Narra Darían.
—Perdona amor no fue mi intención, reconozco que falle y me arrepiento por ello—. Vuelvo a besar su mano, ella me mira.
—Te disculpo, pero otra y te mando directo al valle del dolor—. Trago grueso.
—Te lo prometo mi luna—. La acerco a mí. —Descansaremos en media luna y mañana temprano regresamos a casa—.
—Si ya extraño a mis traviesos—. Sonrió.
—Yo también los extraño sobre todo a mi princesa—. Sonríe.
—Nuestra pequeña traviesa—. Isis me sacara canas de todos los colores lo sé…
Llegamos a media luna bajamos y entramos a la casa.
—Eu estaba esperando por você (Los estaba esperando)—. Dice Maicon. —Junte-se a nós para jantar (Acompáñenos a cenar)—.
—Obrigado estoy morrendo de fome (Gracias muero de hambre)—. Le dice Emily, me encanta escucharla hablar en portugués.
Nos sentamos a cenar menos Semyazza, los demonios no comen solo se alimentan de las miserias de los demás y con ello no lo menosprecio.
Le comentamos a Maicon todo lo que pasó, Emily confía en él así que no hay problema, supongo que ella vio su corazón y no hayo mal en él.
Al terminar de cenar subimos a la habitación a descansar, o era lo que pensé hasta que la vi salir con esa pijama sexy y me abalance sobre ella.
—Espero no haber hecho otro hijo en un país que no es el mío—. Digo mas que agotado.
—Eso no pasará Darían, me estoy cuidando—. Adrián gruñe, pero estamos consiente que este no es tiempo para tener un hijo.
Coloca su cabeza en mi pecho y queda dormida, jamás la cambiaría por nadie ni nada, ella y mis hijos son lo mas hermoso que tengo en mi vida.
Si me dieran a elegir la elijo a ella por sobre toda las cosas. Acarició su cabello y quedó dormido.
Día siguiente.
Nos despedimos del alpha Maicon que nos trajo hasta el aeropuerto. Subimos al Jet, me siento al lado de mi luna quien no tiene buena pinta, estar lejos de los niños la pone triste o tal vez sea otra cosa…
Narrador omnisciente.
Mientras la Luna Suprema y Alpha Supremo iban de regreso a Luna Dorada, Él caballero de la noche se preparaban para el siguiente ataque.
—Quiero a todos listo para el ataque, aún no se que manada pagará las consecuencias, pero los quiero listo para cruzar el portal —. Dijo Damiel este sería su segundo ataque.
—Amor puedo acompañarte—. La bruja se le guindo al cuello.
—No, te he dicho que no, cuantas veces te lo tengo que repetir—. Le grito. —Prepárate con las demás brujas dentro de poco atacaremos luna dorada—. Con eso dio media vuelta y se alejó.
—Que te he dicho hija—. La regaño su padre. —Los hombres como ese lobo tienen mucho poder, solo espera con paciencia pronto seremos los Reyes del mundo sobrenatural —. Sonrió el hechicero de magia oscura.
—Esta bien padre deberías ir tu también—.
—No, tengo que prepararme para cuando sea mi turno—.
La bruja salió rumbo a la cabaña donde estaban las otras cinco brujas, aún tenían que enseñarle a la bruja de magia amarilla, ella apenas estaba aprendiendo cuando fue secuestrada por él caballero de la noche.
Damiel se organizaba con los que irían con él, ya tenía a la manda escogida esta sería Luna creciente, solo tiene novecientos cincuenta y nueve años fundada como manada.
Todos se preparaban para cruzar él portal que había creado el hechicero Skyrim junto a uno de sus aprendiz. Empezaron la marcha y cruzaron de cinco en cinco el portal a luna creciente.
Este portal tenía la salida a uno de los extremos de la manada, ningún guerrero vería la llegada de estos hombres ya que su esencia y presencia estaba camuflada con sangre de animal salvaje.
Aquellos hombres fueron tomando su lugar en cada extremo hasta que llegó su líder. Con solo un movimiento de cabeza empezaron a decapitar a los guerreros que estaban de guardia en la noche, mientras que en el mundo de los muertos empezaban a llegar las almas.
