2. Pacto.
VALENTINE.Comienzo a caminar hacia el edificio en el que vivo, ya que vivo cerca y no dejo de pensar en lo que me dijo minutos atrás: sacarle dinero a Elijah a cambio de no decir ni media palabra de lo que me hizo y si está muy desesperado por hacer que cierre la boca, es muy probable que acepte sin pensarlo muy bien. Aunque no me siento cómoda con la idea, no me considero oportunista.Bueno, que pase lo que tenga que suceder.Apresuro el paso por la hora, pese a que la zona es bastante segura, no quiero arriesgarme a que me roben. No es lo que precisamente necesito en este momento.Camino aproximadamente quince minutos y suelto un suspiro cargado de alivio cuando entro al lobby del edificio, después de vivir un asalto a mano armada hace unos meses, me da un poco de miedo que vuelvan a apuntarme en la cabeza mientras se llevan las cosas que tanto esfuerzo me compro.Saludo al muchacho que está todas las noches en el mostrador y noto en su mirada cierta picardía al verme, pero decido ignorarlo, estoy muy cansada como para prestarle atención a las tonterías de un adolescente de dieciséis años.Subo al ascensor y presiono el botón del piso en el que se encuentra mi apartamento, estoy loca por llegar a casa, quitarme la ropa y darme un buen baño antes de ponerme a buscar detectives privados en internet. Mañana llamaré a papá y le propondré contratar uno, porque de otra forma no vamos a encontrar nada y va a ir a la cárcel.Saco mi celular de la cartera y veo que me ha escrito Zoe informándome que ya está en su casa y preguntándome si yo estoy ya en la mía, le digo que estoy en el ascensor y me pongo a ver las historias de mis contactos.El ascensor abre sus puertas y salgo, comenzando a caminar hacia mi apartamento con la vista fija en la pantalla, he recorrido tantas veces este mismo pasillo que ya sé cuánto tengo que caminar para llegar a casa.Meto una mano en la cartera y saco las llaves, notando que frente a la puerta de mi apartamento hay un hombre vestido de traje, comienzo a subir la mirada lentamente, notando lo bien que le queda este, pero al ver el rostro del individuo frente a mí, la molestia me invade, ¿qué carajos hace Elijah Potter frente a mi apartamento y cómo consiguió mi dirección?—¿Qué haces aquí? —Inquiero, sobresaltándolo, dado que estaba leyendo unos documentos—. ¿Cómo conseguiste mi dirección?Levanta la vista de los papeles y me sonríe, logrando que se intensifique más mi molestia.—Hola, Elijah. ¿Qué te trae por aquí? ¡Ay! Qué maleducada soy, ¿quieres entrar a mi apartamento? —Musita con un tono de voz divertido y yo procedo a ignorarlo mientras comienzo a abrir la cerradura de la puerta para dejarlo afuera—. Hola, Valentine. Estaba cerca y decidir venir a verte porque tengo que hablar contigo.Ignoro su absurdo monólogo y entro a mi apartamento, estoy cansada y lo menos que deseo es lidiar con idiotas siendo casi las diez de la noche, ¿acaso no puede irse a su casa a descansar tal y como haría una persona normal. Intento cerrar la puerta, pero coloca su pie, impidiéndome realizar dicha acción. Dios mío, ¿acaso es mucho pedir que no me ocasionen imbéciles dolores de cabeza tan tarde?—¿Podrías quitar tu asqueroso pie? Quiero irme a dormir y lo único que estás haciendo es molestar —espeto con muchísima más molestia que antes, si por escasos segundos el día de hoy llegué a considerar dejar de odiarlo, eso queda descartado—. Vete a casa, Harry Potter, no eres bienvenido aquí.Tengo tantas ganas de reír por su cara de desconcierto al escuchar la manera en que lo he llamado, pero ni con eso quita su pie.—Me ofende que me llames de esa manera, no es mi culpa que mi padre me haya heredado ese endemoniado apellido —contesta, observándome con recelo—. Puedo tolerar que me digas imbécil, idiota, estúpido y todo lo que quieras, pero, no Harry Potter, odio esas películas y libros.Sonrío con satisfacción al verlo actuar tan ofendido, si hubiese sabido cuando éramos adolescentes que le disgusta que le digan así, le habría hecho el mismo bullying que él a mí.