PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 56. ¿Estás listo?Jhon Hopkins no esperaba que nadie lo entendiera, porque después de todo Dandara no era hija de nadie más que suya. Sin embargo, extrañamente, la única persona que lo entendía era uno de los que más lastimado iba a salir de todo aquello.Y a lo mejor er
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 57. Una despedidaCameron miró el expediente frente a él y luego al hombre que se lo estaba entregando.Podía hacer las cosas bien, y eso significaba que, en el mismo momento en que se cumplieran aquellos tres meses que John Hopkins le había dado, tenía que entregarle s
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 58. Corazones rotosDandara cerró los ojos por un segundo. Aquello tenía que ser una broma. Tenía que ser una maldit@ broma o había despertado ese día en una realidad alternativa, porque las palabras de Cameron no tenían ningún sentido para ella.—¿No puedes quedarte con
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 59. La mitad del corazónCinco años despuésCameron miró el reloj y se apresuró hacia la puerta, solo para sentir un cojín chocando contra su nuca.—¿Y mi beso? —se escuchó una voz dulce y tierna; y él se dio vuelta muerto de risa para levantar en brazos a su sobrina.—¡
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 60. Un proyecto importantePodía parecer que sí era capaz de elegir, pero la realidad se mostraba muy diferente. Nadie con tan poco tiempo en aquel despacho de arquitectura conseguía un proyecto grande en tan poco tiempo, aunque fuera una simple asesoría. Así que Cameron
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 61. Un reencuentro inesperadoAclaremos lo primero y lo más importante: Cameron era, por suerte o por desgracia, un hombre de palabra, así que en aquellos cinco años no había vuelto a tener ningún contacto con Dandara.Eso no significaba que no la extrañara hasta el inf
PRINCESA... DE DÍA. Intereses acumulados de cinco añosLos labios de Cameron se separaron, pero fue incapaz de articular una frase, una palabra, cualquier cosa.Habían pasado cinco años, y aquella mujer seguía teniendo la capacidad de deslumbrar a cualquiera que se le cruzara.Estaba más linda, era
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 63. Un candidatoCameron se dio la vuelta, un poco sorprendido y otro tanto incrédulo, al darse cuenta de a quién pertenecía aquella voz. Se encontró frente a un hombre mayor, cansado, y con una expresión evidentemente estresada.—Señor Hopkins...—¡Te hice una pregunta!