Abu Yaria se comunicó inmediatamente con Emily, le comento lo que estaba pasando en el mundo de los muertos, ya habían más de doscientos hombres muertos. Damiel no tenía contemplación de nadie, niños y mujeres perdían la vida.
Ellos utilizaban armas de plata envenenadas con raíces que eran letales para los licántropos, al igual que las armas de filo estaban envenenadas, no importaba el tipo de armas que ellos utilizarán todos estaban bañadas en veneno, la muerte de los licántropos era rápida y dolorosa.
Sus manos estaban bañada de sangre inocente. Y eso era como un llamado para la demonía, esa fue la razón por la que ella pudo llegar a tiempo antes de que más personas fueran masacradas.
Su ser estaba eufórico como nunca lo había estado antes, ella llegó junto al alpha Supremo y trecientos demonios más y con ellos el rey del inframundo.
Estaban listos para dar batalla a quien fuera ese ser, la sangre le hervía como nunca la había sentido.
Narra Darían.
Después de aterrizar en el aeropuerto subimos al auto, Emily se le veía inquieta.
—Amor todo está bien—. Me miro con sus ojos negros totalmente algo no andaba bien.
—No lo sientes—. Negué.
—No que es lo que sientes—.
—Muchos están sufriendo—. Sus ojos tomaron un color fuego, era como si se hubieran prendidos en llamas.
Tome su mano eso fue como sentir el sufrimiento en carne propia, ella sentía eso, estaba sufriendo al igual que nuestra gente, no se por que no lo sentí como hace días atrás. Tal vez lo sentí por qué estaba junto a ella, claro la estaba abrazando. Sus ojos se tornaron blancos.
—Dime Abu Yaria—. Escuchaba sus pensamientos.
—Mi niña muchos están llegando al mundo de los muertos, estos son de la manada Luna Creciente—.
—Maldito cobarde—. Dije al ver mucha gente, podía ver lo que mi demonía veía.
—Gracias—. Dijo mi luna cortando el link.
—Padre te necesito lleva los demonios que puedas—. Abrió otro link con Daimon.
—¿A donde?
—A la manada Luna Creciente yo iré con Darían y Semyazza —. Me sorprendí escucharla decir eso.
—Nos vemos allá—. Con eso cortaron el link.
—Como llegaremos allá eso está en Venezuela—. La vi sonreír.
—Amor no subestimes mi poder aún no los he probado todos pero de que llegamos con ese cobarde lo hacemos—. Miro a Semyazza, él le hizo un asentamiento de cabeza. –No te sueltes de Semyazza ni de mi o quedaras perdido en el limbo—. Puse mi mano en el hombro de Semyazza y la tome de la mano. —No había hecho esto aún pero la situación lo amerita, podría ser inestable y podríamos quedar en algún lugar que no sea pero es hora de ver que tanto he avanzado en mis entrenamientos—. Dijo y no pude evitar tragar grueso, no es que no confíe.
—Lo harás bien princesa—. La alentó Semyazza, voy tener cuidado con ese demonio.
Una esfera de energía nos envolvió, su ojos se tornaron en un rojo con destellos violetas. En un parpadeo quedamos en la manada luna creciente.
—Después de todo funcionó, necesito alimentarme para recobrar energías—. Sus ojos seguían igual.
