No tenía idea de que había pasado solo se que sentía el cuerpo entumecido y mi garganta seca, me dolían cada parte de mis músculos era horrible, era como si había dormido más de una semana me pare tenía una bata ¿pero que había pasado porque tenía una bata de hospital? —reacciona, laila nos necesita—La voz de Gabriel golpeó mi cabeza volví en sí y di pasos mientras tambaleaba para no caerme —¡que mierda!—Llegue hasta la puerta la cual abrí y salí empecé a caminar más rápido mi corazón latía fuertemente algo le pasaba a mi loba y mi lobo se removió con fuerza dentro de mi—señor Arturo es un milagro que haya despertado pero ¿a donde va? acaba de despertar necesita descanso——¡apártense!—Dije con voz más ronca que antes —no podemos permitir que salga de aquí sin autoridad del alfa Deimon—Los mire con mis ojos inyectados en negro y gruñi apreté mis dientes y les volví hablar —apártense o los asesino uno por uno—Sin titubear y nerviosos los lobos se apartaron de mi camino y abrí
—Arturo debes entender que como padre solo quise proteger a laila—Lo mire y me levante de la silla eran las siete de la mañana —no me importa cuales hayan sido tus intensiones Kevin, ahora con permiso iré a ver a laila me daré una ducha y volveré aquí necesito empezar mis entrenamientos espero esté listo—Le di un beso a mi madre en la frente y salí de la cocina dejando a todos confundidos y más a Kevin quien lucia arrepentido pero su sobreprotección solo pudo haber provocado una desgracia.Subí las escaleras caminé lentamente y entré a mi cuarto ahí vi a laila en su forma humana por suerte la manta la tapaba y no pude ver su desnudez, me senté a su lado y pase mi mano por su cabeza pero no despertó a lo que caminé hacia el baño y me di una ducha con agua helada lo necesitaba, salí y seque mi cabello con una toalla mientras otra estaba en mi cintura, mis pies estaban descalzos y secaba mi cabello pude ver cómo laila empezó a moverse así que caminé y me senté en la cama a su lado cua
—vamos, ya basta de charlas es hora de entrenar—Vi a mi hermano entrar otra vez al despacho y el doctor detrás de él —Arturo podrías tan siquiera decirnos que te dijo el doctor——viene detrás mío pregúntale a él—Mi papá pasó su mano por su cara algo frustrado por la actitud de mi hermano —si, bueno alfa Deimon Arturo se encuentra en muy buen estado, puede irse a entrenar así podemos ver cómo ha evolucionado su cuerpo y si no presenta daños secundarios, cabe destacar que esa flor es altamente venenosa——gracias Doctor, Kevin, naim es hora, por favor asegúrense de darle un entrenamiento no tan estricto—Arturo soltó una carcajada no lo había notado pero su voz sonó mas aguda podría jurar que su cara se veía más adulta —papá por favor ¿me tienes lastima? No me importa si duele o si se rompen mis huesos voy a ser un alfa incluso más fuerte que tú, los espero en el campo de batalla y no tarden—Arturo salió sin esperar respuesta de parte de nadie todos nos miramos pude ver la cara de
—Laila ¿podrías llevarle esto a tu padre? hicimos bastante y se que ha estado entrenando a Arturo lleva para todos—Laila bufo estaba preparando unas galletas junto a Abril —madre estoy haciendo galletas con la señora Abril-—nada de señora laila, me haces sentir en edad ve y haz lo que dice tú madre luego tú y yo seguimos—Le dijo abril con un tono suave y delicado le tenía mucho aprecio a laila —lo siento es la costumbre—Abril le sonrió y le prepararon una canasta junto a las cosas que ella llevaría al campo de batalla como le decían ellos pero solo era el campo de entrenamiento, laila tomó la canasta y dijo que regresaría en seguida salió por la puerta la cual fue abierta por los guardias y camino hacia su padre y Arturo, mientras caminaba unos que otros lobos la miraban con lujuria, la verdad es que laila era sumamente hermosa tenía cabello que bajaba en su espalda y su figura era atlética de una estatura no tan pequeña aunque comparada con Arturo pues si lo era. Mientras camin
