Easen en cuanto arrancó el auto y avanzaron unos metros no pudo aguantarse ni mordiéndose la lengua, por lo que preguntó fijándose de reojo en las reacciones de su esposa sin apartar completamente la vista de la carretera extendiéndose frente a ellos. Algo muy irresponsable a decir verdad.—¿S-son-...?—carraspeó al darse cuenta de que su voz le iba a fallar como puberto—. ¿Son míos? Quiero decir, ¿Son mis hijos?—Hijas—corrigió y chilló tirando la cabeza hacia atrás, llevándose consigo un pedazo de cuero del asiento, los cólicos iban en aumento—. No, claro que no, son del fontanero que venía a arreglar las tuberías de mi salón de pinturas cuando te ibas a trabajar muy temprano y llegabas tan tarde—Easen arrugó el entrecejo ante la imagen mental. Quedó más que claro que hizo una pregunta totalmente estúpida, molestando a su esposa y que ese no era el caso, sin embargo, el gusano de los celos ya había clavado su aguijón—. Eres un idiota si no te has dado cuenta del cabello rubio que car
Kathy está nerviosa hasta los cabellos de su cabeza; su marido venía a verla a la noche, la cuidaba y se iba muy temprano.Cómo en los viejos tiempos, pensó.Sin embargo la diferencia era que Easen no la habló más que para lo esencial, para preguntar cosas como: ¿Quieres que te coloque mejor la camilla o la almohada? O ¿Quieres puré de papas para el desayuno? Pero jamás respondía a lo que Kathy preguntaba y está bien, ella sabe que había fallado como él también. Ambos tenían la culpa y si su marido está dispuesto a aceptarlo, ella lo hará también.Después de varios días, al fin hoy es su día de alta, está bastante feliz, Easen vino a recogerla sin sus trillizas, probablemente estén con Dyson, con su hermano autoproclamado. Aún se reía con eso.Subieron al automóvil, ella con sumo cuidado ya que su herida aún seguía abierta por más que esté cocida y Easen cargando a los trillizos, ya que sí, había dado a luz un mes antes a trillizas y ahora a trillizos. Muy genial y fantástico cuando e
—Espera solo un segundo, Easen…-—Te he dado más que un segundo para que te expliques y no has hablado.Dyson rodeó el sofá, tocándose el labio que ya su mejor amigo se lo había roto a puñetazos. —No es lo que crees…-—¡¿No es lo que creo?! ¿Acaso piensan que soy estúpido?Kathy comenzó a lagrimear haciendo que Dyson se arrodillara frente al humano enojado.—No voy a pelear contigo por que eres mi mejor amigo.—Levántate.Dyson siguió de rodillas.—¡Levántate!—¡Detente de una buena vez, Easen!—se quejó en cuanto el grito le movió la herida que todavía no está curada—. Nada de esto hubiera pasado si no me hubieses engañado.—¿¡Yo te engañé!? ¿Estás totalmente segura de eso?—¡Sí! ¡Por que…-!—¡Pasé todos estos meses buscándote por más y tierra, usando todos mis recursos para poder encontrar a mi esposa embarazada de mi hijo!Kathy ya estaba llorando cuando dijo eso.—No sabes como me sentí, no sabes…-—¿Crees que yo me la pasé siendo exitoso, descansando y vacacionando…-?—Cuidado, C
De verdad, de verdad que Kathy está sufriendo demasiado por su estómago herido, pero la pequeña sonrisa en el rostro de su trilliza menor, no tiene precio. Avateen, significa «La que da vida, agraciada» o «hermosa«, elegí ese nombre tan genialmente que me merezco un aplauso.Está sonriendo de vez en cuando mientras la está alimentando con su pecho, que por cierto están casi a reventar. Cómo si su cuerpo ya supiera que iba a tener seis hijos.Con cuidado la arrulla y sale del cuarto en silencio para no despertar a sus otros hijos, con la idea de mirar si su dormitorio sigue disponible o como él lo ha remodelado, eso sí, si es que ese cuarto seguía allí.Grande fue su sorpresa al ver cómo la habitación está impecable pero sin que se hubiera movido ni una sola cosa, entra por completo y observa el escritorio con el libro de "Casada con un lagarto" descansando en la superficie, que sus amigas le había obsequiado en una broma interna pero con el pasar de las páginas había amado con todo s