—Alpha Supremo—. Uno de los guerreros se acercó a nosotros estaba más muerto que vivo. —Nuestro alpha y luna murieron—. No pude evitar dejar salir mis garras. Adrián y yo fuimos uno solo, vi como mi luna dejaba de ser la mujer hermosa para convertirse en la demonía, podía sentir la energía que emanaba su cuerpo, era una mezcla de energía blanca y oscura.—Es hora de hacerlos pagar—. Dijo ella con unos especies de nudillos de púa y unas navajas al final. —Estos son para ti mi amor—. Me extendió unos igual a los de ella pero sin la púas.Daimon llegó con los demonios estaba en su forma demonio, su presencia denotaba entre los demás demonio, menos en Emily su poder se comparaba con el suyo.—Es hora de la diversión —. Comentó uno de los demonios.Empecé a caminar en dirección donde estaban los guerreros que aún luchaban contra los cazadores, licántropos y brujas, a cada paso que daba habían cuerpos.Uno de los cazadores se abalanzó sobre mi de un movimiento le corte el cuello con el ar
Narra Emily. —¿Mami te irás nuevamente? —. Me pregunta mi princesita. —Si mi amor mamá tiene que ver como están los demás—. —Puedo ir contigo—. Sonrió. —No amor no puedo arriesgarlos a ustedes—. —Yo puedo ayudar —. Sonrió y la tomo en brazos. —Aún no mi vida, eres una bebé y mamá y papá se morirían si algo te sucede—. Le digo. —Yo tamién teno miedo de pedete mami—. —Oh mi amor yo lo sé pero papi y mami son como los soberanos de todos los lobos y tenemos que protegerlo—. —¿Protégelo de que mami? —De muchas cosas malas que suceden y están sucediendo, en este momento no entiendes pero lo harás mi amor—. —Te quiedo mami—. —Y yo a ti monstruita traviesa—. Bajo con ella en brazo y la llevo con los otros. Tengo que hablar con Roberto para que me traiga a mi hijo, no pienso dejarlo por allá menos con estos ataques deliberados. Voy al despacho de Darían, creo que esta en una reunión. —Todo esto es obra de los demonios—. Es lo primero que escucho al entrar. Ese alpha Damián me t
—Si, podría ser ¿cuántos Alphas se le han unido?—Unos cincuenta—.—Él necesita que todos ellos estén a nivel de sus lacayos—.—Si, pero los Alphas y betas no necesitan tanto de ello—. Dice Darían.—Cierto, tú crees que ellos ataquen a los de su propia especie, aunque pensándolo bien ese cobarde huele a ustedes—.—Quieres decir que él es un licántropo—. Asiento. —Pueda que pertenezca a una manada, él tiene una mezcla de olores—.—Si, pero solo la utiliza para camuflajar su verdadera esencia y la que predomina es la de los licántropos—.—Es un maldito cobarde—. Gruñe Adrián.—Tranquilo mi lobito te prometo que daremos con él—. Sonrió.Toda la tarde nos la pasamos estudiando los puntos que él ha atacado, para ver si así podemos ver en qué punto lo podremos encontrar tal vez este siguiendo un patrón.El alquerre Blackadder ya no está donde se encontraba antes y eso se debe a que el hechicero lo movió y escondió su esencia.Ya en la noche siente el olor de mi bebé, aunque tenga trece sigu
—Sabes que iré, quiero ver de qué es capaz esa demonía—.—Me gustaría saber si tu hija ya está lista con lo que le pedí—.—Piensas que no podremos contra ellos—.—Como dijiste no debemos subestimar a nadie y si algo sale mal quiero tener todo listo para mi regreso—.—Yo le tengo una sorpresa a esa demonía —. Susurro el hechicero.—Están todos preparados para el ataque de esta noche —. Pregunto Damiel acercándose a sus hombres.—Dónde atacaran esta vez—. Pregunto uno de los Alphas.—Eso lo sabrán cuando lleguemos a nuestro destino—. Dijo con media sonrisa.No se arriesgaría a que uno de ellos alertara al Alpha Supremo. Al caer la noche todos agarraron sus armas y se formaron para que les pusieran el hechizó.Empezaron a cruzar el portal, sin imaginar que del otro lado estaban preparados para luchar.Al estar todos formados, se dio la orden de atacar, se suponía que los tomarían por sorpresa.—Maten a todos, no quiero que nadie quede con vida—. Dijo Damiel.Al escuchar la orden empezaro
