[DANNA]
(Esa misma noche)
En mi vida he llegado a sentir diferentes tipos de dolores, ese que sientes cuando te rompen el corazón por primera vez, el que te consume cuando pierdes a un familiar como lo es tu abuelo, y el peor que creía haber sentido fue el que pase cuando mataron a mi hermano, pero el dolor que estoy sintiendo ahora es completamente diferente, es tan profundo que siento que me están cortando la piel para seguir avanzando hasta que el dolor se haga más fuerte. No entiendo ¿Cómo es posible sentirme así cuando ni siquiera sabía que estaba embarazada?
Normalmente uno sufre ante una perdida porque tienes un apego emocional hacia esa persona, pero en este caso me entere de la existencia de un diminuto ser el mismo día que lo perdí y duele peor que si hubiera pasado toda mi vida a su lado y luego lo perdiera. No puedo dejar de llorar y Mauro por ende no deja de abrazarme. Es tal la p
[MAURO]Tres días después: 27 de mayoNo creo que seamos capaces de recuperarnos del todo de lo que paso, pero lamentablemente el mundo en el que nos han inmerso no da treguas y si no queremos que se sepa la verdad y lo que nos paso, debemos hacer como si nada hubiera ocurrido. Todavía me queda hablar con Danna y contarle lo que descubrí, pero no encuentro el momento y hoy, es el día menos indicado. Hoy es el día que llega ese importante envió que me han encargado y mi labor es adentrarme en ese submundo para después dar la información pertinente.Ya son más de las once de la noche cuando entro al hotel donde se recibirán la mujeres y a medida que avanzo por el lobby, saludo a los empleados que amablemente me reciben. No tengo idea de quienes saben lo que ocurre aquí y quienes no, pero por si acaso me mantengo callado y sigo mi camino hasta llegar al área
[DANNA]A pesar de que estoy destruida por lo que Mauro y yo hemos vivido, no lo puedo dejar solo en todo esto. Ya es más de medianoche cuando cruzo los pasillos del hotel para ir rumbo a la suite donde sé que él se está quedando, soy consciente de que lo que ocurra esta noche puede cambiarlo todo, hoy es una de nuestras misiones más importantes si es que no es la más importante de todas.Observo la cantidad de hombres que hay apostados en los diferentes puntos de este piso y supongo que fue Mauro quien organizo todo esto. Ellos me sonríen, yo regreso el gesto y cuando llego a la puerta de la suite, uno de esos hombres, el cual es alto de cabello oscuro y ojos café, se acerca a mi —No puede pasar— Me informa y lo miro confundida.—Supongo que sabes quien soy ¿no? — Respondo casi como si fuera una amenaza y él asiente.—Claro que lo sé, pero no puede
[MAURO]Odio que Danna me haya visto en esa situación con esa mujer, pero de verdad no tenia otra opción, si no lo hacia, Usiel hubiera sospechado de mi y todo nuestro plan se hubiese ido a la basura. Corro detrás de él hacia la habitación donde supuestamente esta el “problema” y sé que ella me esta mirando a lo lejos, pero por ahora solo tengo que jugar a ser este hijo de puta que maneja el envió que llego. Abre la puerta, entramos, y al llegar al centro de la habitación, me quedo sin reacción.Una de las cuatro chicas que se quedaba aquí esta tirada en el suelo rodeada por un charco de sangre y al acercarme un poco más, me doy cuenta de que se corto las venas —¡Mierda! — Exclama Usiel y mira a las otras tres chicas —¡¿Qué fue lo que paso aquí?! — Les grita acercándose a ellas —¡¿De donde saco eso?!
