Antes de ingresar en el cuarto uno de los empleados del hombre la reviso en búsqueda de armas, que hombres tan tontos, pensó, si una enfermera quisiera asesinar un paciente no necesitaría de armas para eso. Al entrar a la misma noto como esta estaba decorada con flores y globos por todas partes muy diferente al resto de los cuartos, el dinero era capaz de mover montañas.Se trataba de una mujer en extremo joven incluso más que sus propias hijas, estaba claro que Harry era contemporáneo con ella, pero a las muchachas de estos tiempos solo les importa las cuentas bancarias, la misma, adorno todo a su alrededor como una gran sonrisa.—Buenos días, soy Madison tu enfermera personal ¿Y tú cómo te llamas? —Se presentó la mujer con buena disposición.—Soy Lindsay, un placer —Respondió ella mirando de reojo a Harry.—Hoy trabajaremos juntas, voy a leer un momento tu historia médica —Dijo ella tomándola de la orilla de la cama.Allí se percató que la misma tenía problemas graves de adicción po
El teléfono no para de sonar mientras ella lo mira fijamente, no desea contestar, sabe que es una de esas que se hacen pasar por sus amigas y que solo desea molestar, es tan difícil encontrar personas honestas cuando perteneces a las altas esferas, como si ser envidioso, traicionero y mala personas fueran requisitos indispensables para tener relación con personas importantes.Esto última era entendible ya que a nadie le gustaba que le dijeran la verdad menos cuando saben que no tienen razón, por ello compran la complacencia de los demás, tener un público a su alrededor que constantemente les aplauda y recuerde lo buenos que son, unos tontos payasos que con adulaciones falsas logran su cometido.Millonarios que, así como iban inflando sus cuentas bancarias también lo hacían con sus enormes egos que luego no entraban ni en la misma habitación en la que ellos se encontraban por grande que fuera. Esa no era la excepción de Harry quien siempre se dio el lujo de manejar la vida de otros a s
Ella se fue con rapidez al baño y mientras dejaba salir su rabia se aseaba, seco su cabello y lo arreglo con la rulera, se maquillo de forma exquisita colocándose ese vestido verde que va en sintonía con sus ojos. Salió de la habitación y fue directo hacia el chofer con el que en ocasiones se divertía esta vez de forma incluso más cortante en la discreción de su alcoba.—Buenos días, quiero que me lleve a la clínica donde se encuentra Lindsay —Mando con una pequeña sonrisa.—Señora, no creo que eso sea bueno —Tartamudeo el hombre solo de verla.Era tan despampanante que no podía creer que le permitía jugar con su precioso cuerpo de vez en cuando, aun con su juicio nublado se percató que la petición de ella no era del todo buena.—Pienso llevarle esto para que se anime y ver como se encuentra, hay que darle ánimos para que se mejore —Mintió la mujer mostrándole un cupcake que tomo antes de salir de la casa.—Bueno si usted insiste, está bien —Cedió este sin poder soportar la mirada de
Una realidad ingreso en su mundo aparentemente tan diferente del de los demás, tantos años acarreando las culpas de sus propias acciones a otros y hoy simplemente abrió los ojos a la verdad, si ese hombre le dijo que se quedara en cada una de las ocasiones en las que ella había decidido irse. Pero la palabra final siempre fue de ella.Su vida era tan poco relevante no por las mujeres con las que solía pasar el tiempo sino porque ella se conformó con lo poco que este varón podía otorgarle sin pensar en que algo mejor pudiera estar afuera esperándola, con miedo de quedar sola, sin querer afrontar las quejas de su madre.Vivir para complacer a otros sin dedicar al menos un corto tiempo para meditar que se deseó, el resumen perfecto de su pobre existencia, aun así, su odio traspaso fronteras y se acumuló únicamente en la imagen de Harry, es más sencillo simplemente odiar a otro que a uno mismo.—¿Cuánto tiempo llevas en una relación con Harry? —Preguntó la joven al ver que su interlocutor
