Una vez en Nueva York, siguieron las indicaciones y llegaron a una casa en las afueras. Si esperaba una mansión monstruosa, quedó decepcionada. Aquella era una casa de clase media. Había juguetes en el jardín y un pequeño niño de no más de dos años en silla de ruedas.
Una amable mujer se acercó a ellos.
—Eres Abi.
Al llegar al aeropuerto fue recibido por Gerrit.—Logramos que le dieran el alta médica antes, Tyler estuvo en el hospital haciendo escándalo, tratando de llegar a ella. Le ha disparado a un par de enfermeras y ha logrado escaparse.— ¿Por qué no me dijeron?—Estabas en Holanda, fue apenas te fuiste hace dos días. Solo te volverías loco de preocupación. He contratado guar
Carly recordaba poco de lo sucedido minutos antes. En un momento había estado saludando a ese amable hombre y al siguiente estaba metida en la cajuela del auto.Pequeños retazos de ambos caminando al garaje, de decirle que necesitaba ir a la tienda…algo también sobre él deteniéndose a cambiar una rueda y llamándola para que le ayudara en algo. La mano del sujeto sosteniendo un tubo y oscuridad.No entendía nada de lo que pasaba.
Alexandria miraba con horror a Niek. Nadie le había dicho que regresaba, aunque tampoco debían hacerlo. Tan solo era la niñera. Había tenido serias dudas sobre aceptar el trabajo en casa de la familia de Ruud. Aunque no se relacionaban de forma sanguínea con Niek habían sido un buen hogar para él.Había tenido dudas, pero fue la matriarca quien la miró en la calle y le ofreció trabajo. Y a ella le contó la verdad de lo sucedido. La mujer lloró con ella, hablaron con la familia quienes entendieron lo que hizo y le aconsejaron charlarlo con Niek. Niek encontró a Alex en el jardín. Su hermosa mujer lloraba y él era el culpable. Se había quedado en silencio cuando debió evitar que se fuera y ponerle las cosas en claro a los hombres a los que amaba como hermanos.—Alex. Abi despertó la mañana del día de la reunión con el arquitecto, sintiéndose muy enferma. Bastian se preocupó, pero ella le dijo que era debido al estrés.Sin embargo, Abi estaba embarazada y quería darle la noticia a su amado Bastian de forma especial. Así que fue a comprar algunas prendas de bebé y las guardó en su habitación. Su suDecisiones
Capítulo final
Abigail Smalls no creía en el amor. La vida y los golpes de esta le enseñaron que el amor—o al menos con el sexo opuesto—, ese era raro y escaso. Y con aquello se había vuelto huraña y desconfiada.Para Abi en su vida solo había un amor cien por ciento real y era el que sentía por su ni&ntild
El resto del día Abi pasó ocupada recapitulando y llegó a la conclusión de qué Tyler la había engañado. En dos años no había salido con mujeres, contaba chistes de mujeres y era…bueno bastante afeminado.No tenía ningún problema con la orientación sexual de una persona, válgame Dios, si consideraba a Tyler su amigo Gay. Y este siempre fue una especie de confidente, veían películas, sembraban flores. De camino Abi iba silenciosa y Tyler quiso romper el hielo.—Lo siento.— ¿Por qué?—Mamá.—Un paseo de todo menos relajante