Ellie y EthanELIJAH.Un mes después.Tener dos bebés recién nacidos es mucho más complicado de lo que creí en un principio que sería, Valentine regresó conmigo a Nueva York dos semanas después del parto y ambos vivimos en mi pent-house con nuestros hijos.Ella salió hace un par de horas a encontrarse con mi suegro y con su amiga Zoe e intentar limar asperezas y me encargó a los niños, es la primera vez que me encuentro completamente solo con ellos y estoy asustado. No han dejado de llorar desde que despertaron hace una hora y ya no sé qué hacer, les di sus biberones, saqué sus gases, cambié sus pañales y estoy paseándolos a ambos por el apartamento, están en su respectiva carriola doble y les coloqué adentro a cada uno una blusa de Valentine.Ya no sé qué hacer.Dejo de caminar, rodeo la carriola y veo a mis dos preciosos y llorones hijos y sonrío, son muy pequeños y hacen demasiado ruido, me arrodillo frente a ellos y respiro profundo. Voy a hablarles una vez más y le ruego a Dios
MaternidadVALENTINE.Las personas suelen romantizar la maternidad y decir que los primeros meses de vida de nuestros hijos son los más hermosos y en parte es verdad, pero también son los más complicados, porque los padres no venimos con un manual sobre como actuar ante cualquier situación complicada que se nos presente.Lloro en silencio mientras meso a Ethan entre mis brazos en un intento de que deje de llorar, estoy desesperada. He intentado todo lo que Elijah me dijo que hizo para calmarlo cuando salí hace unos días y no ha funcionado, solo empeora el llanto del bebé. Hay días en los que siento que mi hijo me odia, porque apenas lo cargo empieza a llorar y solo se detiene cuando Elijah le habla o lo coloca en su pecho.Coloco a Ethan en la carriola junto a su hermanita Ellie y meto en la parte de abajo algunas cosas que puedan necesitar y me coloco la pañalera en el hombro izquierdo y en el derecho mi bolso con mi documento de identidad, tarjetas, dinero en efectivo y el celular.
Su esposaVALENTINE.Una semana después.Esta es la primera noche que salimos a cenar solos desde que los mellizos nacieron hace un mes y una semana, se siente extraño estar sin ellos después de haber estado a su lado desde su nacimiento día y noche, pero también muy relajante.Contraté a una niñera hace tres días y he estado menos tensa que las semanas anteriores, ser mamá es difícil. Ni siquiera sé cómo pudimos apañárnosla Elijah y yo cuando ninguno tuvo un hermano al cual cuidar y que pudiera considerarse como experiencia previa para el cuidado de los bebés. Todo lo resolvimos yendo al pediatra o consultando internet.—Qué preciosa está, señora Relish —musita Elijah con galantería y lleva mi mano hacia su boca y deposita un beso en mis nudillos—. Llevaba semanas deseando estar a solas con usted como en este instante.Me mira durante breves segundos antes de regresar su vista al frente y le sonrío con coquetería, esta noche me siento muy bella y sexy, el vestido rojo que estoy utili
No mereces a esa mujerELIJAH.Eleonor me observa con resentimiento, mientras entra a mi oficina, mirada que me ha dirigido desde que traje a Ava aquí y Valentine me descubrió siéndole infiel con mi ex. No la culpo, a mi secretaria siempre le agradó mi esposa y detestaba a Ava incluso antes de que me dejara.Ella toma asiento frente a mí y enarca una ceja, mientras espera que hable, nuestra relación no ha sido la misma. Mi secretaria antes me quería como si fuese un hijo para ella, pero ahora actúa como si me odiara.—Hola, Eleonor. ¿Podrías buscarme el nombre de organizadores de bodas o empresas que se dediquen a ello y adjuntar imágenes de los trabajos que han realizado? De preferencia que sean de la ciudad, por favor —Eleonor asiente y hace el amago de ponerse de pie, pero niego con la cabeza. No puedo ni quiero que nuestra relación continúe así, le tengo muchísimo aprecio—. No te vayas, aún ni siquiera ha empezado nuestra conversación.Ambos nos observamos durante largos minutos e
