La chica entra en ese momento, observa a Jimmy y este se levanta para recibirla, su mirada lo demuestra todo, está enamorada de él. Me encojo de hombros en mi lugar y trato de no verlos mientras siento como sus miradas me atacan un par de veces.
—Te ves hermosa Laurie – murmura Jimmy, me trago las lágrimas y mi propio orgullo y trato de parecer normal.
—Gracias Jimmy – responde ella y su dulce voz lo inunda todo, recorriéndolo suave y sutilmente de una forma que jamás había creído posible.
—Laurie, ¿recuerdas a la señorita Elena Dye? – dice en tono formal, me levanto del sofá y la chica me observa con cierta curiosidad.
—Por supuesto, un placer volver a verte Elena – me saluda y extiende una mano hacia mí, la tomo y la estrecho suavemente contra la mía.
—El placer siempre será mío – contesto c
—Por favor, la cena se enfría – dice Jimmy, tomo mis cubiertos y trato de comer la ensalada que ha preparado Sam mientras tomo pequeños sorbos de vino tinto.Realmente, ahora deseo estar a solas con Jimmy solo para poder hablar con toda liberta y sé que él lo desea también solo que, no dirá más de lo que desea.La cena es tranquila, pero su mirada de perfectos ojos grises ha estado puesta en mí durante más tiempo del necesario y eso me hace sentir tan mal de una forma que no imaginaba posible, pero sucede y no puedo evitarlo es como si tuviese la necesidad de hacerlo y ya, por una razón que solo ella conoce y no compartirá. Sé que soy yo la extraña en esa casa para ella, pero ella es la extraña en esa casa para mí pues conozco más de lo que debería y su forma de actuar tan a gusto me hace saber que aún no ha descubierto el lado oscur
Me dejo caer en ese momento sobre la silla, observo a través de la ventana y veo el sol salir lentamente por detrás de los altos robles, suspiro mientras el cielo comienza a teñirse de un color rosa y morado mientras la luz nos envuelve en su tono dorado espectacular.Sonrió.Escucho las pisadas de Brian al acercarse, me rodea con los brazos por detrás y besa mi mejilla con gentileza, cierro los ojos y disfruto sobre el hecho de tenerlo ahí.—Buenos días, Elena – me susurra, sonrió de nuevo.—Buenos días, Brian – murmuro mientras observo al frente, el sol comienza por levantarse sobre nosotros, hermoso, perfecto, deseaba poder detener el momento allí, viendo como un nuevo día comienza su recorrido sutil y como los brazos de Brian me envuelven haciendo que me sienta tan bien.—Preparare el desayuno, ¿vienes? – pregunta mientras me
Me rodea suavemente con sus brazos y besa mi mejilla con su suavidad, sus labios son fríos, pero puedo sentir aun la sonrisa en ellos que me hace sonreír a medida que las lágrimas se pierden en mi rostro.—Lo que dijiste en mi departamento Elena, ¿es verdad? – pregunta luego de unos minutos de disfrutar solo de nosotros dos, sin nadie más alrededor, sin nadie que pudiese decirme si estaba equivocada o no ahora, la verdad es que no quería descubrirlo y me daba igual estarlo o no porque podía disfrutar de sus brazos a mi alrededor. La pregunta me toma por sorpresa mi cuerpo responde alejándome de él, pero me mantiene pegada contra sus cuerpo.—¿Qué? – pregunto tontamente, mientras olvido como se inhala y se exhala continuamente.—¿Estas enamorad de mí? – pregunta con su tono frio y serio, me rompo en pedazos en ese momento, pequeños
Brian me observa por un par de segundos luego tan solo me rodea con sus brazos y me mantiene así durante más tiempo del que todos creíamos posible. Y ahora y desde mi regreso a casa, me siento tan incondicionalmente bien que tan solo es tan imposible de creer porque, me siento como yo misma y nada más importa mientras los brazos de Brian me rodeen de esa forma… Sé que solo importa él, sé que solo es él y yo y ya, no existe más que eso…—Te amo, Brian, y siempre lo haré – susurro, me aleja de su cuerpo y me observa, sus hermosos ojos oscuros puestos en mí, sonríe y sé que es lo único que faltaba para saber que de nuevo estoy en casa porque él está ahí, porque él no me dejara ir de nuevo y porque sé que me ama como jamás lo hubiese querido imaginar….—Te amo, Elena – susurra, se inclina ha
Tomo lentamente mis maletas, lo único deseo ahora es que aquellas estúpidas lágrimas comienzan a caer por mis mejillas mientras trato de no ver la habitación vacía que tengo a la espalda, pero por favor soy tan patética ahora que me lo permito….Es la habitación más hermosa que jamás haya visto, paredes blancas adornadas con pequeños cuadros en sus paredes desiguales, altos techos de madera con lámparas de araña colgando de él… Una hermosa cama tan increíblemente grande que duele con sus perfectas sábanas blancas y… sé que lo que ahora debo hacer es salir de ahí…Camino lentamente por el pasillo mientras mis lágrimas caen tranquilamente hasta el suelo de madera, mis piernas parecen tan pesadas en algún punto imposible de creer y caigo al suelo de rodillas, no puedo hacerlo…. No puedo marcharme y de
Observo a través de la ventana, el sol se esconde lentamente por los altos edificios de la ciudad más allá de los árboles, más allá de todo. Su brillo dorado hace que todo se vuelva de una forma hermoso y perfecto a la vista, sonrío a la nada y observo las sombras recortadas contra las paredes blancas de mi habitación.El aire frio y acogedor golpea mi rostro un par de veces, se siente tan bien, me hace sentir tan bien…Suspiro.No hay nadie más en casa para ver como mis lágrimas se deslizan suave y sutilmente por mi rostro pálido y cansado, nadie. Dejo que sigan su trayecto, de mis parpados hasta las mejillas y el suelo, es casi como una actividad que deseo ganar he derramado tantas lagrimas que me sorprende que aún me queden tantas.Las luces de mi habitación se encienden en ese momento, parpadeo un par de veces y fijo la mira en las nubes que se arre
***Un día más, he sobrevivido un día más como si eso fuese un gran mérito en mi vida…El frio de suelo ya no me afecta en absoluto, mi mejilla descansa sobre una almohada ¿de dónde ha salido? Un vaso de agua a un lado de mí, las ventanas están cerradas, recuerdo haber corrido las cortinas con más furia de la que se creía o yo misma creía necesaria hasta que mi madre vino a ver lo que pasaba y había descubierto que había arrojado mi ropa por la ventana. Trago, el nudo en mi garganta es aún más grande del que jamás había querido imaginar tan solo estaba ahí, ahogando cada una de mis palabras y ya no podía más, ya no…Mi madre entro en ese momento, traía una bandeja con el desayuno lo dejo sobre la cómoda y yo tan solo rogué porque no me hiciera levantarme y alentarme a comer algo que
Podía sentir las náuseas que me provocaba el olor metálico de la sangre en algún lugar, podía ver la noche cayendo afuera lenta tranquila y sin fin…Podía sentir como mi alma moría a cada paso del reloj…Al final di mi vida por ella, di más de lo que tenía y más de lo que debía y ahora ya no había más que dar, yo mismo sabía que lo había perdido todo incluso antes de empezar con la historia…La amaba, no podía hacer más que eso, no podía hacer más que recordarla mientras mis manos se cerraban alrededor de la copa rota entre mis manos…Miles de posibilidades y había escogido la peor de ellas, la peor… La había dejado partir, había dejado que se marchara sin decir nada más, había hecho que corriera de mi lado, pero no