—Y yo te odio a ti. Harry Potter, vete de aquí, te buscan en Hogwarts —intento cerrar una vez más, aporreando su pie con la puerta y el marco de esta—. Quita el pie o llamaré a la policía por acoso.Deja de hacerse el gracioso y me mira con seriedad, no estoy para sus jueguitos y espero que se haya dado cuenta de ello de una vez por todas.—Necesito hablar contigo, es algo delicado y no puedo hacerlo aquí en medio del pasillo —murmura y yo lo miro con burla, abriendo la puerta, invitándolo a pasar con una seña—. Gracias.Comienzo a encender las luces y agradezco a los cielos haber limpiado esta mañana, no quisiera darle más motivos para que se burle de mí.—¿Y crees que a mí me interesa lo que sea que tengas que hablar conmigo? —Inquiero, alzando la ceja izquierda y se acerca demasiado a mí, invadiendo mi espacio personal—. Te detesto lo suficiente como para desear no verte más por el resto de mi vida.Contengo la respiración cuando me pega contra la pared y acerca su rostro a centímetros del mío.—No te estoy pidiendo que te olvides de toda la m****a que te hice pasar, Baker, porque ni yo lo olvido —susurra Elijah en mi oído, erizándome la piel—. Solo quiero que finjamos que estamos saliendo y vamos a comprometernos porque estamos locos el uno por el otro hasta que mi padre me nombre Director Ejecutivo de Potter Inc.Lo observo con desdén y suelto una risita cargada de incredulidad, alejándome de él. No puedo creer que me siguiera hasta mi apartamento para pedirme esto como si fuésemos los mejores amigos, es un cínico.—¿Y qué gano yo si acepto esa estupidez? —Inquiero, enarcando una ceja—. ¿Acaso vas a pagar mis deudas y resolver mis problemas?Elijah sonríe con aprobación, como si hubiese hecho las preguntas que deseaba escuchar y yo quiero golpearlo, de todas las personas a las que conoce y pudo proponerle esto, ¿por qué me eligió a mí?—Puedo hacerlo, sin importar qué tanto dinero sea lo que debas, Valentine —dice con súplica—. Si aceptas, mañana mismo puedo acompañarte a pagar tus deudas y ayudarte a resolver los problemas que tengas, a cambio, solo tenemos que fingir que estamos en una relación estable durante seis meses, ¿qué dices? ¿Nos ayudamos?Miro con desconfianza la mano que extiende hacia mí y la tomo durante breves segundos, sellando de manera silenciosa nuestro pacto y esboza una enorme sonrisa.—Hagámoslo, pero, quiero que haya un contrato de por medio —me observa con desconcierto unos segundos, sin perder la sonrisa y termina asintiendo—. No confío en ti, Elijah, ¿por qué no le propusiste esto a tus amigas?—Porque no confío en ellas, Valentine —contesta de inmediato—. Tú eres mi única opción y también la única mujer en Estados Unidos en la que confío.Suelto una risa cargada de ironía y me recuesto contra la pared y lo observo, ni en mis más locos sueños habría imaginado terminar en una relación por contrato con Elijah Potter.—¿Por qué confiar en mí? Puedo ir a delatarte con tu padre si así lo quisiera —señalo lo obvio y se encoge de hombros, restándole importancia.Camina hacia la sala de estar como si lo hubiera invitado a hacerlo y aprieto los labios con molestia, no me gustan las personas entrometidas ni abusadoras.—Porque me necesitas y yo te necesito a ti, por esa razón no vas a delatarme —sentencia y no me queda más opción que darle la razón—. Así que, ven aquí amada mía, sellemos nuestro pacto con un beso de amor verdadero.Empiezo a reírme con fuerzas y lo veo sonreír, como si en sus planes hubiera estado hacerme reír esta noche. Más no voy a dar eso por sentado ni voy a bajar la guardia por ello.—Vete a la m****a, Harry Potter, porque mis besos no se los doy a cualquier mago que se aparezca por aquí ofreciéndome una irresistible propuesta —digo con diversión y desaparece de su rostro todo rastro de diversión, aumentando mi risa, es graciosa la manera en que se molesta por algo tan tonto—. ¿Ahora si puedes irte a tu casa? Ya obtuviste lo que querías, hazme llegar esta semana el acuerdo con tu abogado y comenzamos a fingir tener citas románticas.Suelta una risa divertida y se acerca a mí, acorralándome una vez más contra la pared, hago el amago de golpearlo, pero toma mis manos y las coloca encima de mi cabeza.