NAYANos quedamos allí torpemente durante unos momentos. Éramos extraños el uno para el otro, destinados a estar juntos el resto de nuestras vidas. Molesto por la aprensión y la incomodidad, tomé la iniciativa. Después de todo, yo también era un Alfa. Estaba en mi naturaleza.—¿Te gustaría sentarte? — Indiqué hacia el sofá más allá de mi cama cerca del balcón.En su lugar, lentamente rastrilló la mirada de un extremo al otro. No era la persona más paciente, pero me gustaba mirarlo.Parecía grande, pero no amenazante a menos que fuera provocado. Un hombre que llevaba el peso del mundo sobre sus hombros haciendo que se encorvara ligeramente la espalda.Sus contornos parecían mucho más apretados por esa razón. No entendía por qué mis manos seguían picando para deslizar mis dedos por su pelo. Los pelos de mi cuello hormigueaban.Pasaba los dedos por la pared granate junto al arco del armario. Un lado de sus labios vueltos hacia abajo se levantó ligeramente en diversión. Sus ojos se desvia
NAYANo tuve la oportunidad de hablar con Lance durante la reunión, pero cuando encontré a Mara en mi habitación demasiado emocionada de que fuera con ella, me di cuenta de que Lance se tomaba en serio anoche. Realmente quería que me fuera con él.Mi corazón cayó ante la brusquedad de mi partida. Quería ir con mi Mate. Desesperadamente. Pero lo repentino se retorció en mis entrañas.Despreciaba el cambio.—Tengo que hablar con mis padres—. No he tenido la oportunidad de hablar con ellos durante la cena con Fede, Sandra, Lance, Max, Mara y su familia allí.En lugar de que Max visitara la casa de Mara, decidí invitarlos para que se pararan en territorio neutral. Fede intentó hablar de mí y de Lance, pero el resplandor mío lo encerró a pesar de que se rió por dentro.Lo he conocido toda mi vida y era como un tío que siempre me molestaba pase lo que pase y me daba los regalos más extravagantes durante las vacaciones.Sandra estaba embarazada de su primer hijo y tenía unos treinta años,
NAYAMi madre gritó cuando mi última maleta estaba cargada en la parte trasera del Rover de mi padre. Por suerte, Mara comenzó a llorar sin razón aparente, lo que nos hizo reír a todos, aparte de Lance, aligerando el estado de ánimo.Me senté con Mara junto a la ventana. Me molestó un poco que no se sentara a mi lado.—Espera, ¿no quieres sentarte al lado de Mara? — Me preguntaba mirando la tarjeta de embarque.—Tenemos algo de logística que revisar de la reunión antes de anunciarla a la manada—. Max respondió con una sonrisa. Le entrecerqué drásticamente los ojos.—¿En serio? Mara, pregúntale por qué no está sentado a tu lado—. Los Mates no podían mentirse entre sí.—¿Por qué no estás sentado a mi lado? — Me puso el codo en el hombro.—Tenemos cosas que revisar—. Lance respondió esta vez haciéndome que mis ojos se convirtieran en hendijas.Le pregunté a Mara mientras los chicos se dormían un rato en el avión. Parecían agotados. Según Mara, siempre hablaron telepáticamente durante su
NAYADe pronto me desperté de la cama, no era tan cómoda como la cama que tenía en casa, pero al final de todo pude dormir bien, era lo que importaba. Al menos el olor de las sabanas eran agradable, se podía sentir un olor a lavanda.Creo que era la segunda vez que Lance se tomaba la delicadeza de llevarme a la cama. Aún podía sentir su aroma impregnado en las almohadas, como me encantaba su olor… en mi ropa también se podía sentir. En ese mismo instante empecé a buscar el celular que no lo había revisado desde ayer que vine a este lugar.Pude ver que habían muchas llamadas perdidas. Alrededor de diez para ser específica.No tenía ánimos de atender ninguna de las llamadas que había recibido, pues en este momento lo único que quería era estar tranquila. También sabia que a mi madre no me gustaba la idea de estar muy lejos de ella. Siempre ha sido una madre muy protectora, pero también debía de aprender que tarde o temprano estás cosas tendrían que pasar.Mientras me coloco de forma fet
