—querida ¿Estás embarazada?— pregunta Anastasia, literal está sorprendida y más porque Miguel le confesó lo que pasó con Dulce, aunque casi lo mata, pero tuvo compresión, el amor es algo que se sale de las manos y más si hay un deseo incontrolable—yo...— murmura Dulce, siente sus palabras atoradas —¡Así es!— dice Mariano y Dulce María lo voltea a mirar con ganas de matarlo —tiene poco, cómo se sentía mal, una prueba de sangre reveló el embarazoMiguel no deja de mirar, el hombre ni siquiera parpadea, está tan, pero tan impactado que Dulce siente que esa mirada congela sus huesos, que hace sentir débil sus piernas, pero sabe que debe ser fuerte a pesar de lo que siente por Miguel, le dolió mucho que haya elegido a Natalia.—disculpe señora de Parrow, pero ya me tengo que ir. Mariano por favor entrega el regalo, un permiso— dice y da la media vuelta —¡Espera...!— Anastasia se acerca rápidamente y toma de la mano —necesito que hablemos Dulce María— la voz de Miguel es firme, y es imp
Dulce Maria traga grueso, y luego fija su mirada en el agarré de Miguel, imposible que su respiración no se agitará ya que frente a ella está el hombre que ama enloquecidamente.Pero se suelta de su agarré como gesto de rechazó. —no hay nada de que hablar, evitemos problemas.— dijo tajante y camina hacia la salida, pero Miguel no le permite que lo deje hablando a solas, porque la agarra y la carga como un bulto para llevarla hacia la terraza de la clínica —¡Te pasas Miguel!— patalea muy enfadada, su rostro está enrojecido hasta las orejas —no me das otra opción, es importante que hablemos —¡No hay nada que hablar!— dijo furiosa —si no quieres que mi padre te asesine, entonces bájame—pues que me mate, pero que se asegure de hacerlo bien— la voz de Miguel es prepotente y Dulce no quiso hacer más fuerzasCuando Miguel llega al lugar, inmediatamente la baja y tomándola por sorpresa, la acorrala. —¿Qué haces?— musitó Dulce al percibir ese acercamiento peligroso—te juro que quiero ale
Dulce no sabe qué hacer, no quiere mentirle a Miguel y más ahora que se dijieron la verdad de lo que sienten, pero también recuerda lo que le dijo la señora Anastasia de Parrow, así que literalmente se pone nerviosa.—te juro que no esperaba ser padre aun, pero es cierto lo que dicen "los hijos son una bendición"—Miguel yo...— intenta hablar, pero el hombre la calla al colocar el dedo índice sobre sus labios —no digas nada, en este momento voy a terminar mi relación con Natalia, voy a aclarar todo este asunto y volveré—Miguel...— musitó, pero él lo que hace es besarla y ya valió madre, porque ambos se sumergen en ese beso, sus lenguas hacen una perfecta combinación y todo se enciende, llamas infernales de deseo hicieron que Miguel Parrow, la cargará y ella envolviera sus delgadas pierdas en la cintura de élMiguel está muy entusiasmado, y la quiere hacer suya ya, pero como es de día, y están en una terraza, dónde claramente hay edificios altos alrededor, es posible que alguien los
—¿Sorprendida de verme, estimada, señora Hortensia?— pregunta siendo muy arrogante, literal que la asustó mucho —¿Se quedó muda?— pregunta ya que ella está en total silencio, así que para romper el hielo, sonríe muy nerviosa —para nada... Es que tú visita me ha sorprendido Miguelito—¿Puedo pasar?— Miguel ni siquiera parpadea, pero sabe que debe cuidarse y no dar un falso movimiento —sí, sí... Claro, adelante que vergüenza contigo— se hace a un lado y Miguel ingresa a la casa —¿Dónde está mi amada?— pregunta sonriendo diminuto, causando temor en la señora Hortensia —¿Mi hija? Sí... Amm espera y la voy a buscar—No. Descuide, mejor tome asiento y hablemos lo que han planeando de la boda— Miguel toma asiento en el gran mueble y se cruza de piernas, por lo tanto, la señora Hortensia palidece, jamás había visto a Miguel tan serio y sabe que algo está mal —pero... Pero voy a llamar a Natalia, ella se pondrá feliz de verte—descuide, tome asiento y hablemos— le pide y Hortensia mira
