Nuestro amor condenado es protegido por el ángel más hermoso que existe en medio de nuestro limbo.

Atenea

Me es difícil creer que de verdad Dominic se haya atrevido a jugar de ese modo conmigo, yo creí en su palabra cuando él lo único que buscaba era el reconocimiento social, que el mundo se diera cuenta del hombre tan espléndido que es cuando en realidad es un falso, un hipócrita de lo peor. Me duele tanto haber caído en su engaño, fui tan tonta, tan ingenua.

No cabe duda que el mundo está plagado de coyotes que solo esperan la oportunidad de destrozarte para luego abandonarte a la deriva en medio de un mar de sufrimiento, por suerte me di cuenta a tiempo, aunque ahora debo aprender a cómo vivir con este dolor en mi pecho al tiempo que cuido de mi hija.

Sé que esta sensación que me asfixia es porque ella siente lo que está sucediendo, es un ser puro e inocente que no merece nacer al lado de una persona que… no puede ser, Dominic tiene razón; soy demasiado impulsiva y nunca pienso la