Erik se puso su chaqueta cuando yo me levanté del sillón y cogiendo mi esposo mi brazo con su mano, abrió la puerta de su despacho marchandonos de él pero antes parándose delante de su secretaria para entregarle los documentos que yo le acababa de firmar para que los llevará al notario ese mismo dia. Nos acercamos hacia el lugar donde estaban los ascensores para bajar hasta el parking donde Erik tenía su coche aparcado, cuando llegamos abrió la puerta para que yo me sentara dentro sentandose él en el asiento del conductor marchandonos después del edificio de los Miller. Erik estaciono su coche delante de un restaurante que estaba en las afueras de la ciudad, bajamos los dos del vehículo entrando en aquel local, recibiendonos un camarero — Hola señor Moore, nos alegra que vuelva a nuestro restaurante — le dijo aquel hombre, quedandome extrañada ya que yo nunca había pisado ese local— Gracias Pietro, llevamos a mi mesa por favor — contestó ErikUna vez que llegamos Erik abrió la silla
Mario y Bianca se marcharon de aquella sala, pero no sin antes de que Mario le diera un fuerte puñetazo a la pared fijándome en la sonrisa que Erik tenía en sus labios. Después de ver cómo se encontraba mi padre y de hablar con el médico que lo trataba, nos marchamos del hospital subiendo al coche de mi esposo, aunque mi madre no me dijo nada, yo sí sabía perfectamente lo que ella pensaba por las miradas que las dos nos hacíamos. Una vez que llegamos a donde vivían mis padres, mi madre bajó del vehículo sin despedirse de Erik dirigiéndose hacia la puerta de la casa, quedándome yo dentro del coche mirando a Erik— Cuando salga de trabajar vendré a por ti, pero espero que no me traiciones si quieres que Miller salga de la cárcel — me dijo mi esposo— No sucederá nada puedes estar tranquilo, pero espero tener noticias pronto de su liberación — le dije, cogiendo mi esposo mi barbilla con sus dedos obligándome a mirarlo a los ojos— Yo haré mi parte, pero espero que tu hagas la tuya, ahora
Cuando esa noche me acosté en la cama, sabía que apenas dormiría ya que necesitaba saber como estaba Kevin, y si Erik cumplio su palabra o aun seguiría el hombre que yo amaba en la cárcel. Pero lo único de que estaba segura es que yo estaba viviendo una de las peores pesadillas Al día siguiente Erik me despertó metiendo la mano entre mi braga, me las quito embistiendo seguidamente sin darme ninguna tregua, cuando por fin acabó se levantó de la cama, entró en el cuarto de baño, escuche el correr del agua de la ducha mientras yo me quede en la cama, viendo después como mi esposo regresaba a nuestro dormitorio— ¿Bajas a desayunar conmigo? — me pregunto— Si ahora voy, voy a darme una ducha primero — le dije levantándome yo de la camaUna vez que ya me duche y me vestí, me fui del dormitorio hacia la cocina donde Erik ya me tenía preparado una taza de café caliente– Voy a ir a la casa de mi madre para irnos las dos después al hospital — le dije— Está bien, yo te llevo ¿qué te parece s
Me marché del cuarto de baño volviendo al dormitorio, fijándome en que Erik todavía seguía durmiendo y agradeciendo que así fuera, porque si se despertaba, estaba segura de que me volviera a hacer lo que hace unos momentos hizo conmigo y con mi cuerpo y sabía que no podría volver a aguantarlo. Me vestí despacio y sin hacer ningun ruido, cogi mi bolso y me marche del piso sin hacer ningún ruido, Ya en la calle anduve unos metros hasta que pare a un taxi que pasaba por allí en esos momentos, me subí a él dándole al conductor la dirección donde vivían mis padres, una vez que llegamos, le pagué al taxista, baje del vehículo dirigiendome hacia la casa tocando el timbre varias veces muy nerviosa, temiendo a que mi esposo se hubiera despertado y fuera a buscarme. Cuando abrió mi madre la puerta entré enseguida, cerrando de un portazo, quedandose mi madre extrañada por mi accion— ¿Qué pasa cariño? ¿tu esposo te persigue? — me pregunto— No mama, Erik está en casa durmiendo, se ha cogido va