Kathy pensó seriamente en hacerse la dormida, pero lo descartó casi inmediatamente. Tenían muchas cosas de las que hablar.—¿Mis bebés?—susurró sin darle la cara, aún dándole la espalda—. ¿Dónde están?—Todos están durmiendo en la habitación de las trillizas, Dyson vino hace poco con mamilas y leche artificial para dejarte descansar un rato más.—Puedes irte.—¿No me vas a reclamar nada?—Si querías explicarte ya lo habrías hecho por propia voluntad.Easen quedó en silencio un momento. ¿Tan dolida está que ni siquiera le reclama el engaño? ¿Ya no quiere escucharlo?—Me odias ¿No es cierto?—no consiguió respuesta alguna por parte de ella—. Estás resentida.Agotada su paciencia, la giró y la apretó por la cama king-size, que ahora que Kathy lo observa mejor, ya no es la cama que tenían anteriormente, antes de que se escapara.—¡¿Quieres golpearme y hacerme sufrir verdad?!—¡Sí! ¡Lo hago! ¡Quiero que sufras como yo sufrí!—kathy gritó al rostro de su esposo—. ¡Quiero que sangres como yo s
—Así que esta es tu respuesta, eh, esposa mía. Por un momento tuve esperanza.Easen palpó la cama a su lado, encontrándose fría al tacto. Fría y sola.—¡Ojos de perra! ¿Estás adentro? ¿Estás vestido? Voy a pasar.Ni siquiera respondió, ya que vestido o no, respuesta o no, Dyson entraría de todas maneras. Se levantó lentamente de la cama y mientras se ponía los zapatos, Dyson metió medio cuerpo a la habitación. Se veía ridículo con un trillizo en brazos mientras sujetaba la mamadera en su pequeño rostro.—Escuché a alguien irse por la puerta de enfrente. ¿Qué pasó?Observó como Easen sin prisas terminó de abrocharse los zapatos para luego arreglar su ropa y cabello.—¿Ojos de perra? ¿Qué está…-?—una idea vino rápidamente a su mente que un espasmo lo recorrió. Le dejó el bebé en los brazos de su padre—. ¿Ella se ha vuelto a ir? Vigila a los sextillizos, iré a traerla de vuelta, seguramente no se fue muy lejos ya que…-—No, está bien.—¿Qué?—Dyson miró por sobre su hombro a su mejor amig
Ambos padres están totalmente exhaustos, las trillizas comen mucho, los trillizos aún más. Entre darles de comer a dos pechos a un par por hora a Kathy no le da tiempo de dormir y a Easen tampoco ya que debe darle las mamilas y sacarles los gases como también cambiarles el pañal. Hacer eso para ambos fue una odisea, la pelirroja ya tenía práctica, su esposo era un tema completamente diferente. Si unos bebés dormían satisfechos con el estómago lleno otros se despiertan con hambre y para cuando éstos se acostaban llenos los siguientes despertaban y así sucesivamente, el ciclo sin fin, sin descanso para los adultos.La única hora que parecían dormir los sextillizos era en la mañana, justo al salir el sol, al menos por una hora y treinta minutos quedaban quietos y tranquilos con una paz que Easen no creía volver a extrañar tanto en su vida.Los seis, en una fila en medio de la habitación, para Kathy era muy difícil de creer aún, que Easen se le haya confesado de esa manera y que quiera cr
—Aún así quiero que sepas que lo siento mucho.—Dyson, solo cierra la maldita boca por un segundo y escúchame, hombre. Dyson sonrió de medio lado, al escuchar el temperamento recuperado de su mejor amigo humano, así que acomodó su largo cabello a un lado, acarició su preciada alma hecha pendiente en su oreja y prestó atención.—Realmente, cuando descubrí que ella estuvo todo el tiempo contigo, estaba más aliviado que molesto. De una manera u otra ella pudo haber escapado—soltó un suspiro—. Pero saber que ella estaba contigo es mil veces mejor que ella hubiera estado con alguien a quien no conozco y poderle hacer cualquier cosa.—Easen…—Tal vez lo que Kathy más necesitaba era tiempo para organizar sus pensamientos.—Pero…—¿Debería decir algo más?—. Sí, tal vez era eso.—De todas maneras todo fue mi culpa. Dyson, has sido leal hacia mi tanto que me acostumbré y comencé a pensar que era natural que tú me ayudaras con esto y con lo otro sin pensar en ti ni un solo minuto. Esa fue la cau