Desapareció ante los ojos de Darían y apareció delante del hechicero. —En verdad creíste que estaba bajo tu hechizo Skyrim —. El semblante del hechicero cambio. —No hay ningún hechizo de posesión o control que pueda contra mi—. Sonrió, haciendo aparecer otro par de navajas. —¿Como pudo ser eso posible? —Simple hechicero soy un ser de oscuridad, no existe poder que pueda controlar a un demonio—. Apareció delante del hechicero enterrándole una navaja por el costado. —Tu m*****a demonio me engañaste—. —Maldíceme todo lo que quieras, pero hoy devorare tu alma—. El hechicero con un movimiento de su mano hizo aparecer un rayo, con este le dio en el pecho a la demonía. —No te la voy a poner tan fácil demonía, yo también tengo mis trucos —. —Seguro que si hechicero, pero yo tengo más que tú —. Sonrió. En sus manos aparecieron unas bolas de fuego con rayos, se las lanzó una y otra vez al hechicero algunas lograron darle. —Acaben con esa demonía —. Dijo Damiel ya cansado de ver todo a
Narrador omnisciente. Mientras Emily se desplazó, él hechicero apareció cubierto de fuego en todo su cuerpo, algunos corrieron a socorrerlo, pensó poder controlar aquella demonía más no sé imagino que ella se burlaría de él.Eso había sido una falta hacía él, su cuerpo dolía, más sanaba lentamente.—Te voy a cazar demonía—. Susurro.Horas después entró Damiel por el portal, su cuerpo ensangrentado y con algunas heridas que aún no sanaban.Quería no solo al Alpha a sus pies quería a esa demonía también.—¡Mi amor! —. Chilló la bruja al verlo.—¡Vete! —. Le respondió. —No cúrame—. Le dijo.Sus heridas no curaban tan rápido, el Alpha lo había lastimado mucho.—Las brujas ya están listas mi amor —. Dijo ella feliz.—En unos días empezaré todo, todo será como debía ser—. Sonrió. —Prepárate demonía ni siquiera tu padre Luzbel podrá ayudarte, querrás morir—. Dijo con sus ojos rojos. —No vas a echar a perder otro de mis planes, si no puedo matar al Alpha ahora de adulto lo haré en otra époc
—Dentro de ti habita el poder para ello, tu sabrás que hacer, así como Abu Yaria te otorgo el don de quitar la vida yo te otorgue el don de devolverla—. La miro perpleja, si sabía que tenía el don de quitar la vida, así como lo hice con Josué, no tengo necesidad de pelear con nadie si quiero quitarle la vida a alguien, pero ahora devolver vida.—Yo tengo el don de devolver la vida—. Miro a Roberto quien tiene un semblante pálido, su rostro se ve demacrado, escucho como su corazón se esfuerza por seguir latiendo.Me levanto del piso como si estuviera hipnotizada, al sentir sus últimos latidos, paso mis dedos por su pecho desnudo donde están las heridas, el veneno ya casi llega a su corazón, miro mi otra mano, veo todo blanco creo que mis ojos están en blanco, siento como de mis dos dedos medios salen como unas agujas largas o cables talvez, parpadeo las agujas son largas, las introduzco por la herida, estas se introducen hasta llegar a las venas principales que llevan la sangre al cora
—Eres un ser de luz y oscuridad, puedes controlar el bien y el mal—. Dice papá. —Ahora puedes quitar vidas y devolverlas —. —Si, pero es solo a las personas que en verdad se lo merezcan y claro solo aquellos que no era su tiempo de morir—. —Todo se están recuperando con éxito—. Me dice Darían. —Voy con los niños deben estar preocupados—. —Está bien mi luna dentro de unas horas voy con ustedes—. —Está bien, pero antes—. Hago aparecer ropa para que se cambie. Me convierto en humana nuevamente y me desplazo al refugio. Al día siguiente me levanto, rodeada de mis hijos y Darían. —¿Como esta todo? —Mucho mejor amor, te agradezco todo lo has que hecho por mí gente, a pesar del desprecio que algunos te tienen—. —Hare todo por ustedes, son mi gente también —. Lo beso. —¿Mami mi papá? —. Pregunta Maikel. —Está bien amor, dentro de unas horas él vendrá—. —Lo hirieron verdad —. —Si mi amor, pero él está bien no te preocupes—. Después de desayunar vamos a ver los daños causados por e