—eres tan hermosa—Gabriel la miraba intensamente y recorrió todo el cuerpo de laila quien no lo mostraba, no era la típica chica de usar ropas mostrando todo, más bien siempre andaba en jean camisetas pero tenía una pijama dejando ver sus pequeños pechos y su diminuta cintura provocando que él pase su legua por sus gruesos labios resecos mientras en su cabeza salvaje pasaban muchas imágenes de laila y no solo sexuales, él sentía el terror de laila y eso lo hacía sentirse mejor tenía el control de la situación, cómo él quería.—voy a quitar mi mano de tu boca y no vas a gritar ¿entendido?—Laila movió su cabeza dándole entender que sí y este despego su mano lentamente, Arturo tenía una batalla interna con su lado salvaje no podía tener el control pero no se iba a dar por vencido, era un tipo de mal carácter pero no iba a tratar a laila menos que una dama y no se iba a permitir que su primera experiencia sexual o de su marca que era algo íntimo su salvajismo lo arruine.Gabriel miraba
—eres totalmente inútil—Arturo corría por el bosque a gran velocidad esquivando rocas y ramas estaba muy furioso le indignaba no poder controlar a Gabriel del todo, la bestia que había dentro de él y lo hacía sentir inútil—¿podrías callarte ya? Tú voz en mi cabeza me exaspera—Dijo Arturo frenado de golpe, cualquiera que lo viera hablándose a si mismo diría que estaba loco y mas por su forma tan violenta de gritarse a si mismo —eres débil Arturo, si no hago yo las cosas nunca las harás por ti mismo——¿acaso olvidas que somos la misma persona bestia estupida?—Su bestia empezó a gruñirse a si mismo en desacuerdo con Arturo no entendía porque el era tan débil y no le hacía caso en cuestión de cómo tratar a laila pero Arturo sabía que si le hacía caso a él solo lo alejaría más y eso era algo que no se perdonaría y menos después de llegar a su etapa donde su lado salvaje había despertado, sabía que en un momento a él llegaría el celo y no iba a permitirse no estar con ella para cuando
—aún no puedo creer que yo haya provocado tanto terror el la manada anoche y más a laila, no me explico qué pasó, se suponía que yo debería ser un lobo normal no esta...—Tome una pausa antes de decir lo ultimo porque me afectó—esta bestia tan terrible hermanita—Mire a mi hermana mirarme con pena cosa que detesto, me hace sentir débil y eso no soy, yo seré un alfa y los alfa no nos debemos sentir mal ni hacer que otros nos hagan sentir débil.—no me mires con esa cara Akira sabes que lo odio-Me pare indignado de la cama y eche mi pelo hacia atrás con frustración —papá nos contó que el también carga esa misma bestia que tú recuérdalo——ya lo sé—Grité molesto sabía muy bien la historia de papá, pero era consciente de que él solo era por ira en abundancia sin embargo yo soy así, no soy un lindo lobo de color negro con pelaje suave soy una bestia terrorífica que pensándolo bien no está mal pero por otro lado no quiero asustar a mi loba.—no es lo mismo Akira y lo sabes——solo no quie
—no te acerques—Le grité a naim al ver que venía hacia mi hermana rápidamente, se que es su mate pero me sentía tan vulnerable al verla llorando y con el corazón destrozado sentíamos prácticamente lo mismo y su dolor también era el mío.—tú no eres quien para decirme que no puedo acercarme a ella Arturo, no me importa que seas el próximo alfa o que tengas la bestia que carga Deimon dentro de ti... ella es MÍA—Gruñó su lobo inquieto el cual miró a Arturo con ojos muy abiertos de color miel, Arturo se indignó y fue hasta naim con intención de pegarle cosa que provocó que todos se alarmaran y corrieran hasta ellos para que no se formara una pelea pero fue tarde Arturo le pegó a naim con el puño cerrado partiéndole el labio inferior y naim le pegó por el estómago Abril se alarmó y empezó a gritar mientras que kevin y Deimon trataban de despegarlos pero era imposible laila empezó a sentir ira al ver cómo ambos peleaban y al ver cómo a su lobo naim le pegaba, esta respiraba rápidamente y
