POV Narrador:
La vida por si sola es complicada, pero, al ser humano le gusta poner más obstáculos. Ya que entre más complicado sea el camino, más gratificante es cuando recibes los resultados.
Y era algo muy verídico, pues entre más se le habían enredado las cosas a Enzo de manera natural, él se esmeraba en agregar más obstáculos. En definitiva, tenía que estar muy loco para sentirse bien con todo, más, por más que analizara que debía sentirse estresado, no era lo que conseguía.
Dos días habían pasado desde su cita con Irene, y uno, posterior, a buscar el auto de esta al concesionario. Y, aun así, la alegría que sentía no di
POV IRENE: La paciencia no es una de mis virtudes más fuertes, por lo que, poco a poco, esta me abandonaba a medida que esperaba la respuesta de Enzo. Si bien, esta era una locura en la que me había metido yo solita, algo dentro de mi mente chillaba que todo este show estaba avanzando demasiado rápido. Pero, de alguna forma, ese era el punto ¿No?, ya para este punto ni yo misma entendía muy bien que estaba sucediendo. Un suspiro salió de mis labios, cuando sentí el vibrar de mi teléfono, anunciando la llegada de un nuevo mensaje. Rodando los ojos al ver cómo Marie el día anterior en la tarde había hecho de las suyas en mi teléfono, aunque en el fondo me dio gracia el apodo que le puso como nombre de contacto. Agradeciendo que él no lo pudiera ver. [El Ceo Acosador: Hola, Irene, dios, perdóname por eso, mi madre está haciendo de las suyas. Lo cierto es que bueno, de alguna forma eso me ayuda con mi plan y entra dentro del contrato. Igual lo siento. Mi prima te va a llamar para
POV NARRADOR: Cuando los primeros rayos del sol, llegaron hasta los ojos de Marie, la primera punzada de un fuerte dolor de cabeza; inclementemente la recorrió. Entonces hasta ese momento llegaron sus intenciones de dormir, cosa que sinceramente se lamentó, ya que estaba muy cómoda. Pocos segundos después fue que tomo conciencia que no se trataba solo de su cabeza, el cuerpo entero le dolía como el infierno mismo, al estirarse para quitarse las sabanas de encima fue el momento en el que noto su clara falta de ropa; abriendo los ojos con terror se sentó en la cama, encontrándose que estaba completamente sola. Recuerdos salteados de la noche anterior se hicieron presentes en su mente, logrando que en su rostro se mostrara la irritación que estaba sintiendo, lista para quejarse, se dio cuenta de que, a por ella, aguardaba una nota en la cómoda. Usando la sabana para cubrir su cuerpo, independientemente de que se hallaba sola; se levantó caminando hasta la cómoda para así tomar la n
POV NARRADOR: Esto sucede el día jueves, con Clarisa Navarro. Si bien inicialmente para Clarisa fue una grata sorpresa el saber que finalmente su hijo se había abierto para tener una cita que no fuera porque ella lo estaba obligando. Su alegría poco duro Sentada en su cama, solo podía mirar frente a ella, los documentos que tenía de Irene Páez. El mundo era muy pequeño, sin embargo, fuera o no una casualidad; ella no permitirá que la hija de Roberto Páez se mezclara con su único hijo. Cada vez que pensaba en ese hombre, nuevamente era dominada por la ira; si bien aquello había pasado, años atrás y los patrones no tenían por qué repetirse; Clarisa se negaba a que la relación entre Enzo e Irene continuará. Por lo que comenzaría a moverse para alejarlos cada vez más y también se encargaría de sacar al otro hijo de Roberto de la empresa. Ignorando que capaz su “ira” no era más que un berrinche por no haber obtenido lo que queria en su momento. ~…~ El invitar a Irene a la cena co
~Pov Irene~ En el momento en el que tome la decisión de ir hasta donde Enzo, apenas ocurrió el incidente del auto. Debo aceptar que fue, en su totalidad, una decisión tomada con la cabeza caliente; pero, era algo que sentía que debía hacer, poner los puntos sobre las “íes” en frente de estas situaciones. Aunque quizás también era un deseo inconsciente de escapar de mi casa mientras pasaba la vergüenza que sentía por lo sucedido; no era para menos, más, después de que mi madre se desmayara por la impresión. Pese, a que algo dentro de mí, me decía que era mi mente diciendo que su desmayo no era solo por la impresión de la escena novelesca que se había formado en nuestra puerta. Y en una primera instancia, al parecer había sido un acierto. ~…~ Cuando Enzo me dejo en la puerta, no espere que se fuera para entrar, como solía hacerlo; con pasos rápidos ingrese a la casa siendo recibida por Nico; quien al parecer esperaba mi retorno. Él apenas había llegado con Marie que apenas