Había pasado media hora desde que Akira estaba en mi habitación, en mi cama para ser exacto, no había dejado de mirarla, aún no me creía que ella era mía. Seguía desnuda entre las sábanas con la que cubrí su hermosa figura acariciaba sutilmente su cabeza y di un beso en su frente eran al rededor de las tres de la tarde.Lentamente fue abriendo sus ojos y estiró sus brazos —¡mmmm! Siento como si me han quitado un peso de encima—La bese suavemente sonriendo en sus labios —te dije que te tenía una sorpresa quiero que vayamos antes de que sea más tarde—Ella frunció el ceño —¿no era esta la sorpresa?—Reí a carcajadas Akira era tan inocente al hablar —solo quise hacerte feliz, ahora vístete y vamos pero es una cita a escondida nadie más que nosotros debe saberlo—Ella miró hacia el reloj en la pared y luego me miró y sonrió —podrías taparte—La mire sin entender hasta que la vi cubrirse con la sabana hasta la frente—jajajaja, Akira no tienes porque tener pena conmigo aunque no lo h
—alfa Deimon como usted podría ver, necesitamos alojamiento, muchos de mi manada están enfermos y necesitan ser curados, el hambre a atacado no queríamos molestar pero cada día qué pasa es un lobo muerto, nuestras crías están delgadas sus músculos no tienen la suficiente fuerzas, por eso le pido ayuda, ya se lo bondadoso que es usted y esta manada por eso siempre tienen abundancia y prosperidad se dice que su esposa es una humana que ha sabido edificar la manada, todos estamos sorprendidos de tal milagro que le concedió la diosa, de que usted haya tenido una humana como esposa pensábamos que era imposible pero es algo asombroso—Deimon se quedó pensativo mientras Eliot le hablaba y le trataba de convencer para poder pertenecer a la manada y le den alojamiento, lo que menos le gustaba a Deimon era poner en peligro su manada pero no habían informes que dejarán al descubierto a Eliot o alguna evidencia que lo vinculara como una persona de temer —se que está decisión es difícil, para ust
—¡amor!—Exclamé mientras naim conducía con su mirada fija en la carretera —ya estamos cerca, estás muy ansiosa preciosa—Me dijo y tomó mi mano y empezó a repartir besos en ella—me duele la espalda——porque no te recuestas un momento——porque no, quiero ver el camino hacía donde nos dirigimos, nunca antes había estado por aquí——porque hace siglos este camino dejó de existir—Lo mire pero no seguí hablando él mantenía mi mano enlazada a la de él mientras conducía con su otra mano luego de unos treinta minutos empezamos a entrar por un bosque, la carretera pasó a ser de tierra y algunas piedras pequeñas hacían que empezáramos sa dar saltitos en nuestros asientos empecé a mirar a mi alrededor era un bosque muy grande y frondoso daba un poco de escalofríos, era como un bosque de un libro de terror —¿no te da miedo?—Le pregunté cosa que le provoco una carcajada —amor, si le tuviera miedo a algo ya no estaría vivo, a lo único que le tengo miedo...—Detuvo el auto y se quitó el cintur
—¡laila!— —ahora no madre—Arturo volteo su cabeza al escuchar como laila lo llamó, la chica del servicio casi cae cuando ella por su ira y sus celos la empujó sin darse cuenta —¿que sucede?—Dijo Arturo haciéndose el desentendido pero sabía muy bien que lo que había hecho fue a propósito —lo haces para molestarme ¿cierto?—Replicó ella enojada muy enojada y a la vez celosa su lado salvaje había despertado pero después de aquel suceso más nunca se había presentado ante ella y no era como que ella recordara lo que había pasado —¿de que hablas laila? ¿que hice?—Todos miraban la escena de de ambos, una pareja muy explosiva sin lugar a dudas, laila se había acercado lo suficiente a Arturo mientras lo miraba fijamente —¿laila estás bien?—Le pregunto él con una pequeña sonrisa provocando que ella se enoje más, sabía que ya la tenía en sus manos y ella tenía que pagarle algunas de las humillaciones que le había hecho —eres un estupido, Arturo—El sonrió sin poder evitarlo al verla ta