No mereces a esa mujerELIJAH.Eleonor me observa con resentimiento, mientras entra a mi oficina, mirada que me ha dirigido desde que traje a Ava aquí y Valentine me descubrió siéndole infiel con mi ex. No la culpo, a mi secretaria siempre le agradó mi esposa y detestaba a Ava incluso antes de que me dejara.Ella toma asiento frente a mí y enarca una ceja, mientras espera que hable, nuestra relación no ha sido la misma. Mi secretaria antes me quería como si fuese un hijo para ella, pero ahora actúa como si me odiara.—Hola, Eleonor. ¿Podrías buscarme el nombre de organizadores de bodas o empresas que se dediquen a ello y adjuntar imágenes de los trabajos que han realizado? De preferencia que sean de la ciudad, por favor —Eleonor asiente y hace el amago de ponerse de pie, pero niego con la cabeza. No puedo ni quiero que nuestra relación continúe así, le tengo muchísimo aprecio—. No te vayas, aún ni siquiera ha empezado nuestra conversación.Ambos nos observamos durante largos minutos e
La aprobación del suegroVALENTINE.Nunca había visto a papá tan serio y con cara de pocos amigos en mi vida, mientras termina de cocinar lo que almorzaremos. Sé muy bien que está así para intimidar a mi esposo, ya que él nunca se había visto en la necesidad de ser un padre gruñón porque no le di dolores de cabeza ni salí con chicos hasta casi terminar mi carrera universitaria.Había estado muy resentida con los hombres por lo que Elijah me había hecho cuando éramos adolescentes y luego tenía vergüenza de que descubrieran que vivía en un refugio para personas sin hogar y que de manera literal, vivía de la caridad del gobierno.Elijah se acerca a la cocina y veo que habla con papá, más no logro escuchar lo que dicen, dado que yo estoy en la sala de estar y está encendida la televisión. Nuestros hijos están durmiendo en la habitación que decoré para nuestro primer bebé y que papá se encargó de asear para que sus nietos pudieran dormir allí mientras estamos aquí.Mi esposo se lava las ma
SecuestroVALENTINE.Una semana después.Hoy es la primera vez que salgo a caminar por las calles con los bebés dentro de la carriola, estoy usando una gorra y lentes de sol para evitar ser reconocida y acosada por los periodistas. Algo que me gusta y extraño mucho de vivir en Los Ángeles, es que puedo caminar por la calle sin temor a ser perseguida de un momento a otro por reporteros de los medios de comunicación.Aquí es difícil hacerlo, no respetan la privacidad ajena y me persiguen como si fuese una celebridad, desde que comencé a salir con Elijah me convertí en un blanco para los medios de comunicación y más desde que nos casamos y nos vinimos a vivir otra vez aquí después del nacimiento de los bebés.Iremos a Central Park, tengo muchos años sin ir. Creo que la última vez que fui a dicho parque fue cuando me gradué de la secundaria o en mi primer año de la universidad para hacer con mis compañeras de clases un informe, ellas querían ir a mi casa a realizarlo porque tenían curiosi
Julia y AvaVALENTINE.Me despierto muy desorientada al escuchar el llanto de mis hijos, abro los párpados y noto que estoy atada de manos y pie a una silla de metal que está fijada al suelo, porque me muevo y forcejeo con los amarres y esta no se tambalea siquiera un poco, no fue un sueño. Todo fue muy real y ahora mis hijos y yo estamos secuestrados, no me importa lo que suceda conmigo, solo deseo que ellos estén bien.—¡Cállate, maldito niño! —Le grita la mi bebé la misma mujer que me secuestró, aumentando su llanto—. ¡Eres tan insoportable! Como puedo, escupo con asco el trapo que estaba dentro de mi boca y lucho durante segundos con las arcadas que me produjo realizar tal acción. No entiendo cómo un simple paseo terminó convirtiéndose en una pesadilla.—¡¿Puedes traerme a mis hijos, maldita loca?! —Grito, con la voz rasposa y con la esperanza de que me escuche y entregue a mis hijos—. ¡Ellos nunca dejarán de llorar con ustedes! Escucho pasos frente a la desolada habitación en l
