— ¿Qué has hecho, Valeria? —preguntó Silvia con voz temblorosa, su mirada perforando el alma de su hija a la cual se suponía que sí quería, pero verla firmar el divorcio le pareció que estaba siendo una total boba.Valeria levantó la mirada para encontrarse con los ojos llenos de reproche de su madre, siempre se había esforzado por darle gusto en todo, pero esta vez sabía que toda la furia caería sobre ella por haberse equivocado, algo que Silvia odiaba— Lo siento, mamá. Pensé que podría retenerlo a mi lado, pero me equivoqué, Adrien resultó ser un hombre muy difícil no como el resto que tan solo con mirarlos caían a mis pies —murmuró Valeria, luchando por contener las lágrimas que amenazaban con escaparse de sus ojos, pues en verdad le tenía temor a su madreValeria levantó la mirada para encontrarse con los ojos llenos de reproche de su madre. Se sintió como si fuera a desmoronarse bajo su mirada, la realidad de sus acciones pesando sobre ella como una losa.— Lo siento, mamá. Pens
Valeria la miró marcharse sin decir nada, no comprendía como su madre podía ser tan violenta y tan fría.— Eso, vete, déjame sola, así debí estar siempre, me siento tan culpable — dijo con la voz contrita antes de que pudiera abrir la puerta. Silvia se detuvo y volteó enseguida— Tú misma me corriste, no te hagas la víctima — la ofendió con descaro— Esto es lo que tú creaste, este monstruo vacío — le reprochó Valeria— Pues gracias a mí, tienes todo lo que has conseguido, así que no te quejes más, que si yo no hubiera hecho lo que hice, tú estarías trabajando como Emely, de secretaria mal pagada, y no tendrías ni el dinero ni la fama que te acompaña, así que más que reclamarme deberías agradecerme y me voy porque no estoy dispuesta a soportar tus desplantes de niñita buena, porque no lo eres y porque no te conviene— tienes razón, no eres la culpable de nada, la culpa es mía por dejarme llevar por ti, por tu rencor, por tu odio, ahora es verdad, tengo todo pero estoy muerta por dentr
Adrien sintió más alegría cuando vio que la llamada se trataba de Estéfano — Amigo, te necesito ahora, estoy tan feliz y agradecido — contó de golpe sin saludar — Lo siento, amigo, estaba algo ocupado — dijo con voz sarcástica, Adrien a lo inmediato comprendió — No, no, no me digas que — dijo Adrien entre risas — Sí, me encanta, me tiene loco, estoy en su casa, en su cuarto — contó Estéfano con la enorme confianza que le tenía a Adrien, pues al fin su deseo de estar con Ágata se había cumplido, se había enamorado rápidamente de ella, y al fin habían logrado estar juntos entregándose mutuamente, pues ese día, el hijo de Ágata se había ido de vacaciones con su abuela, así que era la ocasión perfecta para acompañarla. — Increíble, yo pensé que estaban trabajando — se burló Adrien — Lo hablaremos en persona, pero, a qué se debe tanta felicidad, ya no estás de mariquita — dijo Adrien para defenderse de la burla de su amigo — No te lo imaginas, al fin he hablado con mi madre, y aunque
— Lo siento, Adrien. De verdad lo siento. — dijo Valeria con la voz entrecortada por la tristeza y culpa que la estaban agobiando — Necesito confesarte algo y pedirte perdón por todo — agregó para que Adrien no cortara la llamada— Ajá ¿qué sucede? Qué vas a confesarme si toda tu vida es una mentira— dijo Adrien molesto, aunque en el fondo le sorprendía que esta vez Valeria no estuviera reprochándole por le divorció, pensó que podía ser una más de sus trampas— Es algo que nunca te dije sobre mi familia, lo que tanto quisiste saber — Dijo Valeria, cada palabra la deletreó con dificultad, pues la agobiaba la idea de pensar si estaba haciendo bien o mal en hablar— Todo lo que necesitaba saber sobre tu familia ya lo tengo más que claro y no tengo más que hablar contigo — le respondió Adrien con tono fuerte, no estaba dispuesto a dejarse chantajear ni manipular por ella— Ok, entonces si ya lo sabes todo, debes estar enterado que Emely no es mi hermana, y que yo le he robado su identidad