—tienes razón Selene, lo mejor es que salga de dudas, voy a casa de esa mujer sin importar lo que me diga —no vayas sola por favor, pasa por mí y te acompaño, después de todo es mi cuñado—esta bien, no tardo— Dulce cuelga la llamada y sus manos tiemblan, ya que no está preparada para lo que pueda encontrarse en esa casa, sin embargo quiere sacarse esa espina matando la duda —¿Qué sucede con mi hermano?— Massimo fija su mirada en su esposa —Dulce se quedó esperándolo en el apartamento, según ellos se habían reconciliado, no sabemos qué sucedió al fin —no vayas sola mi reina, llama a mi tío Leandro y a mi padre—llamaré también a mí papá, porque no quiero que le pase algo a Miguel, juntos podremos hacer algo— Selene inmediatamente empieza a comunicarse con la familia Parrow y VillarrealMientras que Massimo tiene un mal presentimiento, sabiendo que su hermano quería estar totalmente con Dulce, entonces no comprende por qué no llego al apartamento.Minutos después...—¿Y si está con
—te dignas a despertar, pensé que me iba a tocar quemarte en tu profundo sueño, pero que afortunado soy— sonrisa maliciosa —podre escuchar tus gritos de súplica— Dani se acerca a Miguel, el cual está amarrado a una silla completamente, y miro de manera fugaz a su alrededor, se percata del galón de gasolina que hay y que Dani tiene un encendedor en su mano derecha, por lo tanto, Miguel intenta soltarse, pero es en vano —¿Qué mierdas creés que estás haciendo?— Miguel lo mira con un odió infernal—sabes, no soy tan cruel, así que te diré un poco de mí. Desde niño nací con un defecto, mi apariencia es de una mujer, defecto del cual se aprovechó Natalia. Cómo todos me rechazaron, incluso mis padres, mi vida giraba entorno a Natalia, pero me canse de ser su juguete, siempre hacia lo que ella me pedía, ¿Y para qué? Tan solo se burló de mí, me tenía como banco, todo el tiempo dinero para sus costosas compras, todo para lucir bien para tí. Según Natalia, quería seducirte y casarse, contigo
Las llamas han consumido la puerta de madera, por lo que Miguel cierra fuertemente los ojos.Los escoltas, cabezas de todo un imperio de protección, se comunican para poder rescatar a Miguel Parrow, debido al detector de cuerpos, gracias a la alta tecnología de Maskyn Villarreal, pueden detectar desde esa altura que Miguel Parrow está en movimiento.Al ver que las llamas están haciendo más estragos, varios hombres empiezan a bajar cuidadosamente mientras un lazo profesional lo sostiene sus compañeros y todo se vuelve como una misión de película.El humo está ahogando a Miguel, por lo tanto, sus ojos se cierran y se abren lentamente, como si estuviera luchando por mantenerse despierto, y sin poder hacer nada el fuego se acerca.—perdóname Dulce Maria— susurra mentalmente y queda inconsciente por culpa del humo.Los hombres logran ingresar por el tejado pero no es tan fácil, todo se está complicando.Afortunadamente no hay gas en la casa abandonada que podría provocar una explosión, per
—tendremos mucho tiempo para ambos— interrumpe Miguel— pero lo que no puede esperar son mis ganas de besarte, mi Dulce María.Miguel la atrae y ella se pierde en la guapura de su hombre, dejando su incertidumbre a un lado y dejándose llevar por ese beso de amor, de esos besos que llegan al alma haciendo olvidar los malos ratos. ¡Qué lindo es el amor!—no quiero estar más lejos de ti, quiero que seas mi esposa. Vamos a vivir juntos, te prometo que te voy a hacer feliz, mi Dulce.—vamos con calma, mi amor, no me voy a escapar.—pero eres hermosa, y ese Spencer quiere contigo. Si te sigue llamando, prefiero ir a prisión por matarlo con mis propias manos a resignarme a verte en los brazos de otro hombre — suspira y la sostiene de la cintura —¿Me perdonas?— Miguel se siente mal, sabe que metió mucho la pata con Dulce María.—te amo y lo importante es que has reaccionado.—comprendo lo que me quieres decir, pero si hubiera aceptado antes mi amor por ti o hubiéramos hablado con sinceridad,