— ¡Maldita sea! – perjura Gretta para sí misma al escuchar al doctor —. Definitivamente si quieres que alguna mierda salga bien debes hacerlo tu misma – resopla bajito sin que los hombres se percaten de su presencia.— ¿Entonces alguien quiso lastimar a mi retoño? – Stefano sonríe ante la curiosa elección de palabras del caballero que evidentemente es hispanohablante y no estadounidense, además de que mira “al enorme retoño” con añoranza y amor infinito.— No necesariamente – trata de explicar lo más claro posible sin dejar ver lo conmovido y la diversión que le causa la expresión de nostalgia del viejito — ¡verá! Las personas siempre tratarán de hacer que las emociones se maximicen sea que se sientan tristes, eufórico o tal vez alegres, dependiendo de las amistades que tengan… se dan este tipo de: digamos consecuencias. Es solo para encajar en el medio – el anciano asiente comprendiendo.— Qué extraño, Damián siempre fue muy popular incluso con las mujeres…— Permiso – gime Gr
— Mi mami dice que debo ser una señorita educada y con mucho glamur porque mi padre es un hombre importante en la industria far – ma – ceu – ti – ca– Lea observa con admiración no solo los movimientos de la mini princesa que tiene enfrente sino la perfección en su manera de pronunciar cada palabra de manera sutil, elegante y pausada — todavía se me dificulta la pronunciación – expone como chiste mientras llena las pequeñas tazas de porcelana China de un delicioso té de naranja con menta.Tania Del Toro no solo es una niña inteligente y correcta, también es inteligente y muy delicada en su andar, hablar y comportarse en sociedad. Todo lo contrario a lo que es ella, a sus veinte años es un completo desastre de cabello enmarañado y ojos llorosos por la mala suerte que ha tenido hasta ahora, pero se considera una persona agradecida y por esa razón se encuentra en estos momentos sirviendo de Nana para Tania que, aunque no lo necesita dado su perfecto comportamiento, no deja de ser una
El chapoteo del agua y las risas llaman la atención de los recién llegados. Paula y Harold miran sus relojes al mismo tiempo y se miran a la cara, preocupados porque ya pasan las cuatro de la tarde y Tania se esta mojando en la alberca junto a Lea.— Tranquila cielo, de seguro no pasa nada – asiente a su esposo sin mediar palabra — Lea es un adulto y po ende… responsable – paula cubre su boca pensando en el caos que formó en el restaurante y en la estación de policía, aunque no se comprobara que ella lo inició, ella sabe perfectamente que así fue — bueno, técnicamente es un adulto – mira con las cejas fruncidas la interacción entre las chicas y piensa que parecen de la misma edad y no la de Lea.— Tienes razón mi amor – acepta una Paula risueña —, si bien Lea no es un “adulto responsable” nosotros tampoco lo somos obligando a crecer a Tania solo porque no queremos una Nana – lo mira con súplica.— Pero si ahí la tienes, solo debes educarla porque como ya te he dicho – la ace
Lea baja la preciosa escalera de la casa en la cual la han recibido como familia.“Mi abuela siempre dice que a ninguna criatura le falta Dios y ahora sé que es muy cierto”, piensa sucumbiendo a las lágrimas de felicidad que siente bajar por las mejillas.Acostumbrada a ser maltratada por su condición de inmigrante no confía en nadie, pero reconoce que estas personas son muy buenas y en poco tiempo la han tratado mejor que el año en que trabajó en esa empresa de seguros donde el jefe no solo la pretendía abusar sino que la metió a la cárcel porque no se dejó.Escucha unas voces desconocidas al bajar por la hermosa y opulenta escalera hacia la sala de estar de la mansión donde ha sido acogida por Harold y Paula que, como ya se ha dicho son unos muy excelentes y compasivos seres humanos, se seca la cara arrancando el poco maquillaje que se aplicó y el dorso de su mano queda manchado. Pone los ojos en blanco al recordar la expresión de desaprobación que tendría Damián si la viera haciend