—No obtuve todo lo que quería —susurra sobre las comisuras de mis labios, poniéndome nerviosa por su repentina cercanía—. Porque desde que te vi entrar en la oficina de mi padre, no he dejado de fantasear con comerte la boca como cuando éramos adolescentes, Valentine Baker.3. Un hombre no vale tanto como para que una mujer sufra por ellosELIJAH.Confesarle a Valentine que me muero por besarla desde hace más de diez años, en lugar de sentir un alivio, se sintió como si hubiera firmado mi sentencia de muerte.Como si nos hubiese condenado a ambos y eso me asusta, me asusta llegar a enamorarme de la mujer a la que le arruiné la vida en estos seis meses que vamos a fingir ser novios.Más no voy a retractarme y huir con la cola entre las patas, comienzo a besarla con lentitud y suelto sus manos, este es su momento para apartarme y mandarme al diablo o quedarse en esta aventura que apenas empieza.Ladeo con delicadeza su rostro y ella me devuelve el beso con las mismas ganas que yo, Valentine siempre me gustó mucho, pero no quería ser nuevamente víctima de bullying y por cobarde lo arruiné con ella.Gimo bajito cuando ella jala mi cabello y ladea mi rostro a su antojo, profundizando el beso y juro por Dios que nunca antes un beso se sintió mejor que este. Si
3. Un hombre no vale tanto como para que una mujer sufra por ellosELIJAH.—Hola, Elijah —musita y veo sus ojos brillar con emoción—. ¿Cómo te fue hoy en la empresa?Ignoro su pregunta y examino su rostro, evaluando si los daños de terminar esto serán muy grandes.—¿Sobre qué quieres conversar conmigo, Julia? —Pregunto, yendo directo al grano. No quiero alargar esta conversación más de lo estrictamente necesario.Juguetea con su bolso con nerviosismo y sonrío con amargura, se lo advertí y no me hizo caso. Y, como siempre, yo seré el malo.—¿Podemos conversarlo en tu apartamento? —Responde con otra pregunta y niego, mientras más se alargue esto, peor se sentirá—. Me gustas, Elijah y sé que te sientes igual que yo, lo he visto en tu mirada. ¿Quieres salir conmigo?Niego con la cabeza una vez más y Julia me observa con confusión, como si no estuviera entendiendo mi negativa o no lo quisiera aceptar. Le advertí muchas veces antes de que comenzáramos a tener sexo que no se enamorara de mí,
4. Los hombres no cambianVALENTINE.Zoe me observa con reproche a través de la pantalla y yo me siento como una niña pequeña regañada, si mamá estuviera viva y supiera de esto, me habría visto de la misma manera que mi mejor amiga.—¡¿Perdiste la cabeza, Valentine Baker?! —Grita y yo me encojo de hombros, restándole importancia y eso la enfurece más y aumenta mi diversión—. ¡Definitivamente la perdiste! ¡No decía enserio que te acercaras al demonio ese por dinero!Empiezo a reírme a carcajadas y veo enrojecer el rostro de Zoe debido a la molestia, estoy segurísima de que, si hubiésemos estado juntas en este momento, me habría golpeado para que reaccione y mande a la m****a a Elijah.—¿Cómo iba a rechazar esa irresistible propuesta, Zoe? De ese trato depende la libertad de mi padre, es mi único familiar vivo y por él haría lo que sea —contesto y veo como su expresión enfadada se reduce un poco—. Además, dentro de unos minutos vendrá Harry Potter por mí para que discutamos los términos
4. Los hombres no cambianVALENTINE.—No tendremos citas, sexo casual o conoceremos personas mientras esté vigente el contrato —dice Elijah y yo sonrío con diversión—. ¿Qué tiene de divertido lo que digo?Me tomo mi tiempo para contestar y mastico con suma lentitud la exquisita carne de cerdo, soy amante del cerdo y Dios, este platillo es lo mejor que he comido en mi vida.—Que dudo mucho que puedas mantener el pene dentro del bóxer durante seis meses, Harry Potter —digo con burla y tomo un sorbo del vino espumoso que estamos tomando—. Así que, nada de tener una amante a mis espaldas, cariño.Elijah me observa de manera intensa y sonríe con amplitud, no le había visto sonreír de esta manera nunca, ni siquiera con los que eran sus mejores amigos o conquistas cuando estudiamos juntos.—¿Me estás retando, Valentine? —Inquiere con diversión, enarcando una ceja y asiento, mientras sigo comiendo. La comida está exquisita como para permitir que se enfríe—. Entonces, si te digo que quiero tene