DesequilibradaVALENTINE.Dejo de respirar cuando siento un objeto corto punzante hacer presión en mi costado derecho, todos en la bodega enmudecen al ver lo que está sucediendo y no es para menos, puedo morir si decide apuñalarme. —¿Ya están entendiendo quién es la reina del tablero? Un movimiento más y voy a herirla, después mataré a sus hijos frente a ella y se los enviaré a Elijah como un recordatorio por haberme jodido —espeta y Julia suelta un jadeo horrorizado, esta mujer ha perdido la cordura y estoy segura de que cumplirá sus palabras si me atrevo a hacer algo en su contra—. Nos iremos y si intentan alguna cosa, mataré a los malditos niños.Me empuja a la salida y empiezo a caminar bajo la atenta y horrorizada mirada de todos, no tengo más opción. No podría soportar perder a mis hijos y vivir con la culpa de que murieron por mi desobediencia.—Ava, dame un teléfono para llamar a Elijah y pedirle que vaya a encontrarse contigo al lugar que desees, a cambio, necesito que me de
Pedido de ayudaELIJAH.Fui a casa al mediodía para almorzar con Valentine y nuestra empleada doméstica me dijo que ella había salido hacía un par de horas con los bebés a Central Park y que de allí irían a casa del suegro, pero Valentine y los mellizos nunca llegaron a su casa y la ubicación de su celular desapareció en el parque.No hay que ser un adivino para deducir que mi mujer y mis hijos fueron secuestrados, eso se lo comenté a mi suegro y juntos fuimos a la policía a poner la denuncia, más nos dijeron que debíamos esperar setenta y dos horas para que ellos pudieran comenzar con la investigación, porque antes de ese tiempo no podían considerarse como desaparecidos.—¿Está de acuerdo con que recurramos a los medios de comunicación para obtener alguna pista del paradero de Valentine y los niños? —Le pregunto a mi suegro y este asiente con la cabeza de inmediato—. Sea consciente que desde el momento que posemos frente a las cámaras será acosado por la prensa, no hay vuelta atrás d
DeterminaciónELIJAH.Henry no habla, no dice ni una sola palabra mientras conduce por la ciudad como si fuese un demente, algo grave debieron haberle dicho como para estar en ese estado y eso me tiene mucho más preocupado, lo último que podríamos tener en este momento es un accidente de tránsito.Toco su hombro con suavidad intentando llamar su atención, más no reacciona. Se detiene en el semáforo en rojo y parpadea un par de veces antes de apretar con fuerza el volante. Esta es la primera vez que lo veo perder el control, ni siquiera cuando me vio por primera vez después que regresamos a Nueva York me insultó o golpeó, simplemente me ignoró e hizo de cuenta que yo no estaba presente. —Llamaron al apartamento en el que vives con mi hija y nietos… dijeron que no quieren dinero, desean que intercambies de lugar con ellos. Te quieren a ti —musita después de lo que se siente como si hubiese pasado una eternidad, mientras conduce hacia mi hogar—. De lo contrario, venderán a Valentine y a
RescateVALENTINE.Ava suelta un grito y tira de su cabello un par de veces antes de voltear a verme con odio y caminar hacia donde estoy con furia, como si le hubiese dicho o hecho algo que la hubiese ofendido, cuando no me he movido y he estado en silencio desde que llegamos.Me abofetea tan fuerte que rompe la parte interna de mi mejilla y reprimo a duras penas el alarido de dolor cuando comienza a tirar de mi cabello con fuerza, no puedo defenderme o golpearla porque apenas llegamos a este lugar me colocó esposas en mis manos y amarró mis pies a la silla para que no pudiera huir.—¿Qué carajos te pasa, Ava? —Pregunto cuando deja de agredirme y me observa con odio, mientras respira de manera agitada—. ¡¿Qué diablos te hice para que hayas estado golpeándome desde que nos secuestraste?! Desata mis pies y luego me quita las esposas, no lo pienso dos veces y convierto mi mano en puño y golpeo su nariz, la empujo para alejarla y me pongo de pie, no seguiré siendo su maldito saco de box