— Abuelo en serio necesito irme de aquí – el anciano niega — ¡por favor es importante — pero algo en los ojos de su ni9eto le indican que, aunque no va a gustarle lo que le dirá, es necesario que lo escuche.— ¿Qué harás, escapar? – Damián pone los ojos en blanco.— ¡Claro que no, por el amor de Dios! – se restriega la cara exasperado —. Estoy preso en este lío, pero necesito hacer la única cosa que considero es mi responsabilidad – explica mientras se acomoda sentado en la cama — ¿tienes mi teléfono? – Mauricio asiente — permítemelo por favor, debo llamar a Harold para saber de Lea – recibe el aparato y marca — su teléfono debe estar hasta el tope de notificaciones y ella… - respira hondo — no lo merece ¿sabes? Es inocente y quiero que me acompañes a buscarla para explicarle lo que pasó – el hombre mayor entiende perfectamente y no le pasa desapercibida la ansiedad en su voz.Gretta que todo el tiempo se dedicó a teclear en su Smartphone, en este momento levanta la cara par
Lea observa a Damián, siente que el piso se mueve, el mundo gira y su corazón sale corriendo del pecho.“Santo cielo se ve guapísimo”, es lo único que logra coordinar su atrofiado cerebro con la presencia del adonis.Pero el adonis no piensa lo mismo y la mira con dolor, rencor y enfado. Ella ni siquiera se dá cuenta ya que el licor la ha entumecido por completo.— Damián cariño, pasa adelante – Paula extiende su mano, pero él niega en rotundo.— Lo siento Paula, pero tu eres parte de todo esto – los señala a todos — todos lo son – la mujer da un paso atrás sin saber que decir y este prosigue — todo es parte de la maldita trampa – mira fijamente a Lea — incluso tú – ella abre los ojos como un par de platos sin entender, niega — todos ustedes estaban enterados de la verdad y ni siquiera fueron capaces de advertirme – gira hacia Harold — tu eres el peor, te hablé con sinceridad y te reíste de mí – niega por su propia mala suerte.— Damián hijo espera…— No me llames así, esa ma
— ¡Y por el amor de Dios Andrés, no te equivoques esta vez! – exige una Gretta malhumorada y celosa de Lea.— Descuida cariño, ya sé que hacer – refiere muy seguro de sí mismo al ver llegar el auto estilo limusina y bajarse a Damián junto a su padre — debo dejarte, va llegando el paquete – y cuelga.Andrés se encuentra rondando la residencia para saber exactamente el sitio donde se encuentra Lea, platica con su cómplice que es la chica llamada Sara (la que es su novia por cierto). Le indica la parte de atrás de la casa para que suba y verifique mientras no ve guardias armados por ninguna parte.“A veces los millonarios son mucho más descuidados que nosotros”, piensa con una sonrisa malévola al ver a Lea bajar por la escalera.— ¿Qué haces? – Sara golpea el hombro masculino — pueden verte – él le hace un guiño muy seguro de sí mismo.— Guarda la calma cielo, recuerda que yo he sido guardaespaldas y se lo que hago – le da un beso en la nariz — ¡ahora vigila la parte de atrás por
Damián se acerca al sujeto que tiembla como una hoja tanto por el asco que siento como por la expresión asesina que ve en el rostro del hombre que se le viene encima sin miramientos. Conecta su gran puño en la cara de Andrés y ahí se abrió la piel además que el pobre salió disparado hacia atrás cayendo despatarrado en el pavimento. Sara grita y pretende correr hacia su novio, pero Lea se lo impide de un puñetazo en el rostro y cae golpeándose el trasero, la espalda y la cabeza.— ¡Eso te pasa por perra! – le grita Lea a la mujer en el suelo — ¡Dios Santo! – se dirige hacia el chico lindo que intentó salvarla y que ahora sabe que no lo necesitaba — ¿te encuentras bien? – observa a Albert y a Derek sacar a Damián de encima de Andrés que ya no se mueve.— Hola, sí, eso creo – Lea arranca un trozo de tela de su fino vestido y hace un torniquete en la pequeña herida que el joven lindo tiene en el brazo — ¡vaya! No solo eres hermosa sino peligrosa y sabes defenderte en cualquier situaci