Adrien asintió con tristeza, pero sintiendo mucha esperanza en medio de todo, porque por fin estaban llegando a una salida concreta, después de tanto tiempo. Ahora solo había que actuar antes de que fuera demasiado tarde. Se acercó a Renata y la tomó suavemente del brazo, buscando transmitirle algo de consuelo en medio de la angustia que ambos estaban pasando, pero sobre todo ella que era la madre de Emely y ese dolor no podía ser comparado con nada.— Lo lograremos, Renata. No permitiremos que Silvia se salga con la suya. Debemos mantenernos fuertes por Emely, ella es nuestra prioridad en este momento, solo aprovecharemos la rendición de Valeria, quien ahora nos ha dado la información suficiente para actuar con más pruebas y hacer lo que tanto hemos deseado —dijo Adrien demostrándole confianza a Renata, ya no quería que nadie de su círculo sufriera.Renata aunque estaba angustiada por la salud de Emely, sabía que debían hacer todo lo posible por detener a Silvia y asegurarse de meter
Valeria sintió que el mundo se venía a sus pies, toda la verdad ya estaba revelada y ella ya no tenía adónde huir, por años le había ocultado a las cámaras que tenía una hermana y ahora todo se había revelado, y sabía que pronto se sabría también que ella había estado usurpando un nombre.El peso de la culpa y la preocupación la aplastaban, y cada respiración era un esfuerzo grande, se arrepintió de haberle dicho la verdad a Adrien, nunca pensó que actuaría tan rápido o que tuviera todas las pruebas necesarias ya listas para actuar así. Su mente estaba abrumada por los pensamientos de su madre en la cárcel, enfrentando las consecuencias de sus acciones.Lyon, su confidente en tantos momentos, estaba parado frente a ella con una expresión sombría en el rostro, asustado porque jamás imaginó que su amiga fuera capaz de eso, pues Valeria únicamente le había revelado su vida a Alexandrie, de ahí ante el resto ella no tenía ningún problema—Lamento ser el portador de malas noticias — dijo L
— Adrien, querido, ¡Emely está mejor! Ha salido de cuidados intensivos y ya le quitaron el respirador. Está consciente y hablando, ¡es un milagro! —exclamó Renata con alegría contenida luego de ver que por fin trasladaban a Emely a un cuarto normal, donde podrían acompañarla todo el tiempo y en donde podrían hablar de todo lo que estaba sucediendo, aunque eso también le generaba miedo pues temía su reacción cuando se enterara de quién era ella realmenteAdrien sintió un alivio inmenso al escuchar las palabras de Renata, sonrió con demasiada alegría, era como si todo lo que recientemente había pasado con Valeria y Silvia, se olvidara o ya no existiera, por fin, después de tanto sufrimiento, salía la luz,— Qué alegría más grande, todo llegó a su fin, y esto lo recordaremos solo como una pesadilla, con broche de oro cerramos todo, Renata, pues ya cada quién está en el lugar que le pertenece — respondió Adrien lleno de emoción y se despidió de ella— Estéfano, Ágata, finalmente Emely ha
Por un momento, la ira y la traición lucharon contra el amor y la comprensión en el alma de Emely, no sabía qué hacer ni como actuar, todo le había llegado de sorpresa y eran demasiadas cosas que no lograba procesar. Emely la miró con sorpresa y dolor en sus ojos. La revelación de Renata la dejó sin aliento, pero al mismo tiempo, a pesar de lo que sentía, no podía ignorar el arrepentimiento sincero en sus ojos. Ella no era nadie para juzgarla, después de todo ahora que sabía que Silvia no era su madre ni Valeria su hermana, quizá encontrar a su madre era algo bueno y su corazón noble no le permitía guardar rencor ni odio. — Te perdono, sí te perdono — murmuró con la voz baja, sintiendo que el corazón se le quebraba en mil pedazos. Renata soltó un suspiro de alivio y se volcó hacia ella para abrazarla con fuerza, ambas no pudieron parar de llorar, fue un momento mágico, Adrien las miró sonriendo, por fin las había reunido, por fin Emely no estaría sola, sabía que Renata era una buena