[DANNA](Horas más tarde)Ya casi esta amaneciendo cuando después de usar la excusa de que me sentía mal, Mauro y yo nos hemos escabullido del hotel y ya estamos llegando al sitio donde nos ha citado J.K. Se trata de un callejón oscuro lleno de galpones y ubicado en una de las zonas más “calientes” de Miami, de esas donde nadie quiere entrar por equivocación.—No quiero que bajes del auto ¿de acuerdo? — Me pide él y niego.—No, no me pidas eso amor, estamos juntos en esto y tenemos que seguir así— Difiero y una vez que él estaciona frente a la dirección que nos ha dado J.K, Mauro se gira y acaricia mi mejilla con delicadeza.Me sonríe cómplice y abre la guantera del auto para sacar la pistola que tenemos allí guardada —De acuerdo, vendrás conmigo, pero ten esto y no te separes de mi— Advierte y lo
[MAURO]Al día siguiente: 29 de mayoHa sido el día más largo de todos, bueno, tal vez por lo que significa estar en este lugar, la cuestión es que hemos pasado casi todo el día de ayer y la noche en esta habitación de hospital esperando a que J.K. me llamara para decirme que nos podíamos ir. He recibido varias llamadas telefónicas las cuales tuve que responder y explicar lo que estaba ocurriendo. Honestamente tengo demasiado miedo de que nos descubran y que me hagan responsable de cualquier cosa que pueda llegar a ocurrir, pero supongo que no me queda más que confiar en J.K. aunque mis dudas hacia él no se disipen haga lo que haga.—Quiero irme de aquí— Escucho que me dice ella mientras que mira por la ventana.—Yo también hermosa, pero sabes que debemos esperar ordenes— Le explico y de pronto ella se gira para mirarme de frente.—&iqu
[DANNA]Cuando J.K nos dijo que el doctor sabía lo que tenía que hacer, jamás imagine que me dieran una breve clase de actuación de como debía verme después de una reacción alérgica y mucho menos cuando sé perfectamente lo que siente. Tampoco imagine que me darían algo para crear un leve enrojecimiento en mi cara y que todo sea más creíble, pero aquí estamos de regreso en el hotel y dándonos cuenta de que hay más movimiento de lo normal. —¿Qué ocurre aquí? — Le pregunto a Mauro y él simplemente me toma de la mano.—No sé, pero ven, vayamos al piso donde estaban las chicas— Me pide haciendo que nos subamos al elevador.Solo cuando la puerta se cierra él me mira fijamente y me doy cuenta de lo preocupado que está —¿Qué habrá ocurrido? — Murmur
[MAURO]No puedo hacer que nos sentemos a esperar a que J.K. y su gente nos salven, esta claro que para ellos tan solo somos dos fichas de ajedrez que mueven a su antojo y yo no pienso permitir que la gente que esta metida en todo esto nos mate —Amor ¿Qué haces? — Me pregunta ella al verme abriendo todos los cajones de los muebles que hay aquí hasta que de pronto encuentro lo que parece ser una pequeña botella de vidrio en un rincón.—No tenemos armas y si esta gente va a venir aquí a cobrarse lo que paso, es mejor que tengamos algo con que defendernos— Explico y rápidamente voy hacia el baño para abrir el grifo del agua para disimular un poco el ruido y romper la botella.—Esto también puede servir— La escucho decirme y al voltear a verla, me muestra un abrecartas.—También sirve ¿Dónde estaba? — Cuestiono.—Deb
[MAURO]La mirada de Frank se fija en nosotros y de pronto sonríe sin que entienda porque —No los vamos a matar— Habla finalmente.—¿Y entonces? ¿Por qué nos han traído de esta manera? ¿Qué es lo que quieren de nosotros? — Presiono.—Mauro, debes aprender a hablar menos y escuchar más, te aseguro que podrías ahorrarte muchos problemas en esta vida— Me dice.—Habla entonces— Sentencio.—Lo hare, pero primero les voy a contar una historia— Dice y hace una pausa para encender un cigarrillo y comenzar a fumar —Hace algunos años atrás, había un hombre que trabajaba como agente en el FBI investigando una red de criminales que empezaban su negocio lavando el dinero de algunos capos de la droga muy conocidos a nivel mundial, ellos abrían empresas fantasmas, cuentas en paraísos fiscales, y cosas