5. ArrepentimientoELIJAH.Valentine sube a mi auto y yo me quedo a solas con Julia, siento pena por ella, dado que en parte es mi culpa por no haber terminado con lo que teníamos cuando noté que empezaba a tener sentimientos por mí y yo, como el bastardo egoísta que soy, lo dejé estar solo por querer un poco de su compañía.—Haré de cuenta que esto no ha ocurrido, Julia —le digo mirándola a los ojos—. Te pido disculpas por la manera tan asquerosa en la que terminé las cosas contigo, no lo merecías. Eres una buena mujer y lo único que puedo desearte es que seas feliz, tengas una buena vida y encuentres a la persona correcta para ti, una que te sepa apreciar y valorar por el precioso ser humano que eres y no por tu físico, porque eres más que una cara bonita y no permitas jamás que nadie te haga creer lo contrario.Finalizo y ella ni siquiera es capaz de mirarme, simplemente, seca sus lágrimas y se marcha sin mirar atrás. No puedo sacarla completamente de mi vida porque su padre es uno
Cena familiarVALENTINE.Estoy muy nerviosa y eso se refleja en mis manos, ya que no he dejado de juguetear con el brazalete que compré con el dinero de Elijah para esta cena, una cosa es tratar con su padre como una abogada más y otra muy distinta es que me vaya a presentar como su nuera.Aunque seamos una pareja falsa, esto es lo más cerca que he estado de formalizar un noviazgo en toda mi vida y eso me tiene aterrada, quería que esta primera vez fuese con alguien que amara, no con un idiota mujeriego que el ochenta por ciento del tiempo detesto.—No estés nerviosa, mi padre no será malo contigo, se nota que te aprecia más a ti que a mí —dice Elijah con una sonrisa en los labios mientras conduce—. De la única persona que voy a advertirte es de mi madrastra, por ningún motivo te quedes a solas con ella, por favor.Noto la súplica y la urgencia en su tono de voz y volteo a verlo con confusión, cuando iba a visitarlo hace más de diez años, Sophie nunca me trató mal, aunque quizás haya s
7. Besos con sabor a tequilaELIJAH.—La cena fue un desastre —musita Valentine, apenas tomamos asiento en la terraza. Ella observa la ciudad y yo la miro a ella, no miento cada vez que pienso que es la mujer más preciosa que he tenido el placer de conocer en mi vida—. Al menos tu padre se mostró satisfecho con nosotros y quiso que salgamos a cenar con mi padre en otra oportunidad.No le contesto de inmediato y me aflojo la corbata, recordando el momento en que apartó mi mano de su muslo y me observó muy dolida, mi gesto inconsciente debió recordarle al año que lo fuimos todo sin ser nada. Fuimos nuestras primeras veces en todo y acabó fatal por mi culpa.—Nada que no podamos olvidar con alcohol, bebamos juntos lo que resta de la noche, ¿qué dices? —Pregunto y ella voltea a verme con una sonrisa, algo me dice que le gusta ingerir alcohol.—Trae todo el Tequila, sal y limón que tengas, Harry Potter —dice con una sonrisa maliciosa en los labios—. Necesito algo de alcohol en mi sistema pa
El hombre que me gustaVALENTINE.Cinco días después.No me arrepiento de haber tenido sexo con Elijah, pero sí de casi haber estado a punto de confesarle que lo quiero solo para mí, eso habría sido mi ruina. Creo que me sentiría peor de lo que ya lo hago.Han pasado cinco días desde la última vez que estuvimos y no me ha llamado, escrito o buscado y se siente igual que después de haber perdido mi virginidad con él cuando éramos adolescentes, solo que esta vez pequé con conocimiento, porque sabiendo como es, no pude evitar caer en sus encantos otra vez.Realmente creí que sería en esta ocasión diferente porque me defendió de su hermanastro, pero me doy cuenta que fue una simple actuación y que no significó nada para él. Quisiera decir que me sorprende, pero la verdad es que no, un mujeriego no cambia y menos por acostarse con una mujer con la que finge tener una relación. Zoe me lo advirtió y yo ignoré su consejo, creyendo que podría con la situación, más no fue así. Me siento tan ton