NAYACiertamente puede sentir que es a la Kathy impacta con mi piel, durante una pequeña fracción de segundo pensé que moriría en este lugar. Me había acercado demasiado esas personas, en realidad no sé qué era lo que me pasaba. Enseguida u otro disparo al aire sobre nosotros y seguido de un golpe un poco suave contra ese árbol una vez más. Estaba Super aterrorizada, lo peor de todo es que sabía cómo luchar, pero no me podía enfrentar contra toda esas personas, podría morir en el intento.En ese momento deseaba tanto estar con Lance, estaba muy aterrorizada por dentro, pero tenía que tratar de calmarme pues en estas condiciones no podía hacer nada. Tenía que separar mis emociones de la lógica, enseguida la niebla se apoderó de todo lugar. Un gruñido se pudo escuchar después. Mara saltó sobre mí y me abrazó tratando de tranquilizarme.Afortunadamente como por arte de magia puede sentir el olor de Lance, lo conocía perfectamente y sabía que él podría encontrarnos. Afortunadamente tambié
NAYA —No creas que me enojo se deshizo o algo por el estilo, no, al contrario todavía estoy un poco enojada contigo— se lo dije. —Lo sé, sé perfectamente que no hice lo mejor de todo. Pero mientras estés bien, no importa si me odias yo me conformo con sólo estarte viendo — con ternura me pasó sus manos, esas mismas manos que siempre me hacían sentir protegida por las mejillas. —Pero más sin embargo ha hecho lo que sea al final de todo no te odio para que ya sepas, simplemente me decepcionas— en ese momento o sea que mis palabras habían hecho efecto en el pues se podía notar que su rostro estaba caído y su mirada estaba un poco triste. Su dolor no lo podía evitar, sus ojos se llama vagando por mi cara desesperadamente. Me tomó solamente por mi mentón y me puso un beso fugaz en los labios, puede sentir un montón de mariposas en el estómago, fue una sensación muy extraña, pero admito que me gustó cada segundo que pasaba. Luego de eso se alejó lentamente. Sonreí con una pequeña sonris
NAYADe hecho a medida que nos íbamos acercando realmente parecía más o menos no una caballa sino algo más grande estilo granero, la nieve había cubierto el suelo a su alrededor. La montaña se podían ver al otro lado del extremo como por el horizonte. La copa de los árboles bailan al viento. Incluso había muchas personas afuera. Me sentí con un poco de nervio, estaba vestida con sudadera con capucha y pantalones vaqueros de cuerpo entero. La tierra alrededor de este lugar era bastante plana y había mucha nieve. Habían algunos hombres y mujeres vestidas con pantalones cortos de color negros y camiseta sin mangas, podría escuchar que estaban celebrando algo por los aplausos.No sé si era buena idea entrar a ese lugar porque realmente no conocíamos qué era lo que estaba dentro de ese lugar, no sé si las personas que estaban ahí eran buena hora en malas, pero más sin embargo podía notar que todos eran hombres. Mis labios están temblando del entusiasmo salvaje que podía sentir. Cuando fina
NAYAme había dado cuenta de qué todos los miembros del grupo de élite, incluidos los adultos están sentado en la mesa más cercana a la comida. Pude apreciar que el grupo de entrenamiento había tomado una mesa diferente a la cual habíamos tomado nosotros, a pesar de qué todo entraron juntos. Me perdí en el toque de Lance, a pesar de qué él era el único que quedaba a mi lado. Pues no tenía muchas personas que conocía acá así que seguro me tildarían de la antisocial.—Estaré ahí mismo —señaló hacia el grupo— te daré un momento para que puedas hacer algún tipo de amistades. Su mano temblaron muy agresivamente, después de eso metió las manos en el bolsillo, caminamos junto a la mesa al mismo tiempo.—Me siento extraña, pues todo el mundo me está fijando fijamente— me acerqué a él inconscientemente, tratando de esconder las miradas indiscretas. Las personas lo hacían abiertamente y se podía notar a leguas.—No te preocupes, es totalmente normal que todo el mundo te esté mirando fijamente p