La aprobación del suegroVALENTINE.Nunca había visto a papá tan serio y con cara de pocos amigos en mi vida, mientras termina de cocinar lo que almorzaremos. Sé muy bien que está así para intimidar a mi esposo, ya que él nunca se había visto en la necesidad de ser un padre gruñón porque no le di dolores de cabeza ni salí con chicos hasta casi terminar mi carrera universitaria.Había estado muy resentida con los hombres por lo que Elijah me había hecho cuando éramos adolescentes y luego tenía vergüenza de que descubrieran que vivía en un refugio para personas sin hogar y que de manera literal, vivía de la caridad del gobierno.Elijah se acerca a la cocina y veo que habla con papá, más no logro escuchar lo que dicen, dado que yo estoy en la sala de estar y está encendida la televisión. Nuestros hijos están durmiendo en la habitación que decoré para nuestro primer bebé y que papá se encargó de asear para que sus nietos pudieran dormir allí mientras estamos aquí.Mi esposo se lava las ma
SecuestroVALENTINE.Una semana después.Hoy es la primera vez que salgo a caminar por las calles con los bebés dentro de la carriola, estoy usando una gorra y lentes de sol para evitar ser reconocida y acosada por los periodistas. Algo que me gusta y extraño mucho de vivir en Los Ángeles, es que puedo caminar por la calle sin temor a ser perseguida de un momento a otro por reporteros de los medios de comunicación.Aquí es difícil hacerlo, no respetan la privacidad ajena y me persiguen como si fuese una celebridad, desde que comencé a salir con Elijah me convertí en un blanco para los medios de comunicación y más desde que nos casamos y nos vinimos a vivir otra vez aquí después del nacimiento de los bebés.Iremos a Central Park, tengo muchos años sin ir. Creo que la última vez que fui a dicho parque fue cuando me gradué de la secundaria o en mi primer año de la universidad para hacer con mis compañeras de clases un informe, ellas querían ir a mi casa a realizarlo porque tenían curiosi
Julia y AvaVALENTINE.Me despierto muy desorientada al escuchar el llanto de mis hijos, abro los párpados y noto que estoy atada de manos y pie a una silla de metal que está fijada al suelo, porque me muevo y forcejeo con los amarres y esta no se tambalea siquiera un poco, no fue un sueño. Todo fue muy real y ahora mis hijos y yo estamos secuestrados, no me importa lo que suceda conmigo, solo deseo que ellos estén bien.—¡Cállate, maldito niño! —Le grita la mi bebé la misma mujer que me secuestró, aumentando su llanto—. ¡Eres tan insoportable! Como puedo, escupo con asco el trapo que estaba dentro de mi boca y lucho durante segundos con las arcadas que me produjo realizar tal acción. No entiendo cómo un simple paseo terminó convirtiéndose en una pesadilla.—¡¿Puedes traerme a mis hijos, maldita loca?! —Grito, con la voz rasposa y con la esperanza de que me escuche y entregue a mis hijos—. ¡Ellos nunca dejarán de llorar con ustedes! Escucho pasos frente a la desolada habitación en l
DesequilibradaVALENTINE.Dejo de respirar cuando siento un objeto corto punzante hacer presión en mi costado derecho, todos en la bodega enmudecen al ver lo que está sucediendo y no es para menos, puedo morir si decide apuñalarme. —¿Ya están entendiendo quién es la reina del tablero? Un movimiento más y voy a herirla, después mataré a sus hijos frente a ella y se los enviaré a Elijah como un recordatorio por haberme jodido —espeta y Julia suelta un jadeo horrorizado, esta mujer ha perdido la cordura y estoy segura de que cumplirá sus palabras si me atrevo a hacer algo en su contra—. Nos iremos y si intentan alguna cosa, mataré a los malditos niños.Me empuja a la salida y empiezo a caminar bajo la atenta y horrorizada mirada de todos, no tengo más opción. No podría soportar perder a mis hijos y vivir con la culpa de que murieron por mi desobediencia.—Ava, dame un teléfono para llamar a Elijah y pedirle que vaya a encontrarse contigo al lugar que desees, a cambio, necesito que me de