DIANA
—¿Cómo es eso posible licenciado? — Estoy en el consultorio del abogado Jiménez, les voy a contar que sucedióhace dos días luego de un turno de trabajo en ese asqueroso bar donde soy cajera, odio ese sitio con todo mi ser, siento que es tan denigrante para una mujer un lugar como ese, tenemos que vestir prendas diminutas y sonreír a los clientes aunque yo no participo de los bailes o soy mesera, yo soy cajera juro que busque por todos lados, pero no conseguía nada que me permitiera costear el tratamiento de mamá hasta que un amigo de ella me consiguió este lugar, al principio me negaba a aceptar, pero es que ella se puso tan mal y necesitábamos el dinero ese día llegue a casa muy cansada con los pies matándome a cada paso cuando mamá llegó—Hija llego este sobre para ti, fuiDIANAMe quede sola en media de la nada, en medio del bullicio del tráfico, de la gente que reía, esas personas siguen con su vida mientras la mía se ha detenido, no puedo dejar de pensar en sus palabras, pero es imposible que mamá se haya atrevido a hacerme algo así, las madres no hacen esos a sus hijos, ella me ama estoy segura, pero por otro lado Alan ¡Dios como hice algo así! Si papá tiene razón eso quiere decir que de verdad fui una niña estúpida que no lo dejé hablar y lo juzgue sin saber, necesito hablar con él, me porte como una mujer sin corazón, yo también hubiera actuado de esa manera en su lugar.Estoy bajando del taxi rumbo a su departamento, estoy nerviosa, siento que las palmas de las manos me sudan, tengo el corazón en la garganta es tan acelerado que no sé por dónde empezar,&
DIANADesde el día en que dio esta respuesta, es como si algo se hubiera ascendido en mi mente, algo que me niego a aceptar—Cariño, lo que sucede es que no quiero que pases por eso verme en ese estado, además Mateo me está acompañando. —Se supone que soy su hija, yo debería estar ahí con ella, además la manera en se trata con Mateo me da a entender otra cosa.—Mamá Mateo ¿Es tu novio o estás saliendo con él? Además, que te acompañara a las quimios se para metido aquí todo el día, y lo raro es que no este.—Hija él es un buen hombre ha pasado por tanto por culpa de esa mujer, ya veré que me repara el futuro si es que tengo uno en realidad—Creo que
CAROLINAHace un año y gracias a un detective que contrate, lo encontré así como también descubrí quien era su abogado a pesar de lo marginado de su rostro, por el tiempo que Mateo paso en prisión, era sus ojos tan atrayentes que desde el primer momento quede prendida de ellos, era como si él fuera llama y yo leña, al principio no entendió mi plan, pero poco a poco y gracias a mis encantos lo fui envolviendo, de solo recordar nuestra primera vez juntos me estremezco, he estado con muchos hombres a través de los años, pero con él es diferente, es un sucio, es un grosero, es sádico, es del tipo que te da golpes y me encanta, soy sádica, me gusta el dolor e impartirlo no por algo fui una Madame por tanto tiempo.Estamos juntos en esto desde ese momento, desde el momento en que esos sobres empezaron a
MATEO La beso y la disfruta, muerdo su labio sé que le gusta. —¡Bruto! —Se queja, pero en sus ojos veo oscuridad y deseo, siempre es así, es lo que más me gusta de ella además de su ambición una que mi ex nunca tuvo, ella siempre sumisa, siempre con la cabeza gacha, esperando que yo tomara siempre las decisiones por eso cuando la veía me daban ganas de golpearla hasta que reaccionara, pero ni así, el sexo era aburrido por eso recurría a ser creativo, hasta en esos momentos ella lo arruinaba con sus estúpidas lágrimas y lamentos. —Pero te gusta preciosa—Mientras paso la lengua por su cuello, la siento respirar de manera errática y es lo que yo buscaba, sus brazos se enredan alrededor de mi cuello y aprovecho para tomarla de las caderas presionando con mis dedos su hermoso trasero y la acomodo sobre la mesa del comedor, bajo sus bragas de un golpe y yo mi pantalón sin dejar de besar su
MATEOLa beso y la disfruta, muerdo su labio sé que le gusta.—¡Bruto! —Se queja, pero en sus ojos veo oscuridad y deseo, siempre es así, es lo que más me gusta de ella además de su ambición una que mi ex nunca tuvo, ella siempre sumisa, siempre con la cabeza gacha, esperando que yo tomara siempre las decisiones por eso cuando la veía me daban ganas de golpearla hasta que reaccionara, pero ni así, el sexo era aburrido por eso recurría a ser creativo, hasta en esos momentos ella lo arruinaba con sus estúpidas lágrimas y lamentos.—Pero te gusta preciosa—Mientras paso la lengua por su cuello, la siento respirar de manera errática y es lo que yo buscaba, sus brazos se enredan alrededor de mi cuello y aprovecho para tomarla de las caderas presionando con mis dedos su hermoso trasero y la a
DIANA Quisiera creer que es una m*****a broma del destino, me niego a creer que es verdad, tengo que estar teniendo une pesadilla si eso sería lo más coherente en este momento, no acabo de escuchar lo que acabo de escuchar, mi madre no puede haberme hecho eso, ella no, vamos DIANA no seas estúpida la acabas de oír, siento los ojos llenos de lágrimas de decepción, de impotencia y rabia, fui tan estúpida realmente lo fui. —Estoy segura de que aquí deben estar y tú ponte ropa interior y ayúdame a buscar, sabes muy que esos son los boletos dorados a la ansiada libertad, llevo meses aguantando hacer el papel de madre abnegada, extraño mi mundo, extraño los clubes donde yo era la majestad. Ella me ama, es mi madre, las madres no pueden ver a sus hijos así, mi madre no puede ser un monstruo. —Siempre serás mi niña bonita, mi princ
Abro la puerta de este lugar decidida a que sea el último día e instante que estaré aquí, tome una decisión no sé si será bueno o malo, pero si el dinero fue el motivo de su reaparición en mi vida entonces que también sea el motivo para desaparezca para siempre, que se dé por satisfecha, escucho ruidos en la habitación que ocupo y la veo moviendo todo de arriba para abajo, ya nada me sorprende ni siquiera su cara de nerviosismo al verme parada en el marco de la puerta, ahora reconozco y puedo identificar todos los detalles que antes deje pasar por alto cegada por ese amor mal sano y trangisversado de manera enferma.—¿Se te perdió algo MADRE? — Eso último lo digo con mucho pesar porque esa mujer que se arregla el cabello frente a mis ojos es cualquier cosa menos una madre hasta la perra más callejera del
MESES DESPUES—Señorita, dos cafés y unos cachitos de mantequilla.—Listo ya tomé su orden en unos minutos más está su pedido. —Anoto lo que me pidieron y me doy la vuelta, porque oigo que alguien me llama.—DIANA la mesa cuatro, quiere más café y unas empanadas de carne.—Claro Allison no hay problema, ya voyEsto de ser mesera es mil veces mejor que cajera de un antro de mala muerte, no he tenido problemas con nadie y nadie se mete conmigo, estoy trabajando en un restaurante familiar, a veces los niños suelen ser algo especiales, pero algo que aprendí de mi niñez y gracias a mis padres es que si lo escuchas atentamente, los miras a los ojos y le das una sonrisa para calmarlos mayormente funciona no importa que tengas que buscarlos deba