Narra Arturo:—no soporto a ese beta—Vi a mi mamá acercarse a mi y colocarme una de sus manos en el mentón y con la otra apretó una de mis orejas —¿que es ese comportamiento jovencito? ¿Sabes todo lo que ha hecho naim por nosotros? hoy somos libres gracias a él y tú le debes guardar respeto, que no se te olvide que tú iniciaste la pelea—No me dolía lo que mamá me hacía pero provocaba vergüenza en mi más después de ver cómo entraron linda y laila y mi mamá nada de soltarme la oreja la cual supongo tiene que a de estar roja—aggh! lo siento linda y laila estoy dándole modales a nuestro fututo alfa—Dijo mi mamá muy tranquila, linda sonrió pero laila me observaba podría decir que ¿con tristeza? Y dio pasos hacia mi haciendo que mi mamá retrocediera y su mamá se sorprendiera—eres un tonto, mira como aún tienes moretones por nunca controlar tu ira, nunca aprenderás Arturo-Me gritó, mis ojos se agrandaron esa no era la chica que no me quería cerca de ella que estaba haciendo esto esa e
Llegue a casa al fin, baje del vehículo rápidamente y tomé mis pertenencias, agarre el teléfono y lo primero que veo son por lo menos veinte llamadas de mi preciosa Akira me asuste un poco pero me puse feliz eso significa que ya despertó ahora con más rapidez corrí para la casa, le lancé las llaves a uno de los lobos que cuidan la entrada.—llévala al garaje—Y le guiñe un ojo abrí la puerta y al entrar veo a deimon quien viene bajando las escaleras y me mira con ¿ira? ¿Ahora que hice? me pregunte internamente así que le pregunté—¿ahora que?—Este me dio una sonrisa un tanto espeluznante ni los años le quitaban esa malicia que llevaba dentro—¿donde andabas naim?—No quería decirle donde estaba, pues no quería que me volviera a decir que no me podía llevar a akira de aquí pero tampoco podía mentirle deimon es mi mejor amigo y siempre nos decimos la verdad aunque cueste—estaba en el viejo bosque donde se encontraba mi manada—Deimon alzó una ceja, necesitando más respuestas a los que
Toc toc —se que estás ahí laila ábreme la puerta— Escuche mi puerta ser tocada por Arturo me quede en la cama me sentía tan molesta aún, rechazaba a Arturo pero tenía bien claro que no sería toda la vida que llegaría ese momento donde tendría que ceder y en cierto modo no me sentía ni un poco preparada para ese momento. —ábreme o rompo la puerta, ya me conoces laila no provoques mi ira— Lo escuche decir, no me inmutaba ya conocía ese comportamiento agresivo, de la nada escuche cómo empezó a hacer un conteo regresivo y mis manos empezaron a sudar —5, 4,3,2 dos y medio— Movía el llavín hasta que me harté y caminé hacia la puerta y la abrí ahí lo vi con su brazo izquierdo posado en el marco de la puerta, sus ojos azulados me escanearon y me dio una sonrisa ladeada volteé los ojos exasperada por su manera de mirarme tan cínica y caminé hacia la cama pero este me detuvo tomándome por un brazo sin hacer presión ni dañarme —¿Qué?— Le dije de mala gana, vi como una de su cejas se alz
—akira no esto...—Escuchaba a naim gemir y me hacía sentir tan bien olvidaba mis miedos y mis inseguridades con él y cada toque que me daba hacía vibrar mi cuerpo deseaba saber que había más allá de estos besos y caricias, quería saber que se sentía ser penetrada, tal vez dolería o tal vez no.—¿por qué quieres parar?—El me miró con sus ojos adormilados mientras sostenía mis dos muñecas con sus manos sin hacer tanta presión y mis piernas se hallaban a cada lado mientras su cuerpo estaba encima mío podía sentir lo duro de su virilidad pegada a la mía.—porque aún no es tiempo Akira— Se levantó de la cama y se sentó mientras colocaba sus dos manos en su cara y echaba su cabello hacia atrás con frustración dándome la espalda, yo solo llevaba puesto el pantalón de la pijama, sentí un poco de vergüenza por cómo se separó de mi asi que me di la vuelta y hable despacio dándonos ambos la espalda las cuales se encontraban desnudas y el entorno se tornó un poco pesado e incómodo para los do