— No llores princesa, por favor
— Es que papi estoy estoy muy feliz – abrazando a Mariam— ¿De verdad mami, yo voy a tener un HERMANITO ?—resaltando esas última palabra
— Claro princesa a este Diana Diana— se quedó helada como sorprendida la primera vez no supo cómo reaccionar porque fue durante la adrenalina del confortamiento con William pero ahora no podía ocultarlo si no fuera por Diana lo hubiera hecho pero no podía evitarlo su princesa tenía que ser parte de esto lo más que pueda
— Mami, ¿Estas bien? Papi mi mami— por unos segundos se asusto
— Mariam ¿Que sucede? — Le dijo William preocupado que pueda ser algo malo
— Princesa siente esto – tomo la mano de Diana y la puso
—¿Ya lo arreglaste?— hablando por teléfono—No hubo necesidad dicen que los resultados no son concluyentes —Habla el hombre al otro lado de la línea—Eso ¿Quiere decir que?— con una sonrisa diabólica—Si así es, sigue la siguiente fase de tu plan, ya estoy en eso realmente todo va buen camino, enserio que si se da como se ha planeado por Dios mujer que eres una endemoniada—Nada de endemoniada, solo una mujer enamorada que es distinto—Tanto por ese doctorcito yo te puedo dar lo que él no quiere y no sería ningún sacrificio al contrario—saboreando sus propios labios—, ese doctorcito es un imbécil por no aprovechar los placeres que le da la vida—Contigo ni ebria o
Se despido de su princesa y salió de esa casa rumbo al auto William miraba por la ventana y veía como Esteban la recibía con un beso— ¿Que se creer ese imbécil?, Que necesidad de traerlo hasta aquí — Un enfurecido William tras ver a Esteban por la ventana— Creo saber el motivo —Le dice Manuel a William — Ahora que sabelotodo— A que así estamos entonces no te digo nada— Ya amigo disculpa es que me da rabia ver a ese tipo por aquí y encima ella lo recibe contenta con los brazos abiertos— Eso amigo se llama celos en su máxima expresión, bueno te decía creo saber porque ella est&aa
— Olvídalo, el modelaje no es para mí princesa y no la utilizaría de esa manera, ¿Estás loca? —Un muy irritado William—Está bien suena a locura, solo quería ayudarDiana se la pasó todo lo que restaba de la tarde, contándole a los gemelos de su mamá y que tendría un hermanito y los gemelos le explicaban que si era hombre tenía que enseñarle a jugar con los carritos, así que la tierna Diana empezó a jugar con ellos aunque nunca le gustaron, en eso se acerca William— ¿Qué haces mi princesa?—Papi, los niños ¿Pueden bailar valet?— mmmm— se tocó el mentón una y otra vez con el dedo pulgar de la mano derecha— Si princesa si así es
Por un lado estaba feliz, le encantaba despertar y que su madre le preparara el desayuno la consintiera se sentía como la niña que nunca pudo ser gracias a los decidíos de la vida pero por otro lado estaba Esteban era su novia y digamos que vivía con él y también tenía que pensar en eso, el había apoyado en sus peores momentos no podía dejarlo así nomas de esa manera además sabia lo encantado con que estaba el que vivieran juntos aunque no durmieran en la misma habitación— Mamá ¿Me das unos días para pensar bien en eso?— Está bien hija, tal vez no tengo derecho a intervenir en tu vida pero sería muy importante tenerte cerca y no sé y ayudarte al principio— Pero déjame pensarlo, ¿ sabe
Esa noche Esteban había dormido como un angelito si bien Mariam le había confesado que no lo podía amar , si le había dicho que lo quería con todo su corazón y para el eso era suficiente, además entendí que después de todo lo que ha pasado ella el decir que no volvería a amar es lo correcto pero lo quisiera era lo mejor que le había pasado en mucho mucho tiempo, la última vez que creyó querer a una mujer esta lo rechazo y lo abandono por seguir sus sueños pero ahora estaba Mariam dispuesta a luchar por su relación había hablado con un psicólogo amigo suyo que cuando una mujer sufre todo lo que ella ha sufrido muchas veces cierran su corazón y se niegan a darse una oportunidad con alguien distinto porque vivirían pensando que ellas tiene la culpa de l
— Toc, toc – tocando la puerta del consultorio de Esteban en el hospital— Pero que sorpresa más hermosa mi amor— dándole un hermoso beso— y ¿tu mamá?, pensé que venias con ella a la ecografía— La verdad que tuve una mejor idea y vine a buscarte a ti para que me acompañes— mostrándole una dulce sonrisa que a el tanto le gusta— ¿Es enserio?, no puedo creerlo claro que gusto más bien me encantaría— alzándola en brazos por la euforia— Entonces vamos que ya es hora de mi cita y este bebeé de aquí – señalándose el vientre— Quiere que lo conozcamosSalieron de la mano , ante la mirada de las enfermeras que deliraban por el pero sabían perfectamente que
Luego de salir del consultorio andaban muy felices de la mano ante la mirada de algunas curiosas que veían el anillo en mano de Mariam murmuraban como por dios lo atrapo, es un Ángel, que pena yo que soñaba con el todos los días, cuando bajaban y llegaron al primer piso y sonreían como un par de adolescentes y conversaban de cosas de niños, como el color azul, el balón que Esteban le iba a comprar y mandar a autografiar por un amigo y paciente suyo de apellido guerrero, iban muy felices hasta que antes de salir por la puerta delante del consultorio vieron bajar a William eso les quito la sonrisa y tratando de calmarse y tomar las cosas con calma y viendo que Mariam se quedó congelada prácticamente— ¿Qué haces aquí?
— Ya llame a su amigo, ya está llegando – no creo que pueda manejar en estas condiciones— Dime muchacho porque los hombres somos tan idiotas, porque no apreciamos a una buena mujer cuando la tenemos delante nuestro, ¡dime! — maldita voz quien es— Bueno señores, quiero agradecerles su presencia hoy, esta noche nos vestimos de lujo y tenemos el gran honor de presentar como siempre al señor “SANTIAGO CRUZ” un fuerte aplauso por favorSe oyen aplausos y bulla de la gente emocionada— Buenas noches a todos es un honor estar aquí, hace mucho tiempo le prometí a mi amigo Ignacio que luego de mi gira por Latinoamérica, regresaría a donde todo empezó y como muestra de mi cariño y agradecimiento a su gran apo