PRINCESA... DE DÍA. ¿Algo que quiera decirme?Cameron apretó los dientes, porque por segundos a veces sentía que no podía respirar. Que le hubieran soltado las manos de la espalda era un gran avance, pero eso no quitaba el hecho de que un disparo a menos de cuatro metros con una nueve milímetros, es
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 23. Un hombre terco y una mujer inocenteY Billy lo había grabado, ¡pero por supuesto que lo había grabado! porque era una de las cosas más graciosas que había visto en su vida. Los hombres tercos no solían ser muy simpáticos, pero detrás de aquel cristal desde donde pod
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 24. Una comitiva de ayudantesPor supuesto que era una afrenta mayúscula, la más grande que podía hacerse a un detective que estaba acosando a alguien que creía culpable en una sala de interrogatorios, ¡y por supuesto que Hover quería hacer cualquier cosa en el mundo men
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 25. Un bono por riesgo laboralY por supuesto que en aquel momento John Hopkins hubiera podido investirse de padre sobreprotector y decir que no, pero la realidad era que después de todo lo que había pasado el cuerpo le estaba pidiendo un trago fuerte y él no era quién p
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 26. El familiar más cercanoMenos de dos minutos habían pasado cuando Chiara Keller atravesó la puerta de aquella pequeña casa y ayudó a su hija a salir de debajo de la mole que era Cameron Lake; y menos de cinco hasta que llegaron los paramédicos a toda prisa. Le dieron
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 27. Síguele el juego—Mamá, yo no... —intentó hablar Dandara y Chiara levantó una ceja divertida en su dirección.—Ni siquiera intentes negarlo, estabas a punto de preguntar si no podía ir un enfermero en lugar de una enfermera.—Es que Cameron es grande, ¡ni yo puedo co
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 28. Un gemido de satisfacción.Quizás en cualquier otro momento, Cameron Lake se habría dado el gusto de ponerse sexi, coqueto y descarado, pero si era sincero tenía que reconocer que aquella costilla rota le dolía como el demonio y que lo único que quería era que lo dur
PRINCESA... DE DÍA. CAPÍTULO 29. FamiliaDandara lo vio ponerse pálido en un segundo, sujetándose el torso como si de repente la herida doliera demasiado o no pudiera respirar. Sin embargo, al primer movimiento que hizo para alcanzar las llaves de su auto, la muchacha se las quitó de las manos.—Cam