~Pov Narrador~ Después de haber dejado a Irene en su casa, la resolución de Enzo de ir directamente a casa, disminuyo considerablemente y es que en el pecho del empresario bailaban dos emociones, luchando por dominar y como quisiera verlo, aquello no era bueno; la ira y la vergüenza juntas nunca daban buenos resultados.Razón por la cual pese a sus deseos más profundos, que eran ir hasta su madre a reclamarle lo que había hecho; condujo hasta un mirador y se quedó allí reflexionando hasta que la irá se hubiese calmado en su interior. Casi a las doce y media de la noche; detalle que genuinamente le sorprendió, su mente le había convencido de que había pasado más tiempo, pero no, realmente tenía como mucho una hora en el mirador; así fue que encendió nuevamente el motor para volver a su casa; sin embargo, a mitad del camino recibió una llamada de un número desconocido, al atenderle con el manos libres, barriendo todo lo que había en su mente; se encontró con la voz de la mujer que men
~ POV NARRADOR~ El lunes por la mañana, Marie se encontraba, sentada en su vanity, terminando de maquillarse para ir a trabajar. El fin de semana había pasado de manera rápida, pero de manera agresiva por su vida; haciendo que la llegada del lunes fuera más pesada que de costumbre. Si alguien, hubiera sido tan amable del viernes en la noche avisarle, que necesitaría un milagro para sobrevivir a todo lo que le vendría en las últimas 48 horas; definitivamente, el mismo viernes se hubiera preparado para medianamente llevar todo un poco mejor. Y, la verdad, es que en el momento que recibió la llamada de Irene pidiéndole pasar la noche en su departamento; pensó que sería como las veces anteriores, nada la prepara a ella o a cualquiera de los Páez, para que Esperanza, la madre de su mejor amiga, saliera de su cuarto, en el momento que llego a recoger a Irene. Simplemente, para soltar una bomba como lo había hecho. [Inicio Flashback]Marie, después de haber recibido la llamada de su a
~ POV NARRADOR~ — Realmente no sé qué está sucediendo con tu madre Nicolás, ¿has logrado comunicarte con tu hermana? — Enuncio con palpable preocupación Roberto Páez, a su hijo mayor. Sentados en un café, a una cuadra de la tienda de antigüedades que le pertenecía a la familia Páez; se encontraban Nicolás y Roberto, el día lunes, por la mañana. Padre e hijo se encontraban en el mismo estado de frustración, después de que Irene saliera de la casa, el ambiente se había vuelto completamente lúgubre, que termino de hundirse cuando el sábado en la mañana Nicolás también salió de la casa con una maleta. Roberto, por más que había intentado dialogar con su esposa, no había conseguido que cambiara de opinión o que le contara el porqué había tomado esa decisión de manera tan abrupta. — No con ella, pero si converse con Marie el sábado. — Informo Nicolás tomando un poco de su café. — Según me dijo la Barbie abogada, estuvo viendo películas históricas toda la noche del viernes, cuando conve
~POV IRENE~Sentía el pecho pesado, el fin de semana había superado lo que yo denominaba “Locura”. En este momento me sentía sin ningún tipo de piso estable, en el cual permanecer, y, si bien mi madre había hablado conmigo de sus deseos; no pude evitar sentir que era una puñalada que me hubiera técnicamente echado de casa de esa manera. Desde ese momento mi mente estaba en un limbo del cual, solo salía, para trabajar, que al parecer era lo único que no había cambiado. Y, a pesar, de que queria con todo mi corazón, pensar que no había mal, que por bien no viniera; realmente de solo hacerlo me sentía aún más abrumada. Logrando así que mi lunes, fuera aún más pesado de lo habitual, pero, finalmente, estaba en mi hogar de paso, es decir, casa de Marie. Si bien sabia que mi mejor amiga no tenía problema con que me quedara con ella el tiempo que necesitaba, toda esa situación, solo me causaba más estrés del que debería. Una parte de mi queria acudir a Enzo en busca de su ayuda, cosa que