Después de decirme Miller lo que había planeado hacer, me quedé sin saber qué más decir, ya que cuando mi marido se enterara que estaba viviendo con el padre de su enemigo, temía lo que pudiera hacerle. Me marche del despacho acercandome hacia los ascensores, una vez que llegue a la planta y baje, me fui acercando hasta la puerta de la sala donde mi padre estaba, abriendo de pronto la puerta mi esposo, mirándonos los dos a los ojos— ¿De dónde vienes? he salido para ver donde estabas y no te he visto en la sala de espera — me dijo— Hemos ido a hablar con el director, quería saber si voy a volver a trabajar — respondí— Le habrás dicho que no, ¿verdad? no necesitas trabajar para nadie, ya te estoy manteniendo yo, no hace falta que trabajes, — me dijo ErikNos quedamos los tres casi una hora dentro de la sala donde estaba mi padre cuando se abrió la puerta de pronto entrando mis amigas Bianca y Melody, abrazandonos las tres.— Hola Loren ¿y mi sobrino, como está? — preguntó Bianca pasa
Nos marchamos mi suegra y yo de su dormitorio después de hablar tranquilamente volviendo al salón donde estaban mi marido con mi suegro sentados cada uno en un sillón, entramos la madre de Erik y yo acercandonos hasta el sofá sentandonos al lado de mi esposo, mirándonos el padre de Erik con extrañeza al vernos a mi y a mi suegra muy serias— Cariño, por favor lleva a Lorena al hospital, yo creo que en estos momentos tan difíciles debe estar con su madre — le dijo mi suegra a su esposo— Mi esposa no ira a ningun sitio mamá, si alguien tiene que acompañarla ese seré yo que soy su marido — respondió Eric enseguida un poco alterado por lo que su madre acababa de decirle a su marido— Erik hijo, necesito estar a solas contigo, tu y yo tenemos que hablar seriamente, así que he decidido que sea tu padre quien acompañe a tu esposa al hospital, y no quiero escucharte decir nada más, una vez que hablemos haz lo que quieras, pero ahora tu te vas a quedar conmigo ya que tenemos muchas cosas de q
Mason Miller paró su coche enfrente de la casa de mis padres, bajamos mi madre y yo de su coche dandole las gracias al despedirnos de él, una vez que entramos mi madre se fue a su dormitorio a dormir un poco ya que estaba muy cansada por haber estado en el hospital y en aquella fría sala todo el dia. Yo me fui a mi dormitorio, me senté en la cama agradeciendo por tener a tanta gente buena de mi parte apoyándome y ayudándome en la difícil situación en que me encontraba por culpa de mi esposo, ya que de verdad los necesitaba. Me levanté de la cama y me marché de mi dormitorio al escuchar que me llamaba mi madre desde su dormitorio. Me acerque sentándome en un lado de la cama ya que mi madre me lo estaba pidiendo.— Lorena hija ¿de verdad que no le vas a decir a Kevin que estás aquí? — pregunto— No mamá, no le voy a decir nada, ahora descansa — le dije— Deberias decirselo Lorena, ese hombre te ama — me dijo— A Kevin lo metieron en la cárcel por atreverme a contradecir a Erik y no quie
Entramos dentro del despacho del director del hospital, entrando poco después mi amiga Bianca, mirándola los policías con extrañeza — ¿Quién es usted? — le preguntó el policía a mi amiga cuando ella entró — Soy una amiga de Lorena y enfermera de este hospital — contestó ella — ¿Sabe usted algo del asesinato del señor Marin? ¿Trabajó usted anoche en el hospital? — le pregunto a mi amiga — No, he entrado esta mañana a trabajar, pero seguro que ha sido cosa del marido de mi amiga, últimamente él le daba muchas palizas a mi amiga aunque esta embarazada y no la dejaba hablar con nadie, es un maltratador — contestó mi amiga, mientras me abrazaba — ¿Sabe lo que está diciendo? si acusa a alguien sin tener culpa ninguna, la podriamos acusar de falsas acusaciones — respondió el policía — Sabe de qué habla mi empleada agente, el esposo de Lorena la maltrata, la humilla y tenemos pruebas de ello, yo mismo le he hecho un informe médico para que lo denuncie — dijo el director del hospital —