—Me refiero a ti y a Harry —Gritó Sofía sin paciencia.—Ese es tu problema, esperas las reacciones de los demás para tu tomar decisiones ¿Qué te puede afectar a ti si él y yo hacemos algo? O crees que si me voy el volverá a ser lindo contigo, eres un poco más ilusa de lo que pensé —Se burló Lindsay de forma abrupta.—¿Te crees mejor que yo cierto? —Habló ella en tono de reto.—La verdad no creo que nadie sea superior a otro por eso somos humanos imperfectos, lo que pienso es que cada quien debe tomar sus decisiones sin esperar la aprobación de los demás —Comentó volviendo a reclinarse en la cama.Este último comentario le impacto, es como si la joven pudiera leer sus pensamientos, le molestaba tanto que estuviera en lo cierto ¿De verdad era iluso pensar que sin la presencia de una mujer el hombre la extrañaría y al menos por un tiempo seria lindo con ella? Paradigmas que se rompían, mismos que sustentaban la vida que tenía en ese momento.—Pero si de verdad quieres saber lo que pienso
Muchas cosas habían salido de la boca de este hombre durante los años, ya ni recordaba cuando fue la primera vez que le insultaba, este tenía muy mal humor y cada que ella le indicaba que no se encontraba en lo cierto este enloquecía por completo hasta el punto de retirarse incluso evitando un mayor enfrentamiento, porque del que siempre se ha cuidado es de los maltratos físicos.Muy hábil de su parte ya que, en este país, aunque se reconoce que hay un maltrato psicológico que impacta de forma negativa en la psiquis de una mujer no es penalizado en ningún sentido, es decir, que ningún proceso legal se acelera al momento de indicar que se trata de estas razones, solo te comentan sobre los sitios de apoyo a los que puedes ir y ya.El día de hoy sin embargo marca un antes y un después en su vida, este hombre está escalando y ya se está atreviendo incluso a amenazarla en público ¿Qué más le hace falta ver para darse cuenta de lo peligroso que es quedarse en este lugar? Al parecer es capaz
No estaba seguro si ella conocía la conexión entre ese accidente y Lindsay, pero sin duda era peligroso que expusiera esos datos sin ningún tipo de cuidado, mientras las personas más saben de ti, más poder se les entrega en la palma de sus manos.—Eso fue un accidente, no entiendo porque lo sacas a la luz ahora —Susurró este mirando en todas direcciones.—Y las desapariciones de varias de tus novias, justo después de discusiones o al momento que me dijeron que abandonarían la mansión ¿Eso también son simplemente casualidades? —Replicó ella cruzando sus brazos.—No tengo ni idea de lo que estás hablando, no tienes pruebas de que les hubiese hecho algo, ellas simplemente se fueron y ya, yo soy un hombre estricto y no se adaptaron a mis reglas, querían seguir viviendo sus vidas alocadas con estupefacientes, alcohol y sexo con diferentes personas, obvio no lo podía permitir —Se excusaba este mientras un sudor frio recorría su frente.—Imagino que por eso buscas jóvenes adictas y que dediq
Un vacío inexplicable embargaba su corazón, con los años y las desilusiones el hombre de negocios se hacía más frio cada vez, sin que esto le afectase en absoluto, usando el hecho de ganar dinero como un juego bastante competitivo que no se daría el lujo de perder. Como invertir el dinero, ahorrarlo y hasta mantenerlo se trataba a sus ojos de un arte que logro manipular a la perfección.Las joyas, los autos de lujo, las obras de arte y las propiedades, son bienes que le gusta atesorar tanto por el hecho de subir su estatus y mostrarle al mundo lo fantástico, su buen gusto, su renombre y que contaba con unos cuantos ceros en su cuenta bancaria. No se trataba de cosas que quisiera atesorar de por vida sino inversiones liquidas que en caso de ser requeridas se venderían con facilidad.Incluso se atrevió a vender un auto deportivo al doble de su valor original solo porque él había sido el dueño, un mundo de cálculos, de estadísticas, proyecciones, balanzas por el que apostaba y que podía