido más temprano de mi apartamento, como la semana pasada fue tan movida con la ausencia de Justin, que quedaron algunas cosas pendientes y cuanto antes comenzara con el trabajo, mucho mejor.Al entrar en la pequeña cafetería, el aroma embriagador del café recién hecho me envolvió. La esencia acogedora del lugar contrastaba con el frío exterior, y como
◢ Sunmi ◤Dos semanas habían pasado desde aquel desayuno inusual con Justin, y aunque para mi sorpresa lo había vuelto a encontrar en la cafetería, nuestras coincidencias ya no tenían el mismo encanto que aquella primera vez. Tampoco hubo más invitaciones para que desayunáramos juntos y revisáramos su agenda, y la mayoría de las veces, recibía un mensaje de su parte, donde me decía que no me preocupara por su café.En paralelo, mi vida social experimentaba un renovado entusiasmo. Madison, mi mejor amiga y confidente, había vuelto a arrastrarme a las salidas nocturnas con su grupo de amigas. Las risas y la música en los clubes nocturnos se volvieron un bálsamo necesario para alejar mis pensamientos de los asuntos laborales y, sobre todo, de la imagen del hombre del que residía en mi mente y corazón.También había estado en contacto con Joshua, el guapo chico que conocí en la discoteca, y a pesar de que me sorprendió la primera vez que me escribió, nuestros mensajes se habían vuelto muc
◢ Justin ◤La ciudad se extendía ante mí en cada paso que daba. Un entramado de luces y sombras reflejaban la complejidad de mi vida en ese momento, y que el frío de la mañana era incapaz de calmar. Salí de mi apartamento con la mente saturada de pensamientos, la tensión acumulada pesando sobre mis hombros como una carga invisible, y la amenaza del inesperado encuentro con Dorian Bridges en el juzgado el día anterior, recordándome la conversación de hace unos días con mi tío, retumbaban en mi cabeza. Sus palabras como martillazos que golpeaban mi tranquilidad, dejaban en segundo plano la música que se reproducía a través de los audífonos.Corrí hacia la Quinta Avenida buscando un respiro, una pausa en medio del caos que se avecinaba. A lo lejos, Central Park ofrecía un refugio, y decidí encaminarme hacia él. Las luces tenues y los árboles desnudos creaban una atmósfera melancólica, acorde con mi estado de ánimo.La charla con mi tío no había sido solo un recordatorio de las responsabi
◢ Justin ◤El ambiente tenso se cortó con la llegada del mediodía. Me despedí de mi asistente quien me informó que al salir, el taxi que pidió me esperaba aparcado fuera del edificio. Me subí al vehículo y le di el nombre del restaurant donde me juntaría con Max, mientras ordenaba mis pensamientos.El sonido de los cubiertos chocando contra los platos y el murmullo de los comensales resonaba en el elegante restaurante mientras esperaba la llegada de mi mejor amigo. La atmósfera estaba saturada de un aire distinto, uno que denotaba mi inusual decisión de explorar la posibilidad de encontrar a alguien con quien compartir mi vida. Había tomado la determinación de intentarlo una última vez con las citas, siguiendo un impulso musitado por la presión que se cernía sobre mí.—¡Justin! —La espléndida sonrisa que me dedicó Max, contrastaba con el cariz de lo que se ha convertido mi vida estas últimas semanas, aunque no dudé en corresponder a su saludo, intentando contagiarme de su buen humor.