NAIM:

Toda la esperanza que tenía de que un día kevin iba aparecer desvaneció tenia el alma rota, de golpe me llegó Akira a la cabeza y lo mucho que la extraño, tenía una tormenta de emociones juntas que me hacían sentir temblar el corazón, mi estómago estaba desecho no podía caer en el ni agua me sentía como un lobo cuando se echa a morir.

Estaba en mi cuarto el que era de Akira lo había tomado para mi mirando hacia el techo recordando cada momento vivido con Kevin y recordando que siempre ha estado ahí para mi, lágrimas empezaron a correr por mi rostro nuevamente, la manada estaba en silencio no había más sonido que el de las aves y los insectos no había una forma de mejorarme de este dolor o si la había pero estaba en un templo

—Akira te amo pero estoy sufriendo y mucho—

Coloqué una almohada en mi cara y ahí lloré tratando de botar parte de mi tristeza pero solo hacía que doliera más, Kevin mi amigo, mi compañero Akira mi mujer y la razón de ser lo que hoy en día soy, uno ya no es